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Nos encontramos con Kallias. Que estaba descansando en el metro de la ciudad. Ahí se refugiaba la gente. Se encontraban padres y niños. A Kallias le fastidiaba demasiado que por la noche los niños lloren, eso hacía que despertara de mal humor. Por lo cual la gente pensaba que era un amargado.

-Disculpe señor Kallias...- Se acercó un chico de una manera muy tímida.

kallias dirigió su mirada hacia ese chico. Tenía el pelo rubio, y unos ojos azules muy lindos.

-¿Necesitas algo, Arien?- Miro fijamente a Arien. -No es necesario que te digas de una manera tan respetuosa hacia mi.- Dijo con un suspiro.

-A-Ah... disculpe...- Dijo avergonzado.
-Necesito su ayuda. No entiendo muy bien los Arcanum luminis.- Se sentó al lado de Kallias.

Kallias suspiro, y se acomodo para explicarle de una manera más sencilla a Arien.

-Arien, ¿exactamente que no entiendes?- Dijo suspirando. -Tienes 20 años, ya deberías de saber. ¿No?- Dijo de una manera muy obvia.

-S-Si... pero no entiendo exactamente cómo funcionan las habilidades- Dijo Arien. -Me refiero, ¿como puedo saber si mi portador me dio una habilidad defensiva, curativa u ofensiva?- Dijo jugando con sus dedos.

Kallias se quedó callado por un momento, y luego de eso suelta una risa.

-Se supone que tu ventana de estado, o tu sistema, simplemente lo puedes ver.- Dijo Kallias. -Puedes incluso comunicarte con ellos- Kallias dijo, sacando una piedra llamada ignis lapidis.

Arien se queda perplejo al ver esa piedra.

-¿Y esa piedra preciosa? ¿Para que sirve?- Dijo Arien tocando la piedra.

Kallias sonrió por un momento. Pero luego dejo la piedra a un lado, y le intento explicar de la manera más sencilla posible.

-Bueno, tendras que hacer una misión de relleno. Con esto conseguirás esta piedra, y lograrás comunicarte con tu portador.- Dijo mirando hacia la piedra. -Por cierto, ¿como se llama tu portador?-

Arien miro fijamente a Kallias, y luego de eso sonrie. -Mi portador se llama Bellator.-

-Oh, entonces es un guerrero.- Dijo Kallias. -Tus habilidades son de lucha.- Dijo Kallias, para luego levantarse y marcharse.

-¿Como lo sabe...?- Susurro Arien, para luego intentar buscar la misión secundaria.

Nos encontramos en un lugar lejano. Era una realidad diferente. Ahí vivía una chica de pelo azabache, y ojos rosas. Gracias a su poder, puede combatir dentro de una realidad diferente. La chica era hermosa e inteligente, y realmente destacaba en sus habilidades de lucha.

-Nunca podré entender por qué tú realidad se ve tan...- Miro por todos los lugares -simple- Dijo Calia.

La chica de ojos rosas se gira, mirando fijamente a Calia.

-¿Eso realmente te molesta?- Dijo la chica, arqueando la ceja. -Si de verdad no te gusta, entonces no me queda otra opción que sacarte de aqui.- Dijo sería.

Calia la miro fijamente, y de un momento a otro, empezó a reírse.

-Lo decia de broma. Aunque me gusta demasiado como es que estamos en un bosque...- Dijo admirando los arboles.

La chica de ojos rosas sonrió, y miro hacia otro lado avergonzada.

-Gracias...- Dijo de manera tímida.

En otro lugar, Arien estaba intentando hacer la misión. El tenía que luchar con varios monstruos por toda la ciudad. Ya llevaba un buen rato luchando, hasta que escucho el grito de alguien.

-¡Ayuda!- Grito una voz femenina. Al parecer era una niña.

Arien dudo en su rescatar a la niña, o quedarse luchando con los monstruos. De todos modos no era su problema. Pero luego de unos minutos, Arien fue corriendo hacia esa voz.

-¡Tranquila!- Corrió Arien.

De pronto, Arien se quedó parando al ver un chico de pelo blanco, ojos morados, y unas fracciones muy lindas.

-T-Tu..- Dijo Arien. -¿Quien eres?- Miro fijamente al chico que se acercaba con la niña en brazos.

-"El chico tiene un aura muy fuerte"- Pensó Arien un poco nervioso.

El chico albino se quedó mirando fijamente hacia el rubio.

-¿Por qué estás tan interesado en saber mi nombre?- Dijo el albino. -Pero si tan interesado estas... me llamo Zyran- Sonríe.

-Ah...- se quedó mirando fijamente. -Zyran, si quieres llevar a esa niña con sus padres, prueba a ir en el metro de la estación Escarlata- Dijo Arien intentado ayudar al contrario.

Zyran se quedó mirando fijamente hacia Arien, dudando un poco de lo que dijo el rubio.

-¿No será alguna trampa?- Arqueo la ceja Zyran.

Arien se frunció el ceño, y luego se cruzó de brazos.

-Si quieres te llevo conmigo- Dijo Arien.

-Bien.- Dijo Zyran para después seguir a Arien.

En unos minutos, Arien y Zyran llegaron a la estación del metro. Y se dio cuenta de todas las personas que estaban aquí.

-Ven, te llevaré con Kallias- Camino hacia Kallias.

-"¿Kallias?"- Pensó Zyran.

Arien y Zyran estaban delante de Kallias, quien estaba revisando el siguiente evento.

-¿necesitas algo, Arien?- Dijo Kallias.

-Ah... ¿podrías curar a esta chica?- Dijo Arien.

Kallias se giro, y miro fijamente hacia el hombre albino. Quién se quedó impresionado por su belleza y sus largas y hermosas pestañas.

-El... ¿quién es?- Dijo Kallias intentando sonar normal.

-El es Zyran, quien salvó a la chica- Señaló a la chica quien estaba herida.

-Arien, llévate a la chica hacia Ayesha. Tú sabes perfectamente que no tengo habilidades curativas.- Dijo Kallias. -Pero toma está bebida, y dásela a la chica- Le entrego un frasco de vidrio.

Arien asintió, y luego de eso cargo a la chica.

-Bien, ya me la llevaré- Arien dijo, para luego irse.

Zyran se giro, y luego miro fijamente hacia Kallias. Quién le parecía una persona muy fuerte y sería. También tenía una bonita cara.

-...- Sonrió Zyran, mirándolo fijamente.

Kallias miraba como Arien se iba. Aunque, le incomodaba un poco la idea de estar con alguien que recién conocía.

-"El era realmente hermoso"- Pensó Kallias. -...- Luego de eso, Kallias se dio cuenta. -"¿Acaso... me gusta un hombre?"- Se sorprendió Kallias.

Kallias luchaba con el pensamiento de que le gustaba los hombres. El solamente pensó que el chico era guapo.

-Ehm.. Kallias- Interrumpió Zyran con los pensamientos de Kallias.

Kallias se giro un poco nervioso.
-¿Si?- Intento sonar normal.

-¿Me puedo quedar aqui?- Dijo Zyran. -No tengo donde quedarme- Dijo apenado.

Kallias lo menos por un rato. Pero luego asintió.

-Bien, puedes quedarte- Dijo Kallias.

Zyran se agachó hacia el azabache, y luego de eso lo abrazo. -¡Muchas gracias!- Dijo Zyran contento.

Kallias se sorprendió, pero sorpresivamente devolvió el abrazo y solo asintió.

-"Realmente Kallias huele genial"- Pensó Zyran sonriendo de una manera siniestra.

....

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⏰ Última actualización: Jul 28 ⏰

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Regresión número: 1157Donde viven las historias. Descúbrelo ahora