Hoy me levanté de la cama sin ganas
Pero no como otras veces
Que me levanto para seguir con
Mi lucha interna.
Me ví al espejo y al ver mi reflejo
Deje de ver el mounstro que me atormenta
En las madrugadas, Ahora pude ver quién soy
Soy mi propio mounstro, mi propio demonio, mi propio enemigo.
Por todas esas veces que sobrepense, llore, he incluso cuando sonreí sin sentirlo.
Vi quien era yo, cada día sin menos ganas, buscando una forma de ignorar el dolor y fingir que ¡¡ESTOY BIEN!!
Es hora de aceptar que, está bien no estar bien, si quiero dejar de ser mi enemigo, empecemos por ser mi propio amigo.
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Cada letra me dolía
Poesía𝐂𝐚𝐝𝐚 𝐥𝐞𝐭𝐫𝐚 𝐦𝐞 𝐝𝐨𝐥í𝐚 𝐔𝐧𝐚 𝐫𝐞𝐜𝐨𝐩𝐢𝐥𝐚𝐜𝐢ó𝐧 𝐝𝐞 𝐭𝐨𝐝𝐨 𝐚𝐪𝐮𝐞𝐥𝐥𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐩𝐢𝐞𝐧𝐬𝐚𝐬 𝐜𝐮𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐚𝐦𝐚𝐬 𝐚 𝐚𝐥𝐠𝐮𝐢𝐞𝐧 𝐚𝐥 𝐜𝐮𝐚𝐥 𝐬𝐚𝐛𝐞𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐨 𝐭𝐞𝐧𝐝𝐫á𝐬 𝐣𝐚𝐦á𝐬, 𝐩𝐞𝐫𝐨 𝐞𝐥 𝐜𝐨𝐫𝐚𝐳ó𝐧 �...