Cap 6.

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Minjeong se encontraba recostada en el espaldar de su cama; habían pasado horas desde que había estado en aquel lugar con ese olor particularmente agradable a su olfato. Por más que intentase llegar a una respuesta, siempre terminaba en un callejón sin salida.

_Ese olor... ¿Por qué me es tan familiar? _Hablaba consigo misma en voz baja; nuevamente soltó un suspiro y cerró sus ojos con fuerza para seguido abrirlos con el ceño fruncido.

Mientras su mente seguía pensando en la posible persona, el olor volvió a sus fosas nasales, ocasionando que cerrara sus ojos instantáneamente, su cuerpo creó corrientes electricas y el éxtasis recorrió cada parte suya. La necesidad de saber quien era el dueño se estaba volviendo obsesivamente necesaria.

Necesitaba saber quien tenía ese olor que la enloquecía.

Mientras sus ojos seguían cerrados, disfrutando el agradable aroma, la imagen de la luna apareció lentamente en su mente. No era una luna normal; su color y el sentimiento que esta tenía eran especiales y le hacían sentir diferente.

Extrañamente, su cuerpo comenzó a tranquilizarse; el estrés fue disminuyendo lentamente; no podía negar que observar cada detalle de esta la hacía sentir bien, como si algo olvidado comenzara a ser recordado; sin embargo, no encontraba la realidad

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Extrañamente, su cuerpo comenzó a tranquilizarse; el estrés fue disminuyendo lentamente; no podía negar que observar cada detalle de esta la hacía sentir bien, como si algo olvidado comenzara a ser recordado; sin embargo, no encontraba la realidad. De alguna manera no se sentía enojada ni frustrada; podía manejar con calma la situación viendo la hermosa luna.

No pasó mucho que su tranquilidad fuera interrumpida por el sonido de un zorro junto a una risa burlesca; intuitivamente se levantó alarmada de su cama y en un acto rápido se dirigió a la ventana, viendo al animal que casualmente miraba a donde ella se encontraba.

No era un zorro cual quiera; su aspecto era radicalmente diferente. Su color era blanco al punto de prácticamente iluminarse en la oscuridad; nueve colas resaltaban haciendo su presencia más imponente. El color de sus ojos era amarillo puro y la forma de estos era rasgada; dos gruesas líneas rojas resaltaban en parte baja de sus ojos. Era un zorro grande y su energía se sentía pesada aún en la lejanía.

Una vez ambos ojos conectaron, un gran dolor en su pecho hizo que se arrodillara así bajando su mirada y con su mano libre hiciera presión en la parte afectada. Sus latidos eran rápidos y pesados; no faltó mucho para escuchar nuevamente el mismo ruido que este animal hacía. Esto hizo que su respiración comenzara a faltar creando la sensación de desespero por la falta repentina de oxígeno. Con todas las pocas fuerzas que tenía se levantó con dificultad y sosteniéndose de las paredes logró salir con un gran esfuerzo. Se dirigió a donde anteriormente había visto al zorro.

Sus fuerzas repentinamente se agotaron abruptamente, haciendo que se desplomara, lastimando sus rodillas al tener contacto brusco con el camino de piedra.

_A-Agh!... _ Un quejido salió de sus adentros, bajando su mirada por el dolor, pero la sensación de peligro la obligó a subirla, quedando cara a cara con el zorro, notando como este se veía más grande y ancho de frente. Nerviosa tragó saliva fuertemente; estaba acabada.

me perteneces [WINRINA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora