Cómo cada año se tenía que hacer modificaciones dentro de cada oficina, esta vez Irma estaba a cargo por lo que a Elías le tocó aguantar todas las órdenes que ella enviaba para hostigar, primero mover algunas mesas, que hay que limpiar la oficina del fondo, que revisar documentos del archivo, por lo menos había tiempo que ella salía a comprar, Elías se la pasaba encerrado con los compañeros almorzando y definiendo quien invita las cervezas en la noche, quizá por ahí a la salida podría visitar a Adriana, pero como terminaron tarde, salieron a la casa de un compañero se quedaron viendo el fútbol, y de ahí casa.
La semana estaba por terminar Irma tenía casi todo completo pero debían reparar una llave de un lavamanos, por lo que ordenó que Elías se quedara con el conserje reparando, Elías no dijo nada pero se la paso bien por qué mientras, no tenía que verla todo el día, aprovechando para llamar a Adriana.
El día siguiente llegaba el supervisor a evaluar todo, Elías no llegaba y había un malestar por qué Irma no podía terminar algunos informes, Elías se presentó y completo todo los pendientes, salió de la oficina hacia el parqueadero, mientras ella se enojó por qué no podía controlar a Elías, salió a ver qué hacía y lo encontró conversando con Adriana por teléfono.