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Ofusco a mi mente, 

le doy vueltas a la cama

sé que ya no debo

pero aún así te recuerdo.

Creí que ya te habías ido

y apareciste entre mis sueños

como me duele admitirlo

te invoco en cada verso.

Tú siempre fuiste mi musa

y ahora ya no estas

es gracioso como antes no paraba de dedicar

poemas de amoríos,

notas llenas de suspiros

y ahora en mis escritos

solo quedan los restos 

los restos de un amor

un amor que solo guarde yo.

Cartas a NadieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora