Los Angeles – Marzo 2024
Pov Lisa.La luz de la ventana me llega directo a la cara. ¿Habríamos dejado las cortinas abiertas anoche? Me pregunto incómoda mientras tapo mi rostro con el brazo derecho para que la luz no me deje ciega.
Muevo el otro brazo buscando a tientas a mi mujer, pero no la encuentro en su lugar. ¿Qué hora era? Normalmente me levantaba antes que Jennie y si ella ya no estaba, debía ser muy tarde.
ꟷ¿Jen? ꟷpregunto roncamente pero no oigo respuestaꟷ ¿amor? ¿Dónde estás?
Pregunto quejándome mientras ahogo un bostezo y me giro dándole la espalda al sol para abrir los ojos lentamente.
ꟷ¿Jennie? ꟷnada
Que extraño.
Estiro mi brazo hasta la mesa de noche y busco mi celular.
8:00 am.
No era tan tarde. ¿A dónde habría ido?
Me levanto poniéndome las pantuflas y camino a la sala, tampoco estaban Kuma y Love.
ꟷNo, esto si es extrañoꟷ reflexiono en voz alta yendo a la cocina por un vaso de agua. Reviso por si acaso todas las superficies para ver si había dejado alguna nota, pero no había nada.
Me estaba preocupando.
Tomo el teléfono en las manos y marco su número pero, oh sorpresa, suena en el departamento. Lo había dejado.
Pongo los ojos en blanco
ꟷ¿para qué tendrás celular, si siempre lo dejas?
Oigo la puerta abrirse y Kuma y Love entran corriendo felices, detrás de ellis, Jennie viene distraída con un par de bolsas en las manos.
Lleva los audífonos puestos y no se ha dado cuenta que la estoy mirando. Me apoyo en la encimera y encuentro el detalle de sus mejillas rosadas mientras tararea la letra de una canción incomprensible.
Sonrío. Parece uno de esas muñequitas chiquitas y tiernas que te dan ganas de abrazar y aplastarles los cachetes por lo adorables que son.
Camino hacia ella mientras cierra la puerta, para que no me vea.
ꟷ¿tú por qué eres tan linda? ꟷle pregunto abrazándola y ella pega un saltito asustado soltando las cosas en sus manos.
ꟷ¡uy Lalisa! Dios, me asustaste
La suelto ꟷlo siento.
ꟷ¿desde que hora estás ahí? ꟷpregunta de mala gana, agachándose a recoger lo que había regado.
ꟷdesde siempre ꟷrespondo ayudándole con algunas latasꟷ ¿por qué saliste tan temprano? ¿Me harás el desayuno? ꟷPregunto esperanzada.
ꟷesa era la idea peeeero después de tremendo susto no se si lo merezcas ꟷme amenaza con una manzana.
Levanto una ceja poniendo mala cara y le saco la lengua ꟷBien, si no te gustan mis abrazos. No te volveré a abrazar nunca más.
Llevo las cosas a la cocina y las guardo en silencio haciéndome la indignada.
Viene detrás mío y siento su mirada pegada a mi espalda, se que está muy cerca. Levanto la vista girándome ligeramente y la encuentro mirándome con curiosidad culpable.
ꟷ¿te molestaste?
ꟷno ꟷrespondo fría aguantando la risa por su cara de preocupación sin saber que estoy bromeando.