Day 7: DANCE WITH ME

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Esta noche, la mansión Silva brilla con luces deslumbrantes, reflejándose en los trajes elegantes de los invitados. El ambiente de la fiesta es animado, con risas y las melodías suaves de la orquesta, creando una atmósfera majestuosa. Esta celebración tiene lugar dos meses después de su victoria contra Lucius. Todos han compartido una comida antes de la parte del baile. Asta, nuestro protagonista, al enterarse de que habrá tiempo para bailar, siente que la persona con la que quiere bailar en el escenario es Noelle. Él mismo no sabe por qué es ella, la compañera que ha luchado a su lado durante los últimos tres años.

La música larga marca el comienzo del tiempo de baile, y los hombres comienzan a buscar a sus parejas. Todos poco a poco encuentran compañía, pero Noelle, con su deslumbrante vestido de gala azul, permanece junto a sus hermanos, rechazando a muchos hombres. Sus ojos siguen silenciosamente una figura familiar en la esquina de la sala. Es Asta, el joven en quien ha estado pensando toda la noche.

Noelle sentía una mezcla de emoción y nerviosismo en su interior. No podía ir en busca de Asta por su cuenta y pedirle que bailara con ella. Nozel había dicho que las reglas de la nobleza no permitían que las mujeres hicieran eso, por lo que a Noelle no le quedaba más remedio que esperar, esperar a que Asta viniera a ella. Pero él seguía allí, solo, sin moverse. Noelle sabía que Asta no estaba familiarizado con fiestas como esta, no entendía las complicadas reglas de la nobleza, pero su corazón no podía dejar de albergar esperanza.

Noelle echó un vistazo a Yami y Charlotte, los dos capitanes bailando juntos. Aunque sus pasos no eran completamente coordinados, la forma en que se tomaban de las manos y bailaban juntos la llenaba de envidia. Charlotte había tenido sentimientos por Yami durante mucho tiempo, pero no fue hasta hace poco que Yami los reconoció y los correspondió. Noelle deseaba que ella y Asta pudieran ser tan naturales como ellos.

Los caballeros nobles se acercaban uno tras otro para invitar a Noelle a bailar, pero ella los rechazaba a todos. No quería bailar con nadie más que con Asta. Pero el tiempo seguía pasando, y Asta aún no se acercaba. Noelle sentía su corazón hundirse; ¿acaso él entendería lo mucho que ella lo esperaba?

Asta estaba de pie en una esquina de la sala, sintiendo la mirada de Noelle fija en él. Pero dudaba. Primero, por la diferencia de clases; Asta era solo un campesino, mientras que Noelle pertenecía a la realeza. En segundo lugar, después de la batalla contra Lucius, Asta no usó ningún accesorio para cubrir su brazo derecho, negro y de aspecto desagradable, porque Liebe había ayudado a que sus uñas volvieran a la normalidad, y él temía que Noelle se sintiera incómoda al tomar su mano. En tercer lugar, no se sentía seguro acerca de su apariencia simple en medio de esta lujosa fiesta. No estaba vestido de manera llamativa como los nobles, solo llevaba su atuendo habitual, con la diferencia de que esta vez la ropa no tenía ningún rasguño.

Nozel miró a su hermana pequeña, comprendiendo claramente lo que ella deseaba; los ojos de Noelle lo decían todo. Como un hermano mayor que había pasado por muchas dificultades para reconciliarse con su hermana, también sabía que su familia se había vuelto más unida.

"Noelle, sigue esperando; la persona con la que deseas bailar pronto aparecerá frente a ti". Nozel le dio una palmada en el hombro a Noelle y luego se acercó al capitán Dorothy, quien rara vez estaba despierta. Noelle sonrió y le deseó felicidad a su hermano, lo que hizo que su frío hermano mayor se sonrojara.

Asta seguía de pie en esa esquina, como si sus pies estuvieran encadenados por una fuerza invisible, impidiéndole moverse. Observaba cómo uno tras otro, los hombres nobles se acercaban a invitar a Noelle a bailar. Cada vez que uno lo hacía, el corazón de Asta se apretaba un poco, y solo cuando se iban con una expresión de tristeza, él podía respirar con normalidad nuevamente. Pero cuando Kiato, un amigo de ambos, un talentoso bailarín y alguien que también tenía sentimientos por Noelle, se acercó a ella, Asta sintió una ola de celos recorrer su interior. Asta ya sabía que a Kiato le gustaba Noelle, pues antes habían hablado y Kiato había mencionado que le agradaba mucho ella. Asta sintió una creciente incomodidad, incapaz de soportar la idea de que Noelle pudiera aceptar la invitación de Kiato. Al ver a Kiato sonreír y extender la mano hacia Noelle, Asta casi no pudo contener su disgusto, una aura amenazante surgió de él, y las personas cercanas sintieron una opresiva presencia a su alrededor. Si Noelle aceptaba esa invitación, tal vez Asta realmente correría hacia él y le daría un puñetazo sin ninguna razón, tal vez solo por celos.

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⏰ Última actualización: Aug 11 ⏰

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