Capitulo 9 La esencia de poder...

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"...Somos dueños de nuestro propio destino...abrazamos con fuerza toda nuestras existencia...la hacemos valer...creer...y crecer..."

Mas tarde la pequeña aun seguía pintando sobre la camilla del hospital, Serena tuvo que regresar a la escuela debido a sus horarios de clases, rondas de idas y venidas de enfermeras entraban y salían de la habitación preparándola para un nuevo ciclo de quimioterapias, ella deslizaba los crayones en la hoja blanca concentrada en la actividad, cuando el príncipe Diamante fingiendo ser un ser humano común y corriente, ingreso a su cuarto con un obsequio creyendo por unos momentos encontrarse con Serena sin éxito alguno

-no esta –le interrumpió la pequeña

-¿Qué cosa?

-ella se fue, tenia clases –siguió la pequeña, para sentarse en la camilla – la amiga princesa tuvo que ir a clases

-ya veo...-bufo con desilusión- te traje un regalo-le mostro el peli plateado un obsequio en sus manos

-¡muchas gracias!-dijo ella extendiendo sus manos hacia el paquete, Diamante por su parte se distrajo al ver aquel dibujo en aquellas hojas blancas abriendo sus ojos enormemente

-¿Qué es esto?-le pregunto tomando el dibujo, mientras que la pequeña simplemente sonreía

-eres tu con tu hermano, y son flores

-¿eh? Como esta niña...-pensó por un momento el joven peli plateado al recordar aquella promesa que estuvo perdida en su memoria, aquella que le prometía a su hermano menor, Zafiro, que volverían a la Tierra y tomarían un campo de flores únicamente para él, no era la mejor de las promesas con buenas intenciones, pero para que su hermano le miraba con admiración y respeto -¿Cómo sabes que tengo un hermano?

-no lo se- pronuncio ella con una sonrisa –lo soñé creo..., y estabas muy triste ¿Por qué estas triste?

-no lo estoy

-veo como miras a las enfermeras, las miras con desagrado, nosotros no somos malos

-¿eh? ¿de que estas hablando?

-tienes miedo del mundo-tomo sus manos con sus manitas pequeñas mirándole con ojos inocentes y sinceros – no tengas miedo, el mundo es un lugar muy bello, una vez que lo aprendes a conocer

-¿Cómo puede ser bueno para ti?-le cuestiono algo indignado pasando por alto que estaba sosteniendo la conversación con una niña pequeña –tu...

-mamá dice que quizás pueda ir al cielo, es por eso que no tengo miedo

-eso es una tonterías-le cuestiono –si me lo pides yo puedo ayudarte, tan solo dilo y morirás –dijo decidido mirándole seriamente, mientras que Mía simplemente sonrió

-gracias...

-no hay nada que el cristal oscuro no pueda lograr – pensó con decisión- con el podemos controlar la vida, el universo e incluso el espacio, estoy seguro que la salud de esta niña mejorara- se reafirmaba así mismo-pero... ¿un momento? ¿Por qué quiero salvarla?- se debatió mirándola -¿no venia a ver a sailor moon? ¿Por qué ahora tengo una charla con esta mocosa? ¿Por qué?

-gracias señor príncipe...-hablo la pequeña interrumpiendo sus pensamientos

-¡ya estoy aquí!-Serena trasformada en sailor moon ingreso a la sala, mientras que el príncipe Diamante en su apariencia humana, le miro con ojos bien abiertos -¡soy sailor moon!

-¡wiiii!-grito la pequeña emocionada -¡sailor moon esta aquí!-exclamo la pequeña con felicidad

-espero que hayas sido una buena niña- dio la rubia, mientras que Diamante no decía ni una sola palabra

-¡mira! ¡mira!-decía Mía –él es mi amigo, es un príncipe, se llama Diam

-es un placer –sacudió levemente su cabeza para extender su mano mientras que Serena se la estrecho amablemente, sintiendo una energía muy extraña, mientras que la pequeña emocionada, los interrumpió tomando la mano de la heroína lunar para mostrarle todo lo que tenia y había dibujado en su estancia en el hospital

El día tanto como la niña como para el mismo príncipe Diamante, fue un día maravilloso en compañía de sailor moon, él no dejaba de admirarla, su belleza, su bondad, su luz, olvidando por completo el motivo real de su estancia en la Tierra, se sentía parte del mundo, se sentía humano

Sin embargo, la realidad lo abstrajo a Nemesis, el planeta sombrío y sin paz donde este había sido desterrado, sentado en su trono desde la sala de control no dejaba de pensar en las palabras de la pequeña, por un lado miraba la Tierra, aquel planeta azul donde conoció a la mujer mas hermosa del universo, la Neo reina Serena

-¿Por qué esa mocosa provoca estoy sentimientos en mi?-se pregunto así mismo bebiendo de la copa de vino –nadie me había hecho pensar de ese modo, ¿Por qué le prometí salvarla?

-¿Qué ocurre príncipe Diamante?-hablo su malévolo consejero el Gran sabio

-Gran sabio-pronuncio este- el cristal oscuro es poderoso ¿verdad?

-si, comparado con el cristal de plata, es como decir que esa joya de los guerreros de la Luna llena es una triste reliquia –hablo el adivino

-ya veo...-miro decidido –no hay comparación, no tengo que preocuparme por nada

Presente

-¡papi! ¡papi!-el pequeño Dylan corría en dirección a su padre con una hoja en sus manos -¿Qué es esto?-su padre abrió los ojos de manera enorme al ver lo que portaba su pequeño hijo

-¿de donde lo sacaste?

-estaba sobre mi escritorio-confeso

-Dylan...-suspiro Diamante-sabes que a mamá y a mi, no nos gustan las mentiras

-¡es la verdad! Yo no toco las cosas de mami y papi –este abrió el dibujo como si se trataba de una reliquia sagrada, viendo un bello dibujo de estrellas y una luna enorme con una bella mariposa en el centro, y en una esquina de la hoja llevaba escrita unas palabras que él recordaba muy bien

"Descuida, el mundo es hermoso, te prometo que apenas abra los ojos te buscare, sea la forma que sea, tomare tu mano y sabré que eres tu..."

Mía...

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⏰ Última actualización: Jul 28 ⏰

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Me enamoré de él...(Serena x Diamante)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora