Isla Esmeralda

Capítulo 61: Despierta a la Realidad

Sasuke Unohana era más inteligente que esto, o al menos pensaba que lo era. El adolescente extravagante sabía bien y bien que no debería estar haciendo esto. Pero aun así, de alguna manera permitió que sus instintos menores lo superaran. Bien, eso fue una mentira. Una mentira que seguía diciéndose a sí mismo para evitar admitir el hecho de que en realidad hizo quiero esto.

'Dios, no puedo creer que realmente hayamos hecho eso!' El niño pensó mientras giraba la cabeza, con los ojos tomando la forma dormida de Nanao Tokage. El cuerpo desnudo del hermano mayor de Tokage se aferró al suyo mientras la mujer de pelo verde roncaba ligeramente contra su pecho.

Había tantas cosas mal con lo que sucedió. Pero al mismo tiempo, se sintió tan bien en el momento.

'Tengo que asegurarme de que nadie se entere de esto.' El niño gimió en silencio mientras hacía todo lo posible para luchar contra un dolor de cabeza que se aproximaba.

Técnicamente hablando, lo que los dos acaban de hacer fue extremadamente ilegal. Tanto es así que Nanao podría literalmente terminar en la cárcel si la persona equivocada aprendiera sobre ello. Por supuesto, Unohana no era ajeno a hacer cosas ilegales, no por una posibilidad remota. Después de todo, el niño vendió explosivos a terroristas para ganarse la vida. Pero, esto se sintió mucho peor por alguna razón, principalmente porque no quería que le pasara nada malo a la mujer. Especialmente no por él y sus horribles habilidades para tomar decisiones.

Unohana se había dado cuenta desde hacía mucho tiempo de que se estaba volviendo demasiado apegado a la mujer que actualmente descansa a su lado. Pero no importa lo que hiciera, no podía evitar dejar que su relación progresara cada vez más. Lo suficientemente lejos hasta el punto de que los dos terminaron teniendo sexo borracho en su apartamento.

Oh, sí, Unohana también podría agregar darle alcohol a un menor a la lista de malas decisiones que se tomaron esta noche.

La parte más molesta de todo esto fue cuán cliché era. La primera mujer que le mostró a Unohana cualquier tipo de interés romántico fue también a la que decidió dar su virginidad. Si el niño no estuviera tan en conflicto con sus propias emociones en este momento, podría haber tenido el descaro de reírse de ello. Quizá....

El adolescente extravagante volvió la cabeza para mirar la forma de dormir de la mujer una vez más. Tomándose un tiempo para admirar lo linda que se veía su cara cuando era así. Sí, incluso con el ligero trozo de baba saliendo de su boca.

'Oh joder, realmente me gusta, ¿no?'

El cerebro y las emociones de Unohana estaban por todas partes en este momento. Una parte de él realmente estaba contenta con cómo resultó la noche. Demonios, feliz podría ni siquiera ser una palabra lo suficientemente buena como para describirlo. Sin embargo, otra parte de él también se avergonzó de lo que sucedió. A pesar de su personalidad impía y comportamiento juguetón, Nanao era una buena mujer. El tipo de mujer que era demasiado buena para alguien como él. Tenía un futuro brillante por delante, uno que no necesitaba involucrar a envolverse en todas las tonterías de las que él era actualmente parte. Y lo último que quería era que la mujer se lastimara debido a sus acciones.

El adolescente extravagante ya se sentía lo suficientemente mal como para que Midoriya casi fuera asesinado por esos payasos en Derelicta. El hecho de que su único verdadero amigo en Dios sepa cuánto tiempo estuvo cerca de morir a través de sus propias creaciones ciertamente no se perdió en el niño. Y la idea de que lo mismo podría sucederle a la mujer con la que estaba aplastando actualmente hizo que el estómago de Unohana se agitara.

Unohana luego arrojó la cabeza contra su almohada, pero se aseguró de hacerlo lo suficientemente suave como para evitar despertar a Nanao.

¿Cuál era el punto de pensar en algo de esto? Honestamente, dudaba de que Nanao realmente le gustara de la misma manera que le gustaba. Para ella, probablemente era solo una aventura que podía usar para quitarle las rocas cuando lo necesitaba. Si Unohana estuviera siendo realista, en el mejor de los casos los dos serían amigos de beneficios y nada más. Ese resultado ciertamente tendría más sentido para él. Después de todo, ¿qué mujer saldría en serio con un chico sin peculiaridades? Estaba literalmente en el fondo de la sociedad moderna, llegar con alguien como él era básicamente un suicidio social.