𝗖𝗔𝗣. 𝗡𝗜𝗡𝗘

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El albino observó incrédulo al pelinegro que estaba con los brazos cruzados

▬▬ debes estar bromeando -iguro frunció el ceño

▬▬ no estoy bromeando estúpido, no dormiré contigo

▬▬ ¿Porque no? - sonrió ladino el más alto haciendo que el contrario ruede los ojos

▬▬ porque no, y ya deja de preguntar, me voy a dormir

A uzui no le dió de protestar cuando el de baja estatura cerro la puerta en su cara haciendo que frunciera el ceño

Iguro el primero en su vida que no se fijaba en su rostro hermoso, que se negaba darle un beso a la primera y que no quería dormir encima de sus hermosos brazos musculosos, no comprendía y tampoco entiende porque iguro tiene tan pésima actitud y no quiera dormir con el

▬▬ mnhhh

Protesta caminando hacia su dormitorio unos pasos cerca de donde obanai está durmiendo, quita la coleta de su cabello amarrado para dejarlo suelto mientras lo mueve para que no se haga bulto sintiéndose indignado y con su egocentrismo en migajas

Se adentra a su habitación por una tasa de té que estaba colocada en su mesita de noche y agarro las llaves de la habitación donde se encontraba obanai durmiendo para salir de su cuarto y caminar hacia donde dormía el pelinegro con un rostro serenó

Abrió la puerta asustando al de ojos heterocromaticos que se sentó en la cama asustado viendo al albino sonreírle con ojos cerrados y una tasa humeante en su mano

▬▬ ¿Que te pasa animal?? -dice enojado de que lo levantarán en su presiado sueño

▬▬ olvidaste tu té -responde sonriéndole mientras se sienta en la cama aún lado de el, el le extiende la taza

Obanai enarca una ceja, el no se acuerda de aver pedido una taza de té y mucho menos antes de dormir Pero de igual manera un poco desconfiado agarro la taza tomándola de un solo trago viendo la sonrisa del albino frente a el

▬▬ listo, ahora déjame dormir

▬▬ ¿Porque no quieres dormir conmigo? -pregunta queriendo hacerse el indignado

▬▬ porque no -dice enojado el pelinegro - ¿Cómo abriste esa puerta? La tenía con seguro

▬▬ es mi casa, te lo recuerdo -responde divertido el más alto

De pronto, sus ojos empezaron a oscurecerse, no entendía porque todo le daba vueltas y se sostuvo de la cama con sus manos mientras tocaba su cabeza

▬▬ ¿U-uzui, que t-tenia ese T-té? -pregunta mareado no queriendo que sus ojos oscurescan viendo solamente la sonrisa que le daba el albino y como este se acercaba a él

▬▬ ¿Nada? No tenía nada -dice simplemente sonriendo

Cayó tan bajo para hacerle caso al mafioso, de eso no tenía duda y se repitió mentalmente que el mismo debía matarse

▬▬ M-maldito -dijo en voz baja para simplemente desmayarse colapsando en la cama

Tengen dejo de sonreír y se acercó más al pelinegro para acariciar su rostro, sus mejillas y admirando las pestañas del pelinegro, tocó la nariz y se quedó un momento admirando los labios del de baja estatura mientras sacaba un suspiro

Desabotono el primer botón de la camisa de obanai descubriendo su pecho y sin dudarlo le hizo un hematoma por la clavícula apreciando unos minutos en saborear su piel lechosa

▬▬ eres tan bonito -suspiro abotonado denuevo su camisa

Lo cargo estilo princesa cerrando la habitación para ir a la suya y acostar el pequeño cuerpo con delicadeza, apagó las luces y se acostó a su lado abrazando su cintura diminuta y colocando su rostro cerca del contrario















Abrió sus ojos lentamente sintiéndose un poco mareado y con dolor en su cuello, y pensó que pudo ser por una mala posición

Se sentó en la cama y diviso en todos lados un poco confundido, ¿En esa habitación había dormido? no sabía que era lo que había pasado hasta que recordó lo sucedido en la noche, de pronto su mal humor volvió hacia el apretando los dientes con molestia se levantó de la cama olvidándose del dolor de cabeza y salió fuera de la habitación a zancadas, lo primero que diviso al bajar las gradas fue al ver varios hombres con muchas armas y un albino con cabello perfectamente arreglado enmedio de estos dando una orden

▬▬ tengen, necesito una explicación! -dijo y se reino un silencio en el lugar cuando todos los hombres voltearon a verlo incluyendo al albino

Iguro se sintió incómodo ante tanta atención, y en el como tengen le daba una mirada que parecían balas incrustandose a su pecho

▬▬ jakah, llévate a obanai al comedor -dijo después de varios minutos y un rubio entre todos los que habían camino hacia donde el agarrando su ante brazo para llevarlo hacia el comedor

Uzui ni siquiera le dió una última mirada, sentía que pasaba algo extraño

▬▬ ¿Que está pasando? -pregunto cuando se sentó en la silla enfrente de la mesa,

el rubio lo observó Unos breves minutos pensando ▬▬ cosas de mafiosos —simplemente respondió

»lo tipico« pensó rodando los ojos. varias cocineras dejaron comida y postres en la mesa por lo que no supo porque era necesario tanta comida

▬▬ apresúrate a comer, alguien viene así que debes estar oculto

Obanai quedó pensativo mientras comía, ¿Quien debía venir a visitar al Yakuza como para que lo quieran encerrar?

Duro unos 10 minutos comiendo cuando finalmente termino y el rubio lo había llevado a rastras a lo que era una habitación al lado de la oficina de uzui

La oficina...

El nunca le había dado curiosidad de que era lo que mantenía ahí como para que nadie quiera entrar, sin embargo no se iba a poner a pensar en eso

▬▬ ¡Oye! ¿Porque me encierras aquí? —exclamo enojado y el rubio solo subió los hombros de arriba hacia abajo cerrándo la puerta con llave enfrente de su cara

De pronto unas voces desconocidas se escucharon en la primer planta

De pronto unas voces desconocidas se escucharon en la primer planta

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𝐘𝐀𝐊𝐔𝐙𝐀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora