Stupid Wife (adaptación)// Railo versión

Capitulo XVI - Promise you'll remember that you're mine

Es sábado por la mañana, Rai vino a despertarme para arreglar mi maleta ya que nos iríamos pronto. Estoy ansiosa, lo confieso, Rai dice que son lugares que necesito ver,
¿Será que podré recordar más?

—¿Lista?
Y hablando de Rai... Miro hacia atrás y la veo, trae un enorme abrigo negro, sus labios pintados de rojos, que se separaron en cuanto me sonrió. Sonríe de vuelta y tomo mi maleta.

—Sí, podemos irnos.
Se escuchan pasos en el corredor y luego Louis entra en la habitación por debajo de las piernas de Rai, ella lo mira y deja escapar una risa suave, atrapándolo entre sus piernas.

—Mamá, no lo hagas. — El gruñe y trata de soltarse, puedo ver que Rai no lo está sosteniendo firmemente, sólo ligeramente. —Mamá, porfavor.... ¡Ah!. Mami, ayúdame.

Suplica y me mira con los ojos brillantes en busca de ayuda, suspiro y dejo caer la bolsa en el suelo.

—Suéltalo, Rai. — Le digo con la mayor calma posible y en cuestión de segundos lo suelta, Louis para de ella y corre hacia mí, agarrando mis piernas. Me agacho y lo atrapo en mi regazo. —Listo, estás a salvo.

—Gracias, mami.

—De nada, hijo. — Beso su frente y luego Louis apoya la cabeza en mi hombro, miro a Rai y la veo con una enorme sonrisa en su rostro. —¿Qué pasó?

—Uh, nada, nada. ¿Podemos irnos entonces?

—¡Sí!
Louis grita emocionado, lo que nos provoca una risa. Rai se encarga de bajar mi maleta ya que traigo a Louis en mi regazo.

Luego entramos al auto de Rai para comenzar en viaje.
Aquí vamos.
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Nunca me ha gustado estar despierta y ver la carretera, así que dormí durante todo el trayecto. Louis parece estar con la batería al 100%, y también feliz porque vera a sus abuelos, que por lo que se, Rai intenta darles una mejor imagen para Louis.

—Aquí hace un poco de calor, por si quieres quitarte tu abrigo o bufanda.

Rai dijo antes de hacer una parada para comer. Sólo asiento y me quito mi abrigo y bufanda, guardo ambos en la parte de atrás del auto para poder salir, estiro mi mano para Rai, ella sonríe sorprendida y sólo toma mi mano, después la de Louis. Salimos los tres juntos y en pocos minutos ya estábamos en el restaurante, fue una parada rápida y en un abrir y cerrar de ojos ya estabamos entrando a la ciudad, por el distrito en que yo solía vivir también, Rai dijo que sus padres ya estaban en su casa esperando por nosotros.

—¿Tus padres saben acerca de mi amnesia?— pregunté susurrando por Louis.

—Ahora saben. — Dijo Rai. —No se los dije antes porque ya sabes, mis padres estaban demasiado ocupados.

Su voz era sarcasmo puro, aunque podía identificar un poco de dolor. Elegí con quedarme callada, Rai parecía tener algunos problemas personales que implican a sus padres y no me siento con derecho de entrometerme. Cuando llegamos fuera, Rai miró a su alrededor y cuando encontró a su padre, le dio un apretón a mi mano para avisarme. Sólo entonces me di cuenta de que aun teníamos las manos entrelazadas, pero no rompí el contacto, y sorprendentemente una sonrisa aparece en mis labios mientras caminamos hacia donde esta Raúl Rosario.

—¡Abuelo！
Louis exclama una vez que llegamos lo suficientemente cerca para verlo, él sonríe enormemente al ver a su nieto y sin importarle sus pantalones caros, coloca la rodilla en el suelo y abre los brazos. Louis agarra el cuello de su abuelo, que sonríe y lo abraza de nuevo.

—Te extrañe mi pequeño. — Rai suelta mi mano y me avisa que recogerá las maletas del carro. Me quedo allí esperándola que volviera o al menos hasta que Raúl nota mi presencia. — Alondra Michelle, es bueno verte.