insatiable desire

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¿Por qué siempre que estoy en claros problemas personales termino llorando en mi puto Rolls Royce? ¿Tan cobarde soy? ¿Y si de verdad no se lo que valgo?, intenté buscar una solución con Georg, tome mi teléfono, con las manos temblorosas llame a su teléfono, cuál contesto, sin embargo al menos 20 segundos solo fueron un silencio decepcionante-

-El día que te llame cuando Bill me dejó tu estuviste ahí.. Cuando era niña cada que mis papás me lastimaban tu ibas a mi casa al día siguiente a consolarme, tu estuviste ahí siempre... Se que soy una egoísta, pero te prometo que si me das una última oportunidad... Te demostraré que no soy la hija de perra que crees.. -Dije, desesperada en escuchar su voz, otros pocos segundos también fueron un silencio incómodo y otra ves de decepción

-Te veo en el Hotel Hasser Roma.. -Solo dijo esas palabras antes de colgar, dejándome con las palabras en la boca

-Lo único que me importaba en esos momentos era poder arreglar mi amistad con Georg, arranque mi auto en dirección al hotel, al llegar estaba Georg esperandome en la entrada, fumandose un cigarrillo, mi corazón latió con rapidez, salí del auto, me acerque a el.

-Si es necesario que me arrodille para pedir perdón.. lo haré -Dije

-Note una pequeña sonrisa juguetona en el rostro de Georg

-Surveille tes paroles, petit -Solto una pequeña risa

(cuida tus palabras, pequeña)

-Georg.. ¿que tengo que hacer para que me perdones? -Lo mire

-Arrodillate -Dijo seguro de si mismo

-Frente a la demás gente que iba entrando al hotel, me senté de rodillas frente a el, desde abajo, lo mire con ojos se súplica, podía ver una mirada de decepción y un brillo de cierta excitación en sus ojos, mientras que mi mirada era sumisa y suplicante por su perdón, el solo me tomo del cabello, y con cuidado me levanto, sin lastimarme

-¿Sabes cuánto tiempo estuve esperando a que te fijaras en mi?.. -Me miro los labios con suavidad, se notaba que se contenía, en cierto punto, el me tenía mucho respeto, apretaba mi cabello entre sus manos con fuerza, pero nunca me lastimo, eran de esos agarres que no dolían

-Cuando era niña tu me gustaste, esperé toda la secundaria a qué dejaras a Candice -Dije yo

-¿soy adivino? -Dijo mientras aún me miraba los labios, yo solo negué

-Pide perdón -Asentí

-Perdón... -Mi mirada se calmó, en cierto punto comencé a sentirme confundida, ¿esto se estaba tornando en algo romántico o simplemente era su forma de hacerme pedir perdón?, era lógico las intenciones de Georg, sus ojos brillaban con anhelo y deseo de besarme, no sabía si seder, sentía que probablemente eso me iba a convertir en más perra de lo que ya era, pero, ¿Si Georg se sentía algo por mi aún sería algo que me convirtiera aún más arrastrada? ¿y si en cierto aspecto yo también sentía una pequeña punzada de atracción? ¿Pero aún quiero a Bill? ¿O lo que pasó con Bill hace rato solo fue una forma de saciar mis deseos excitantes que contuve todo el año que me separé de Bill?

-¿y si te digo que no es suficiente? -Dijo Georg

-¿entonces que quieres que haga? -Lo mire

-Besame.. -Dijo Georg, sabía que si el se daba cuenta que no quería, lo respetaría, por qué el, por qué el es, el es un hombre, y yo al lado el era la jovencita desfrenada que necesitaba.. a un hombre, me quedé quieta unos segundos, hasta que lentamente mis labios chocaron suavemente con los de el, sabía que ese beso fue con mi consentimiento, y lo hice por que lo deseaba

¿Lo deseaba?... ¿O solo era un capricho más?...

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(tranquilos, la historia es de Bill, claramente y por lógica, todo gira entorno a ti y a Bill, es solo un capítulo que da inicio a lo bueno de la historia, disfruta de la historia, y prepárate para lo que viene Dubois Leroi...)

𝐥𝐨𝐯𝐞 𝐭𝐨 𝐭𝐡𝐞 𝐞𝐧𝐞𝐦𝐲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora