CAPITULO 1

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De nuevo el maldito despertador sonando a la hora exacta para llegar justo al Instituto. Con mucho cuidado y sin hacer un desastre, estire mi brazo para alcanzarlo y poder apagarlo.

-Freya, levanta ese lindo trasero de ahí, es hora de irnos.- gritó Alexa desde el otro lado de la puerta.

¿Les había contado sobre Alexa?
Bueno ella es mi mejor amiga desde que llegue a Londres. Nos conocimos en la cafetería que se encuentra en la planta baja del departamento, ella era y es mesera de ese lugar, según ella dice que le pagan bien, aunque yo aún sigo diciendo que busque algo mejor, pero si la satisface y cubre sus necesidades está bien.
Cuando nos conocimos yo había llegado a esa cafetería en busca de algún lugar para quedarme, y justo ella se acercó a mi y me comentó que enfrente de su departamento había uno en el cual me podía quedar pagando la respectiva renta, pero conforme pasó el tiempo y nos fuimos conociendo, coincidimos con la idea de vivir juntas, y ahorrarnos un poco más de la paga de aquel lugar.

-Alexa salgo en un minuto, no molestes.- le respondí, aún desde la cama.

-Freya la última vez que dijiste eso llegamos a la hora del almuerzo, así que mejor apresurate.- contestó ella aún detrás de la puerta.

Y era verdad,  justo fue ayer cuando sucedió eso, pero no fue mi culpa, mi jodido despertador no había sonado, y cuando me di cuenta ya era un poco tarde, pero aún así Alexa y yo llegamos a tiempo para las siguientes clases.
Fui directa a darme un baño, aún quedaba bastante tiempo y eso era suficiente.
Cuando salí tomé un vestido de flores, que era ajustado de arriba y flojo de la parte baja, pero aún así dejando ver bien mis curvas, les diré que no tengo el típico cuerpo de modelo, no estoy super delgada, ni tampoco super llenita, tengo un cuerpo normal, y me siento satisfecha con eso. Tomé mi collar, pulseras, y unos lindos zapatos al color de los accesorios, deje que mi cabello se acomodara como normalmente lo hacía.
Cuando termine, mire el reloj y había terminado justo a tiempo, aún quedaba bastante tiempo, así que me fui directa a la cocina para poder desayunar algo antes de irnos al Instituto.

-¿Alexa?.-la llame mientras me servía mi cereal en un tazón para así poder comerlo.

-Aquí, ¿Ya lista?.- voltee y la vi saliendo de su habitación, y tomando su bolsa.

-Si, sólo cepillo mis dientes y nos vamos.- me levante para ir a mi habitación.

-Bien. Creí que volveríamos a llegar tarde, pero es un récord ver que terminaste justo a tiempo, y aún verte increíblemente bien.- contestó observandome.

-Gracias, aún que sabes que no es para tanto.- le respondí mientras salía ya lista para irnos.

-Cuando lleguemos al Instituto, verás si no es para tanto.-lo dijo con una sonrisa, saliendo del departamento.-

Claro ella y su manera de ser siempre sarcástica. Subí a nuestro Mustang, y arranque para llegar justo a tiempo.
Cuando llegamos estaba en lo correcto llegamos a la hora perfecta para las clases.

-Hola hermosa, lindo atuendo.-Escuche decir a uno de los chicos que se acercó al Mustang cuando baje con Alexa.

-Te lo dije.- me susurro Alexa justo cuando estuvo al lado de mi.

Bueno ella siempre tenía razón, casi en todo, siempre que llegaba al Instituto, uno que otro chico se acercaba, para decirme lo bien que me veía, pero a decir verdad yo sólo me ponía lo que me quedaba bien, no lo hacia para presumir oh cosas que la gente inventaba y se creía. También nunca faltaba aquel pervertido que siempre te decía cosas asquerosas, pero fácil como no tenía tiempo para aquellos, sólo les sonreía oh les guiñaba el ojo.

Estúpido Y Perfecto Amor...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora