X.

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La noche era solitaria y aterradora, sus ojos lloraban por las lágrimas pesadas que había soltado desde que se llevaron a Jungkook. Trato de contactarse con los conocidos de su alfa, trató de hablar con la familia de él, pero nada fue logrado; ¿cómo lo sería? si estaba en medio de la fría noche solo y sin nadie a quien recurrir.

Pedía a las estrellas que cuidarán a Jungkook, pedía que todo se solucione y que se aclare. Arrodillado en la ventana mirando a un cielo sin estrellas, pedía por un favor a astros que no se habían acercado a él.

La noche parecía eterna, la oscuridad en la que la ciudad se había hundido parecía eterna. El sol llegó apaciguando de cierta forma el corazón roto y desesperado de Jimin, tomó un abrigo y se puso unos zapatos cómodos para salir a buscar ayuda. No podía pensar bien, no sabía qué exactamente podría hacer para ayudar a Jungkook.

Su suegra estaba hundida en una depresión por haber perdido a su destinado, su cuñado estaba ocupado combatiendo su duelo y tratando de tomar las riendas del partido de su padre, y él solo era un huérfano que caminaba por las calles preguntándose qué hacer. A pesar de las contras, se dirigió a la casa de su suegra y esperó veinte minutos en la puerta pero nadie le abrió, temió lo peor.

“Ayer soldados vinieron por ellos, los arrestaron.” Le dijo una de las vecinas de su suegra. Miró con horror a la anciana y con sus ojos le pidió alguna explicación. “Entraron en la madrugada y se los llevaron, no hubo escándalo, yo lo vi desde mi ventana pero no pude hacer nada. Lo siento mucho.”

“Gracias.” Su voz era de poca esperanza.

Se encontraba aturdido por todo lo que sucedía, ¿por que los arrestaban? ¿De qué los culpaban? Ellos habían perdido a una pieza importante en sus vidas y los culpaban de ello. Que dolor.

Entre el mareo de la situación, entre la ansiedad de los mil pensamientos que su cabeza ideaba. Recordó a alguien que podría ayudarle, Seokjin. Corrió hacia el palacio de gobierno en donde Jungkook le había informado que se encontraba Seokjin haciendo guardia, esperaba que siguiera ahí y supiera algo de su prometido.

Sus planes cambiaron en un giro inesperado, frente al palacio de gobierno se encontraba una gran multitud que observaba un palco armado lleno de militares. Se adentro a la multitud para observar mejor, no lo hubiera hecho, sintió como un golpe fue dirigido directo a la boca de su estómago al ver a Jungkook golpeado y esposado. Quería protegerlo, subir y tomarlo de su mano para irse lejos, su amor no respondía a la lógica.

Corrió entre la multitud para subirse al palco, pero fue detenido por soldados que resguardaban el paso.

“¡Déjenme! ¡Sueltenme, malditos, los mataré!” Gritaba con todas sus fuerzas, quería deshacerlos con sus manos y salvar a su amado. “¡Jungkook!”

Su voz sería reconocida por Jungkook incluso a kilómetros de distancia, su aroma lo percibiría incluso rodeado de miles de personas, sabría que es él aunque se quedará ciego. Sus ojos cayeron en Jimin y le dolió más que los golpes ver su rostro tan preocupado.

Los gritos de Jimin se callaron cuando uno de los militares habló. “¡Él es el culpable de la muerte del ex presidente!” Gritó empujando a Jungkook para que diera un paso al frente. “¡Después de una ardua investigación dimos con el culpable, el traidor de la patria!” Se escucharon abucheos y la sorpresa en suspiros. Jimin no podía creer lo que sucedía.

“No…” Susurró mirando la desesperación en los ojos de Jungkook, la traición y el dolor.

“¡Hoy damos fin al régimen que crió a bastardos como este!” Un nuevo empujón fue dado a Jungkook, logró caer sobre sus rodillas y con una nueva patada sobre su espalda su mentón chocó contra la madera astillada. El corazón de Jimin se destrozaba con cada segundo. “¡Bastardos que matan a su propio padre por la sed de poder! ¡El régimen que amamantó a hombres como este finaliza hoy, el régimen autoritario que nos ha quitado tanto a los que trabajamos tanto por este país!” Se escucharon abucheos y aplausos, opiniones divididas. “¡Larga vida al nuevo régimen liberador de los parásitos que nos dejó el anterior!”

Las rosas hurtadas ; km omegaverse (HIATUS)Where stories live. Discover now