Encuentro en el Cielo

capitulo 3

Laura y Jonh comenzaron a planear sus futuras vacaciones juntas. Jonh había tenido siempre la fantasía de navegar por el Amazonas, y para él, era un sueño hecho realidad cuando él y Laura decidieron hacerlo.
La experiencia fue una aventura mágica para los dos.
Durante el viaje, Jonh y Laura disfrutaron de las increíbles vistas del Amazonas y las aves tropicales. También tuvieron la oportunidad de conocer a las diversas comunidades locales, y Jonh estaba feliz de ser capaz de aprender y explorar junto a Laura.
Al regresar de sus vacaciones, Jonh y Laura no podían dejar de hablar de lo increíble que fue el viaje.

John y Laura disfrutaron de muchas cosas juntos.
Tomaron largas caminatas por el bosque, hicieron excursiones al mar, prepararon grandes cenas para amigos y familiares, y crearon nuevos recuerdos y tradiciones.

Ambos estaban planeando su futuro juntos y estaban muy emocionados por lo que vendría.
Sin embargo, todo cambió cuando John se enteró de que tenía una enfermedad terminal.

Jonh había estado sintiéndose muy cansado durante varias semanas y finalmente fueron a un médico para investigar el problema. Los médicos le diagnosticaron un cáncer terminal y le dijeron que solo le quedaba unos pocos meses de vida.

Laura: ¡Oh, Jonh, no puedo creer esto! ¡¿Qué podemos hacer?
Jonh: ¡Lo siento, amor!

Jonh se sentía devastado por la noticia y se sintió frustrado porque no sería capaz de disfrutar de su vida con Laura. Sin embargo, no podía hacer nada para detener la enfermedad y solo quería pasar tiempo con su esposa.

Jonh: ¡Lo único que quiero es pasar tiempo contigo!

Jonh y Laura hablaron mucho sobre su amor y las cosas que significaron mucho para ellos durante sus años juntos.

Laura: ¡Recuerdas cuando fuimos en paracaídas y pensé que me moriría? ¡Esa fue una gran aventura!
Jonh: ¡Sí, esa fue una gran experiencia! ¡Nunca podría olvidarlo!

Encontraron una quimioterapia qué haría que durará algunos meses más de vida, Laura le rogó a John para que se la hiciera Y él aceptó aunque no creía mucho en eso.

Jonh se comprometió a recibir quimioterapia, aunque estaba muy escéptico de que le daría más tiempo de vida. Sin embargo, su esposa, Laura, insistía en que valía la pena intentarlo y que podría darle más tiempo con su familia.

Jonh: ¡Lo intentaré! ¡Hazme caso!

Laura y Jonh comenzaron su travesía con la quimioterapia y fueron al hospital juntos a cada sesión. Durante los días en que Jonh se sentía mal, Laura estaba a su lado para animarlo y ayudarlo a sentirse mejor.

Laura: ¡Yo estoy aquí para ti! ¡No te rindas!
Jonh: ¡Gracias, Laura! ¡No podría hacerlo sin ti!

Las semanas siguientes fueron un reto para Jonh y Laura, pero se apoyaban mutuamente y lo ayudaron a mantener un espíritu positivo. Cuando Jonh se sentía deprimido, Laura estaba allí para recordarle sus momentos más memorables juntos.

Laura: ¡Recuerdas cuando fuimos a esa gran cena y bailamos bajo las estrellas! ¡Fue tan romántico!
Laura: ¡Recuerdas cuando fuimos en paracaídas y pensé que me moriría? ¡Esa fue una gran aventura!
Jonh: ¡Sí, esa fue una gran experiencia! ¡Nunca podría olvidarlo!

Jonh y Laura también planeaban viajar juntos y ver lugares que habían querido visitar. Decidieron ir a una bonita cabaña en el bosque y pasaron muchos días disfrutando de la belleza de la naturaleza y el tiempo que tenían juntos.

Laura: ¡Es tan hermoso aquí! ¡Me encanta estar contigo!
Jonh: ¡Sí, es increíble!

Pero apresar de todo Jonh aún iba sintiendose mal.
Mientras Jonh pasaba más tiempo con la quimioterapia, sus síntomas empeoraron y se sentía cada vez más cansado. Laura estaba preocupada por él y hizo todo lo que podía para ayudarlo a sentirse mejor.

Laura: ¿Qué puedo hacer para ayudarte?
Jonh: Solo está conmigo. Eso es todo lo que pido.

Mientras Jonh pasaba más tiempo con la quimioterapia, sus síntomas empeoraron y se sentía cada vez más cansado. Laura estaba preocupada por él y hizo todo lo que podía para ayudarlo a sentirse mejor.

Laura: ¿Qué puedo hacer para ayudarte?
Jonh: Solo está conmigo. Eso es todo lo que pido.

Laura pasaba cada día posible con Jonh. Cada vez que él estaba suficientemente bien para hacer algo, se aseguraban de hacerlo. Visitaron museos, vieron películas, comieron en restaurantes favoritos y se reían y hablaban mucho. A medida que el tiempo iba pasando, se dieron cuenta de lo afortunados que eran de tener tiempo juntos.
Durante uno de sus viajes, Jonh y Laura se detuvieron en una playa y disfrutaron del sol y las olas. Mientras caminaban por la playa, Jonh le dijo a Laura cuánto la amaba.

Jonh: ¡Oh, Laura, tú eres mi media naranja! ¡No sabes cuánto te amo!
Laura: ¡Yo también te amo, Jonh!

Durante un año, Laura y John gozaron de la dulzura y la felicidad del matrimonio.
Laura hacía todo lo que podía para ayudar a Jonh durante su enfermedad. Preparaba sus comidas favoritas, lo acompañaba a las visitas al médico, lo ayudaba a caminar alrededor de la casa y hacía todo lo posible para que se sintiera cómodo y contento
Jonh estaba agradecido por el amor y el apoyo de Laura, pero se estaba preparando para el final. Un día, Laura se despertó y encontró a Jonh llorando silenciosamente en su cama.

Laura: ¿Qué pasa, Jonh? ¿Puedo ayudarte?

Jonh estaba llorando porque sabía que su tiempo en la Tierra estaba llegando a su fin. Fue un momento difícil para ambos, pero Jonh agradecía tanto a Laura por estar junto a él.

Jonh: ¡Laura, sé que mi tiempo aquí está llegando a su fin, y quiero que sepas lo mucho que te aprecio por estar conmigo!

Laura: ¿Quieres que cocinemos algo juntos? ¿O puedo ayudarte a organizar tus fotos?
Jonh: ¡Podríamos hacer ambas cosas! Me encantaría compartir estos momentos contigo.
Laura: ¡Oh, Jonh! ¡También quiero disfrutar de cada minuto contigo!
Jonh: ¡Gracias por hacer todo esto por mí!