Todas comenzaron a reír como locas.
Las otras niñas estaban jugando entre sí, pero se detuvieron cuando miraron a las tres.
Dahyun y Chaeyoung caminaron hacia Jihyo quién sostenía la tarjeta y la recogió.
Ambas inclinaron la cabeza mientras sostenían la tarjeta.
Entonces apareció una bombilla sobre la cabeza de Dahyun.
"¡Ah!", Dahyun señaló y le dió la tarjeta a Chaeyoung. Agarró uno de los sables de luz cerca de Jihyo y Sana, lo levantó y se lo dió a Tzuyu.
Hizo que la confundida niña pose con el sable de luz.
"Bueno. Mueve tu mano hacia arriba... ¡Está bien! ¡PERFECTO!", Gritó Dahyun, asustando a Tzuyu.
Chaeyoung comenzó a reír cuando las demás se reunieron alrededor de Tzuyu, quien posaba como Yoda en la tarjeta que Jihyo mostró antes.
Todas empezaron a reír y una sonrisa apareció en el rostro de Tzuyu.
Jihyo y Sana permanecieron en el suelo, riendo como animales locos.
"¡Aaahhh, linda!", Gritó Nayeon mientras levantaba a Tzuyu, envolviéndola en un gran abrazo.
Al final, todas, incluida Nayeon, jugaron Star Wars.
Como siempre, cuando te diviertes, pierdes la noción del tiempo.
Nayeon miró el reloj y se dió cuenta de que se estaba haciendo tarde.
"Tzuyu, deberíamos llevarte a casa. ¡Son casi las nueve! ", Dice Nayeon y Tzuyu entró en pánico en silencio.
Realmente debería irse a casa.
Tzuyu asintió y rápidamente se despidió de todas.
"¡Vuelve de nuevo, Tzuyu!", Jeongyeon gritó desde la puerta mientras Tzuyu entraba en el coche de Nayeon.
Tzuyu se despidió y se sentó en la parte de atrás.
"Entonces, ¿Cuál es tu dirección?", Preguntó Nayeon mientras conducía.
Tzuyu sacó un trozo de papel del bolsillo de sus pantalones y se inclinó para entregárselo a Nayeon.
Con los ojos en la carretera, Nayeon lo tomó para echar un vistazo rápido, asegurándose de no mirar mucho tiempo el papel o de lo contrario ocurriría un gran accidente.
Nayeon asintió y con una mano dobló suavemente el papel y lo colocó en el portavasos a su lado.
Tzuyu comenzó a mover nerviosamente los dedos y, de vez en cuando, levantaba las piernas.
Nayeon se percató del extraño comportamiento de Tzuyu, pero se quedó en silencio ya que Tzuyu no hablaba en absoluto en el viaje en auto.
Nayeon detuvo el auto mientras estacionaba frente a la casa.
"Estamos aquí", dijo Nayeon en un tono alegre, tratando de sacarle una palabra a Tzuyu.
No hubo respuesta, solo se escuchó el sonido de un clic del cinturón de seguridad de Tzuyu.
Nayeon suspiró y abrió la puerta y caminaron hacia la casa de Tzuyu.
"Puedo irme sola desde aquí", Tzuyu se detuvo frente a la puerta principal.
Nayeon negó con la cabeza.
"No quiero que te metas en problemas", dijo Nayeon, preocupada de dejar una mala primera impresión al padre de Tzuyu.
Tzuyu asintió lentamente con la cabeza mientras daba pasos pesados hacia la puerta.
Ella tocó el timbre y Nayeon se sorprendió cuando las luces comenzaron a parpadear cuando Tzuyu presionó el timbre.
