TIENE ALGUNOS ERRORES PERO ME DA IGUAL MAS ADELANTE LOS CORREJIRE SI TENGO TIEMPO.
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Estudios de grabación DOA,
West Hollywood,
California.
Nuestros semidioses y sátiro estaban en Hollywood. Oscureció, y los personajes hambrientos comenzaron a salir a las calles a jugar. Percy era un neoyorquino. No se había asustado fácilmente. Pero LA tenía una sensación totalmente diferente a la de Nueva York. En Nueva York, todo parecía parecido. No importaba lo grande que fuera la ciudad, podías llegar a cualquier parte sin perderte. El patrón de la calle y el metro tenían sentido. Había un sistema de cómo funcionaban las cosas. Un niño podría estar a salvo siempre que no fuera estúpido.
LA no era así. Estaba extendido, caótico, difícil de mover. No fue suficiente para que LA fuera grande; tenía que demostrar que era grande al ser ruidoso, extraño y difícil de navegar, también. Se quedaron en las sombras del bulevar de Valencia, mirando letras doradas grabadas en mármol negro: DOARECORDINGSTUDIS. Debajo, con letras en las puertas de vidrio: NO SOLICITORES. SIN MERODEAR. NO VIVIR.
Era casi medianoche, pero el vestíbulo estaba bien iluminado y lleno de gente. Detrás de la mesa de seguridad había un guardia de aspecto rudo con gafas de sol y un auricular.
En el lobby de la DOA la música sonaba suavemente en parlantes ocultos. La alfombra y las paredes eran de acero gris. Lápices de cactus crecían en las esquinas como manos esqueléticas. El mobiliario era de cuero negro, y todos los asientos estaban ocupados. Había gente sentada en sillones, gente de pie, gente mirando por las ventanas o esperando el ascensor. Nadie se movió, ni habló, ni hizo nada de nada. Si miraras directamente, verías que eran ... transparentes.
El guardia de seguridad era alto y elegante, con la piel color chocolate y el pelo rubio blanqueado afeitado al estilo militar. Llevaba tonos de carey y un traje italiano de seda que hacía juego con su cabello. Una rosa negra estaba sujeta a su solapa debajo de una etiqueta plateada.
Percy leyó la etiqueta del nombre y luego lo miró desconcertado. "¿Tu nombre es Caronte"
' Abrió su gran boca de nuevo,' aunque Naruto.
Guardia se inclinó sobre el escritorio. Percy no podía ver nada en sus lentes excepto su propio reflejo, pero su sonrisa era dulce y fría, como una pitón, justo antes de que te coma. "Qué precioso jovencito". Tenía un acento extraño, británico, si hubiera aprendido inglés como segundo idioma. "Dime, amigo, ¿me veo como un centauro?
" ¿cómo puedo ayudarlos, pequeños muertos?"
Su pregunta atrapó a Percy con la guardia baja. Miró a Himawari en busca de apoyo.
"Queremos ir al inframundo", dijo Caronte se mostró ligeramente impresionado. "No creo que tengas monedas para el pasaje. Normalmente, con los adultos, verás, podría cargar tu American Express o agregar el precio del ferry a tu última factura de cable. Pero con los niños ... por desgracia, nunca mueres preparado". Supongamos que tendrá que tomar asiento durante algunos siglos ".
"Oh, pero tenemos monedas". Percy colocó tres dracmas dorados en el mostrador.
"Bueno, ahora ..." Caronte se humedeció los labios. "Dracmas de verdad. Dracmas de oro de verdad. No he visto esto en ..." Sus dedos se cernieron con avidez sobre las monedas. Estaban tan cerca. Entonces, de repente, Caronte miró a Percy, Caronte se inclinó hacia delante y dio un resoplido. "No estás muerto. Debería haberlo sabido. Eres un semidios."
"Tenemos que llegar al inframundo", insistió Percy.
Caronte hizo un gruñido profundo en su garganta. Inmediatamente, todas las personas en la sala de espera se levantaron y comenzaron a pasearse, agitadas, encendiéndose cigarrillos, pasándose las manos por el pelo o revisando sus relojes de pulsera.
