Cuando todos fueron a dormir, la mujer seguía fuera de la casa esperando a que Faris saliera, lo cual Blark había evitado que ocurriera gracias al viaje en el tiempo.
—Ya es pasada la hora para que salga, pero todavía no aparece... Estoy segura de que esta es la fecha exacta en la que ocurrirá, pero entonces, si no está ocurriendo, ¿yo no debería estar aquí? No lo entiendo, nada de esto debería de estar pasando...
La mujer siguió esperando por varios minutos, hasta que concluyó que en realidad no iba a salir, se sentía muy ansiosa, pero no podía entrar de todos modos ya que la puerta estaba cerrada y era la única entrada posible.
—No hay mucho que pueda hacer, parece que este evento temporal no va a suceder, pero entonces ¿por qué estoy aquí todavía? ¿No debería de haberse arreglado todo? No se me ocurre ninguna solución posible, pero sé sobre alguien que me puede ayudar que en este momento se encuentra sin compañía.
La mujer se dirigió a la casa de Celia, ya eran las tres de la madrugada y al llegar a la casa, se pudo infiltrar en su interior a través de una ventana que pudo forzar su cierre. Una vez dentro, encontró una habitación con la luz encendida, abrió un poco la puerta para ver en su interior y vio a Celia preparando un té para ella misma. Al verla ahí, intentó entrar sigilosamente sin ser vista; pero apenas dio un par de pasos al interior de la habitación, Celia volteó rápido lanzando un bisturí hacia la mujer, fallando por pocos centímetros.
—Sigue siendo complicado manejar la herramienta con esta prótesis... ¿Quién eres y qué haces aquí?
—No estoy aquí para ser asesinada, claro; así que más vale que no vuelvas a intentar algo así si valoras tu propia vida. En cuanto a mi nombre, puedes llamarme «Eda».
—Bien, ya puedes retirarte de mi casa, a menos que quieras ser mi próxima rata de laboratorio, Eda.
—¿No preferirías tener a alguien más interesante que yo para experimentar? Tal vez alguien como Faris, ¿no lo crees así, Celia?
—Estoy segura de que no te conozco de ninguna parte, ¿cómo es que sabes mi nombre?
—¿Te importa más saber eso que poder llegar a Faris? Te ofrezco mi ayuda para lograrlo, sé que quieres aceptar.
—¿Por qué harías eso? De todos modos no tienes idea de con quién estás tratando, esa niña es realmente una maldita escoria.
—Ya son suficientes preguntas, Celia; quién soy, de dónde vengo, qué hago aquí, de dónde conozco tu nombre... Nada de eso es importante. Pero está bien si quieres desaprovechar esta oportunidad que se te brinda en bandeja de plata, quiero arreglar ciertos asuntos con esa niña al igual que tú y juntas seríamos imposibles de detener. Si te niegas, una vez que salga de aquí no me volverás a ver ni a mí, ni a Faris de quien ya me habré encargado por mi propia cuenta antes de que pudieras experimentar en ella.
Celia tomó un sorbo de su taza de té con una expresión indiferente hacia Eda.
—El hecho de que acepte esto no significa que confíe en ti. Acepto formar una alianza contigo, pero intenta cometer cualquier acto en lo más mínimo sospechoso si quieres ver de lo que puedo llegar a ser capaz de hacerte —dijo sumamente intimidante.
Eda sintió un escalofrío recorrer por su cuerpo, pero no temía en absoluto y seguía con su actitud despreocupada.
—Me da igual si no confías en lo absoluto, aceptaste y eso era lo que quería oír. Es suficiente por hoy, sabrás de mí en menos de lo que esperas. Hasta pronto.
Eda se retiró de la casa dejando sola a Celia quien analizaba todo lo que acaba de ocurrir.
—Esa mujer... ¿Qué estará tramando? No recuerdo que haya sido una de mis pacientes cuando trabajaba en psiquiatría; en general, no la conozco. Si esta es de verdad una oportunidad para llegar a Faris, la tomaría sin dudarlo, excepto que los ojos de esa niña son aterradores; no me arriesgaría a volver a perder una parte de mi cuerpo, podría llegar a ser letal. Pero esa mujer, Eda, parece estar conciente de esto, lo mejor será esperar a escuchar su plan.
![](https://img.wattpad.com/cover/371214522-288-k605072.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Sangre Sobrenatural
Ciencia FicciónFaris es una niña de cinco años que sufre del aburrimiento que le provoca llevar a cabo una rutina diara cien porciento monótona donde todo pareciera ser un bucle infinito sin tener la posibilidad de cambiarlo hasta que convence a Blark; su tutor, d...