"Grabé en la penca de un maguey tu nombre Unido al mío, Entrelazados Como una prueba ante la ley del monte Que ahí estuvimos Enamorados"
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Jaehyun amaba a Taeyong con toda su alma. Y al inicio, se notaba que era recíproco.
Siempre estaban juntos, desde que se conocieron cuando "muy chamacos" decía Tae. Jugaban, reían y se querían.
Conforme crecieron, cambiaron los juguetes por el trabajo, y los juegos en la calle por el sembradío, o al menos Jaehyun. Taeyong se quedaba en casa, ayudando a su pobre abuela que ya estaba cerca del ocaso. Que, claramente, lo entristecia mucho.
Pero de todo eso se olvidaba en cuanto veía a Jaehyun, pues era su distracción el salir a dar una vuelta al pueblo en el caballo azabache de Jae o en la vieja bicicleta que tenía.
Un día, en su aniversario, Jaehyun le tapó los ojos y lo subió al caballo. Taeyong se preguntaba donde lo llevaría, pero confiaba en Jaehyun, así que con emoción, esperó.
Mucha fue su sorpresa cuando se detuvo el galopar y le quito la venda. Estaban en el monte donde algunas veces habían escapado. Jaehyun lo tomó de la cintura y lo bajó, tomó algunas cosas que traía cargando el caballo y agarro la mano de Taeyong para guiarlo a un espacio con hierba a sentarse. Puso una manta y sacó comida.
Pasaron la tarde platicando e intercambiando besos, Jaehyun había hecho algo muy romántico para el. Pero eso nunca llenó a Taeyong.
Después, terminando de comer, se levantaron dispuestos a irse. Pero antes, Taeyong llamó a Jaehyun, se le había ocurrido la idea de grabar sus nombres en la penca del maguey más grande y bonito que encontraron. Jaehyun sacó su pequeño cuchillo donde escribió sus iniciales y Taeyong las rodeo con un corazón y una flecha.
Esa noche Taeyong juró amar a Jaehyun toda su vida, y juntos ahí sellaron su promesa con sus cuerpos unidos.
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Pero Taeyong de repente cambió. Parecía que de un día para el otro lo aborrecía. No quería verlo y mucho menos besarlo.
Jaehyun se preguntaba si había hecho algo mal, a lo mejor olía a sudor, o tal vez fue esa vez que su caballo tumbó a Taeyong, o a lo mejor porque pasaba mucho tiempo en el campo o quien sabe, se cansó de la miseria que le pagaban a Jaehyun (pues sabía que Taeyong quería ir a comer a restaurantes, pero ¿qué iba a hacer el si apenas le alcanzaba para comer?) Sin embargo, el siempre quizo darle lo mejor a Tae. Lo sacaba a pasear y le daba pequeños detalles.
Pero no fue suficiente para él. Los ojitos ya no le brillaban, ya no le sonreía ni tampoco hacia muecas con los malos chistes de Jaehyun.
Era el amor de su vida, e intentó aferrarse lo más que pudo a el. Pero se alejaba cada vez más
Y pronto lo vio con otro, un hacendado. Y como si le picara el recuerdo, ese mismo día, tan pronto como pudo Taeyong cortó la penca. Quien sabe, quizás pensaba que le recriminaba algo.
Y sí, claro que sufrió con ver lo ingrato que fue con su amor. Pero esperaba que ese tipejo le diera todo lo que no pudo, esperaba que Taeyong pudiera sentir el vacío del diferente amor, y que nunca, nunca, nunca podría llenar la riqueza.
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"Ahora dices que ya no te acuerdas Que nada es cierto Que son palabras Yo estoy tranquilo, porque al fin de cuentas En nuestro idilio Las pencas hablan"
Pero que no se te olvide que el maguey sabía lo que juraste en nuestra noche. Que el olvido es el precio de la traición.
Y yo no se si creas las extrañas cosas que ven mis ojos, tal vez te asombres, pues las nuevas pencas que al maguey le brotan vienen marcadas con nuestrosnombres
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Estaba bien inspirada JAJAJ Avísenme si hay errores porfiii
