Lo único que se escuchaba en la vocecilla mental de Mae era:
"Eres una basura"Cada vez que un pensamiento intrusivo se le venía a la mente, Mae cerraba con fuerza los ojos, queriendo olvidar lo que estaba pensando. Incluso si era necesario se daba golpes en la cabeza, aunque sabe que no funcionaria del todo. La voz le era molesta, insoportable, la escuchaba en bucle a diario y lo único que le provocaba era sobrepensar.
— Empiezo a pensar en Roblox y termino en Sofía, empiezo a pensar en Los Gatos Guerreros y termino en Sofía, empiezo a pensar en Murder Drones y termino... En Sofía.— Se decía a si misma, entre murmullos.
Se incorporó en la cama, viendo la luz que transmitía la luna. A la vez podía ser relajante y escalofriante, sabía de sobra que cuando más mal lo pasaba era por las noches y no era solo por la oscuridad, si no porque pensaba cosas que le terminaban frustrando.
"¿Por qué piensas en eso, Mae? Eres una completa idiota, sabes que te perjudica y lo sigues pensando." Decía su vocecilla interior.
— Me es inevitable. — Respondió ella en murmullos.
Mae se tumbo de nuevo en la cama, intentando pensar en su amigo Mateo, empezó a recordar las llamadas que hacían mientras que jugaban Brawl Stars: los gritos de desesperación de su amigo cuando le perseguían a él solo en la partida, los retos raros que se ponían en el modo amistoso, los ships randoms que inventaban depende de los bots que salían... Pero tarde o temprano le volvió a venir un recuerdo de Sofía, enlazado con el juego.Recuerdo
Mae, Sofía y otras personas más se encontraban en la mesa del comedor, ya era de noche y estaban esperando para cenar. Sofía y compañía estaban con los teléfonos, Mae miraba toda esta escena de como la gente era absorvida por la pantalla. "Fue un milagro no traer acá el móvil." Se dijo a si misma. De repente, los monitores empezaron a traer los platos de la cena, la gente aún seguía con los móviles, sin despegarse un momento.
Sofía estaba comiendo, pero a la vez jugaba una partida con su amiga, quién se sentaba al lado y le comentaba sobre como iban. De repente llamaron a Sofía, ella se levantó y mandó a Mae a estar pendiente.
— Que no me maten.— Señalo el móvil suyo, sin mirar si quiera a Mae. Ella lo agarró rápidamente y se puso a jugar, hipnotizada.Al llegar Sofía, Mae le devolvió su móvil y empezó a comer.
— No has perdido, que lo sepas.
— Lo veo. — Dijo Sofía, con un tono visiblemente arrogante.Fin del recuerdo
Resopló con el ceño fruncido y cerrando los ojos.
"Eres una completa sumisa, te dejas esclavizar por los demás. ¡Sofía fue un flechazo directo! Ella era la más lista, la más dulce, la más bonita... Y lo sigues siendo. En cuanto a tí, no eres nadie, ni si quiera puedes tener el mismo nivel que ella en matemáticas. Mírate, eres un asco."— No soy nada de eso ni ella tampoco.
Mae se dio la vuelta varias veces en la cama, intentando olvidar todo lo que había pasado por su mente en minutos. Solo quería dormir.Aunque a decir verdad, Mae era un bodrio al lado de Sofía. Ella era perfecta mientras que Mae... Solo es Mae. Lo único bueno es que dibuja bien a veces.
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Nací Con Los Pies En La Tierra
RandomEste libro trata sobre la vida de Mae, quien va pasando por bastantes etapas en su vida, ya sea de sentir celos por primera vez o el amor mismo.