Lover | Rhaenys Targaryen

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        𝕮uando la corona le fue arrebatada frente a los lores y el consejo había decidido que la corona, la sucesión pasaría a su primo Viserys y no ella, se sintió como una puñalada pero ¿Qué esperar de aquellos hombres que creen que solo por tener pene ya son mas merecedores del poder? Nunca culparía a Viserys por las decisiones del gran consejo, aceptaría su derrota con honor y dignidad, no había nada mas que hacer, ahora solo se retiraría a Marcaderiva, su hogar. 

Rhaenys lo había aceptado pero Corlys no. Una vez que estuvieron a solas, las palabras que salieron del marinero dejaron en completo asombro a la princesa.

── Si me pides la corona, te la daré sin importar que tenga que hacer para dártela — sujeto sus manos llevándolas hasta su pecho para acortar la distancia.

── ¿Te das cuenta de lo que dices? Cuida tus palabras, esposo. La fortaleza tiene oídos — advirtió.

── Esto no es justo, Rhaenys, esa corona te pertenece.

── No te aferres a algo que nunca llevó mi nombre. Solo quiero regresar a casa, Corlys. Pronto nacerá Laena, quiero paz en estos últimos días — respondió con tranquilidad apretando las manos de su esposo.

La princesa dirigió las manos de su esposo a su abultado vientre; la aun no nacida Laena, estaba mas que ansiosa por ya llegar al mundo, algo que demostraba todas las noches al no dejar dormir a su madre con las fuertes patadas.

Unos dias mas tarde el matrimio se encontraba en Marcaderiva pero parecia ser que las sorpresar aun no culminaban para la joven princesa, quien se encontraba en sus aposentos tratando de calmar a los insistentes golpes de su hija cuando recibio la noticia de que su esposo se encontraba preparandose para irse de viaje. Rhaennys no midio la rapidez con la que se puso de pie, perdiendo el equilibrio pero siendo socorrida a tiempo por su doncella.

── Princesa, debe sentarse.

Sin hacer caso a las sugerencias, coloco una de sus manos en su espalda baja, salio de la habitacion en busqueda de su esposo. Se mostraba reacia a creer que su esposo la dejaba a solo unos dias del nacimiento de su hija, ella no podia estar sola  mientras se debatia entre la vida y la muerte, necesitaba a Corlys a su lado para saber que todo estaria bien.

En cuanto lo encontro llamó su atencin.

── Me han informado que te iras ¿Es cierto? — pregunto temiendo la respuesta.

── Los peldaños estan nuevamente en peligro — informo.

── Corlys, tendre a tu hija en un par de dias, espero por los dioses que todo salga bien pero ¿Que pasa si algo sale mal? — estaba dolida.

── Tendrías al maestre y a la partera, todo saldra bien — espeto sin entender las palabras de su esposa.

── No quiero al maestre, a la partera o a una doncella tomando mi mano, te quiero a ti Corlys. Al menos quiero saber que si muero, mi hija estará bien porque tú estarás ahí para cuidarla, no quiero que unos brazos ajenos la tomen solo porque tu decidiste que los peldaños eran mas importantes.

── Jamás digas eso — la miró molesto — No vas a morir, Rhae, eres sangre de dragón, eres fuerte y valiente — acarició su mejilla.

── Hasta los mejores dragones mueren en batalla — sostuvo la mirada mientras alejaba la mano de Corlys.

Las palabras de su esposo llegaron al corazón de Corlys, pero no lo suficiente como para hacerlo cambiar de parecer. Con un suspiro, el hombre dejo mas que en claro su decisión y antes de dejar sola a Rhaenys por años, le dio un último beso de despedida.

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Esta es la primera vez que escribo un fanfic del universo de George, estoy muy emocionada por este, especialmente porque mi personaje favorito es Rhaenys.

Quiero aclarar que el cast se mantiene intacto, Eve best seguira siendo Rhaenys y Steve Toussaint, Corlys. Así mismo, que los capítulos serán breves y disculpen de antemano si hay algo que no esta canónicamente correcto ¡Recuerden que es un fanfic, solo disfruten!

De antemano, gracias por dedicar un fragmento de su tiempo para leerlo. ✨