Dulce tentación (patelen)

capitulo uno

La luz del set de Top Chef VIP parpadeaba suavemente, reflejando la emoción y la tensión acumulada durante meses de intensas grabaciones. Paty, con su energía característica y una sonrisa que no se desvanecía, se preparaba para el nuevo día. A pesar del cansancio que comenzaba a pesar en sus hombros, sentía que esta experiencia había sido una de las mejores de su vida. Había forjado amistades significativas con muchos de sus compañeros, pero había una persona en particular que ocupaba un lugar especial en su mente y corazón: la chef Belén.

Desde el primer día, Paty había sentido una atracción hacia Belén que iba más allá de la admiración profesional. La chef, con su presencia imponente y su aura de seguridad, había capturado la atención de Paty desde el momento en que había pisado el set. Su manera de presentar, su elegancia natural y la forma en que dominaba la escena la habían fascinado. Con el paso de los meses, esa fascinación se había transformado en algo más profundo. Cada interacción con Belén, cada sonrisa compartida y cada palabra intercambiada se sentía como un regalo que Paty valoraba enormemente.

Hoy, Paty estaba particularmente emocionada. la chef Belén estaría en el segmento de grabación de hoy, y no podía evitar que su corazón se acelerara con la posibilidad de tener otro momento a solas con ella. Mientras el equipo ajustaba los últimos detalles y se preparaba para comenzar, Paty se encontró mirando el reloj con creciente impaciencia. El set estaba lleno de actividad, con asistentes corriendo y cámaras siendo posicionadas, pero todo lo que ella podía pensar era en Belén.

El momento llegó cuando Belén apareció, deslumbrante como siempre, con una sonrisa que parecía iluminar el espacio. Paty sintió cómo su estómago se revolvía con una mezcla de nervios y emoción. La chef se acercó a su mesa, y Paty no pudo evitar notar el elegante movimiento de sus pasos y la forma en que sus ojos brillaban con una calidez genuina.

“Hola, Paty,” saludó Belén, su voz suave y melodiosa, como si estuviera recitando una canción favorita. “¿Cómo estás hoy?”

“¡Hola, Belén!” respondió Paty, intentando mantener la calma. “Estoy bien, gracias. ¿Lista para otro día de grabaciones?”

“Siempre lista,” dijo Belén con una sonrisa amplia. “Me encanta la energía que aportas a cada grabación.”

Mientras se preparaban para comenzar, Paty se dio cuenta de cómo Belén estaba especialmente atenta a cada detalle, colaborando con el equipo de una manera que parecía casi mágica. La forma en que Belén se inclinaba ligeramente para escuchar a los demás, cómo sus ojos se posaban en Paty con un interés casi palpable, hacía que Paty se sintiera como si estuviera en el centro de un sueño encantado.

Cada vez que Belén se acercaba, Paty sentía un cosquilleo en el estómago, una sensación de emoción que no podía ignorar. El intercambio de miradas, las sonrisas compartidas y los pequeños gestos de camaradería se convirtieron en momentos que Paty atesoraba. Las conversaciones entre ellas eran fluidas y naturales, llenas de risas y complicidad. Belén, con su humor agudo y su capacidad para hacer que todo pareciera ligero y divertido, lograba que el tiempo pasara volando para Paty.
------------------------------------------------------

los concursantes se preparaban para otro día de desafíos culinarios. Esta vez, los retos del cuchillo estaban en el aire, un evento que siempre traía consigo un aire de competencia y emoción. Paty, con una mezcla de nervios y entusiasmo, estaba lista para enfrentarse a la prueba del día.

Cuando se le entregó un cuchillo con un mango de color vino tinto, Paty sintió una ola de satisfacción. Miró a su alrededor y vio que su equipo estaría compuesto por Natalia y el niño, lo que la hizo sonreír. Había trabajado con ellos en varias ocasiones y su camaradería siempre había sido una de las partes más agradables de la competencia.