☆𝙋𝙚𝙦𝙪𝙚ñ𝙖 𝙑𝙖𝙡𝙞𝙚𝙣𝙩𝙚☆| Bakugou Katsuki

001

ENCONTRAR una luz que ilumine tu camino, y no soltarla hasta enmendar el pasado, para reconocer el futuro.

...

-¿Donde te escondes? Pequeña traviesa.-la madre caminaba sigilosamente buscando a su pequeña peli-naranja.-oh...-la mujer solo una risa al escuchar la contagiosa y risueña expresión de su pequeña.-Talvez....-la mayor destapó el mantel de la mesa, la pequeña niña se había movido de escondite.

-aqui estoy!-la pequeña espanto a la mujer. La mayor la levantó en sus brazos y le hizo cosquillas.-basta mami!-una risa risueña resonó por el bosque.

-Mis hermosas doncellas!-el gran padre levantó en brazos a las dos y junto su frente con la de su pequeña peli-naranja.-Te traje un regaló!-la niña bajo de sus brazos emocionada.

-Que es?!-brinco emocionada.Su padre le tendió un hermoso arco, hecho de madera de pino con finas flechas con pumas de cuervo. al tomarlo, el peso la dejo caer.-Es muy lindo! Vamos a probarlo!-lajo del brazo de sus padres para que ellos la ayudarán.

-Enserio? Fergus, ¿un Arco?-el hombre beso la frente de su amada esposa y río con fuerza.

-Ella debe aprender a defenderse, es una princesa ella-la mujer lo interrumpió.

-Ella debe comportarse como una dama.-señalo a su hija que a duras penas, podía tomar el arco y apuntar.

-Es una niña, Eleonor. Déjala disfrutar.-acaricio el largo cabello azabache de su mujer.

-ay! Falle...-la pequeña exclamó decepcionada. La flecha llegó algo lejos, en el bosque.

-Ve por ella, cariño.-su padre insisto.

La rizada se adentro al bosque buscando su flecha. En cuanto la encontró, algo llamo su atención.
Una luz mágica. Sus ojos se llenaron de maravilla y asombro al contemplarla, intento tomarla, pero la luz se fue.

-vi una Luz mágica!-llego algo cansada a su pequeña casa de campaña.-vi una luz mágica.-suspiro.

-Dicen...que esas luces, iluminan tu camino y que debes seguirlas...-la princesa miro atenta a su padre, mientras el relataba.

La mayor golpeó el brazo del hombre.-pero ahora es tarde, vayamos a comer.-cargo en sus brazos a la princesa y la llevo adentro de su casa de campaña.

Los gritos de su esposo llamaron la atención de la mujer, quien tomo rápidamente a su hija en brazos y salió corriendo.

-Fergus!-exclamo la mujer asustada, mirando a su esposo pelear contra un gran oso. Mordü.

-Váyanse!-la mujer hizo caso y subió a uno de sus caballos, llevándose a la niña, quien lloraba por su padre.