La Sombra que devora el Mundo

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Algunos están en la casa,discutiendo sobre la criatura que vio Valeria en el bosque.

-¿Qué crees que era esa cosa?-pregunta Julián.

-No lo sé,pero era enorme. Me pareció que estaba observándome.

Julián frunce el ceño.
-No me gusta,esa criatura parece ser un enigma.

El padre de Valeria asiente.
-Debemos estar atentos. No sabemos qué es ni qué quiere.

Valeria mira a Elena que observa por la ventana.
-¿Que pasa,Elena?

-Esa criatura...está caminando por la calle.

Julián se acerca a la ventana para ver.
-Eso es extraño,si esa criatura es tan peligrosa como parece..debería estar atacando a alguien.

Pablo,el padre de Valeria se une a ellos en la ventana.

-Tal vez esté esperando algo. Oh siguiendo un plan que no entendemos.

Valeria habla.
-Tal vez sabe que somos las únicas personas que estamos aquí,no hay nadie más en el pueblo.

-Eso explica porque no ataca. Está centrada en nosotros,en esta casa.-habla Elena.

Pablo frunce el ceño.
-Eso no me gusta,somos un blanco fácil aquí en el pueblo. Debemos tomar medidas para protegernos y que no nos detecten.

-Tienes razón.-dice Valeria.

Elena piensa.
-Podemos intentar bloquear nuestra energía,hacer que sea más difícil para ellas detectarnos.

-Es buena idea,también haremos una barrera alrededor de la casa que le impida acercarse.-dice Pablo.

Mientras Julián,Pablo y Elena leían libros para saber cómo alejar a la criatura Valeria fue al baño.
Se miró al reflejo,tenía una expresión de preocupación y estrés. Se echa un poco de agua en el rostro para intentar calmar los nervios. Cierra los ojos y respira profundamente,se seca el rostro con una toalla. Valeria se queda congelada con la toalla en sus manos,escuchando atentamente. El sonido es débil,pero definitivamente está ahí. Algo arrastrándose por la calle,fuera de la casa.

Su corazón late más rápido y siente un escalofrío, ¿Qué es eso? Se pregunta ah sí misma. Se acerca sigilosamente a la ventana del baño,no puede ver mucho en la oscuridad. El sonido sigue lento y constante. Sigue observando..se queda petrificada con los ojos fijos en el horror que se despliega ante ella. La serpiente..oh más bien,el basilisco..es inmenso,con escamas negras como el carbón y ojos rojos que brillan. Su cuerpo se estira por toda la calle,ocupando todo el ancho de la calzada,como si estuviera oliendo el aire.

Valeria recuerda las palabras de su madre cuando le contaba historias cuando era pequeña:
-El basilisco puede petrificar con su mirada,pero solo si te mira directamente ah los ojos.

Cierra la ventana de un golpe y se agacha,asustada,tratando de recuperar el aliento. Luego,se levanta y corre hacia el salón..dónde están los demás.

-Elena,Julián..Papá..dios es enorme,está en la calle!-dice en voz baja pero asustada.

Pablo y Elena se miran alarmados.
-¿Qué? ¿Donde?

Valeria se deja caer en el sillón temblando.
-En la calle..fuera de la casa. Estaba arrastrándose hacia aquí. ¡Es tan grande!

Pablo se acerca a ella.
-¿Estas segura que era un basilisco?

Valeria asiente.
-Si,estoy segura..¡Lo vi! ¡Era tan largo!.

Julián se levanta y se dirige a la ventana.
-Voy a ver-dice pero Pablo lo detiene.

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