Taberna Konoha: Llamada de apertura Uchiha Madara

167 Jiraiya: ¡Flor limpia! ¡Chiba me engañó!

167 Jiraiya: ¡Flor limpia! ¡Chiba me engañó!

"¡auge!"

Tsunade abrió la puerta y dijo enojada:

"¡Chiba! ¡Guau!"

"Tenéis buen vino y buena carne, ¡pero no le informasteis a mi vieja!"

Tsunade llegó a la mesa de Chiba enojada.

"¿No hay dos lugares reservados para ti y Shizune?"

Chiba señaló los dos asientos vacíos en la mesa, curvó los labios y dijo.

"Um..." Tsunade tragó saliva y se rascó la cabeza, ¿así que estaba emocionado?

Sabiendo que estaba equivocado, Tsunade se mordió el labio ligeramente.

Luego se sentó obedientemente.

"Eso es más o menos..."

Chiba puso los ojos en blanco, agradeciéndose a sí mismo por desocupar el asiento con anticipación.

De lo contrario, no sé qué tan loca está esta mujer.

Después de cenar, todas las chicas volvieron a sus respectivas habitaciones y se fueron a dormir.

"Jefe, ¿dónde duermo?"

"La verdad es que me encantaría acostarme con mi jefe.

Kurama saltó frente a Chiba, levantó la cabeza y "083" preguntó con curiosidad.

"¡Seguro!"

"Por supuesto que dormiste en el vestíbulo."

Chiba sonrió levemente: "Como mascota de esta taberna, debes dormir en el salón principal".

-Esta es la regla en esta taberna.

Kurama se paró en la barra y miró alrededor de la taberna, pero no pudo encontrar un lugar para dormir.

—Jefe, ¿dónde duermo entonces? —Kurama estiró sus garras y tiró de la ropa de Chiba.

—Sobre la barra —Chiba sonrió e inmediatamente señaló con su dedo la barra frente a Kurama.

"De ninguna manera..." La expresión de Kurama colapsó de repente.

—Está bien, estoy bromeando contigo. —Chiba no pudo evitar mover un poco la cabeza de Kurama.

Este pequeño Kurama, si es tranquilo, es bastante bueno.

Bajo la mirada de Kurama, Chiba agitó las manos sin dudarlo.

En el siguiente segundo, una luz blanca apareció frente a Kurama, y ​​luego apareció una guarida súper lujosa en el mostrador del bar.

"Aquí es donde descansarás a partir de ahora."

"Por supuesto, puedes dormir con nosotros si quieres.

"Puedes dormir con tu padre de los Seis Caminos, lo que quieras.

Chiba acarició suavemente la cabeza de Kurama y luego sonrió.

"¡Maldita sea! ¿Qué edad tengo? ¿Todavía me acuesto con adultos?" Kurama sonrió.

Perforar ese lujoso nido frente a ti, y además estar cómodo, ¡es increíble!

-Está bien, entonces no te molestaré.

"Buenas noches, Kurama."

—Buenas noches, jefe. —Kurama también asintió.

Después, Chiba también regresó a su habitación, listo para dormir.