Taberna Konoha: Llamada de apertura Uchiha Madara

175 Hidan: ¡Oppa Kakuzu! ¡Vuelve pronto! ¡No puedo hacerlo solo!

175 Hidan: ¡Oppa Kakuzu! ¡Vuelve pronto! ¡No puedo hacerlo solo!
La voz de Chiba interrumpió directamente el hechizo de los dos.

"Por cierto, casi me atrapan ustedes dos".

Chiba frunció las comisuras de la boca y preguntó: "¡Dije que ustedes dos son bastante valientes!"

"¡Mira lo que has hecho!"

"Qué bueno..." Uchiha Madara y Senju Hashirama estaban un poco desconcertados.

"¿Qué es lo bueno? ¿Aún no tienes idea?" Chiba puso los ojos en blanco.

"Um, ¿descubriste todo esto?" Senju Hashirama sonrió coquetamente, rascándose la cabeza, y se acercó a Chiba.

"¡Maldita sea, yo también quiero ser bueno para ti y Tsunade!"

—Pero ¿no quieres llevártelos contigo? —dijo Chiba impotente.

"¿Qué demonios es esto? ¿Por qué me confundo cada vez más cuanto más lo miro?" Uchiha Madara frunció el ceño ligeramente.

"¿No es simplemente estar tirado en la pared y escuchando a escondidas..."

"¡Shh! Ah Madara......" Senju Hashirama rápidamente hizo un gesto de "shh".

"¿Escuchando a escondidas desde la esquina? ¡Sí!" La comisura de la boca de Chiba se torció violentamente.

"Gran Zhuzi, ¿no te estás volviendo cada vez más valiente ahora?"

"Ejem..." Senju Hashirama tosió violentamente, "Oye, Jefe Chiba, ¿no acabas de decir que lo sabes todo..."

"Quiero decir......" Chiba entrecerró los ojos ligeramente, y así sucesivamente.

Parece que algo anda mal, lo que dije es que alquilaron la casa a escondidas.

Sin embargo, lo que revelaron parecía ser una escucha clandestina en la esquina.

En ese caso ¿realmente no fueron ellos dos quienes lo alquilaron?

Joder, si lo pones así, ¿es realmente este 370 una coincidencia?

¿Existe realmente tal coincidencia en el mundo?

Chiba se rascó la cabeza, ya que no fueron Senju Hashirama y Uchiha Madara quienes lo inventaron.

Entonces le da vergüenza quedarse aquí.

Regresemos y descansemos primero.

-Oh sí, al mediodía, ven a mi habitación y llámame.

"Volveré a dormir un rato". Chiba se puso de pie. "Vi un buen restaurante de barbacoa.

"En ese momento, vayamos a un restaurante de barbacoa para almorzar al mediodía".

"Después de comer, vayamos a las aguas termales por la tarde".

"¡Está bien!" Senju Hashirama asintió de inmediato. "Por cierto, una mañana de sueño, ¿es suficiente?"

"Ya es suficiente", dijo Chiba.

"Oye, oye, oye, en realidad no tenemos prisa, puedes hacer lo que quieras". Senju Hashirama se frotó las manos y se rió.

—¿Por qué siempre siento que hay algo en tus palabras? —Chiba puso los ojos en blanco—. Está bien, me retiraré.

Después de hablar, Chiba abandonó rápidamente la casa de Senju Hashirama.

"¡Ah, es cierto! ¡No se permite escuchar a escondidas! No sé de dónde lo aprendiste".

Cuando Chiba estaba a punto de salir de su habitación, dio una orden rápida.