Noches de Hanknow - One Shots

OS 3

Título: rosas
Contiene: soft
Jisung: 28
Minho: 27
Palabras: 2323

Jisung le prometió a Minho mil rosas.

[...]

Era de los primeros días del invierno, y como cada viernes, Minho se estaba alistando para su caminata semanal. Sabía que en estas épocas las rosas eran escasas, pero el era fiel a la idea de que encontraría al hombre que hacía unos años le robó el aliento, e incluso hasta ese momento, su corazón, con un ramo, esperándolo en su café de siempre, a la hora de siempre.

Lee Minho, un chico de veintidós años, se había enamorado de Han Jisung, en ese entonces su mejor amigo, un año mayor que él. Lee llevaba varios meses enamorado de él, y un día, especialmente una primera nevada, Han se le había declarado. Minho no podría describir la felicidad que sintió en ese entonces, pero recordaba perfectamente la tristeza que sintió hace un par de años, cuando su entonces novio, decidió romper con él.

En ese tiempo Minho no entendía porque le había dicho que lo suyo no duraría, en especial cuando se despidió de él, feliz de haber tenido la oportunidad de hacer sus vidas coincidir, y de regalarle momentos tan bellos. Si eran bellos, ¿Por qué terminarlos? Después de eso no volvió a verlo por el campus de la universidad, o en el parque, o el café donde siempre tuvieron citas tan únicas.

Pero cuando Changbin, el hermano mayor de Jisung, le explicó que al momento en que su madre homofóbica se enteró de su relación, decidió que terminaría la universidad en el extranjero. Jisung no tenía más recursos que lo que venía de su madre, y no podía ser extremadamente exigente respecto a sus decisiones.

Changbin le había contado que Jisung estaba avergonzado de no poder enfrentar a su madre, por no ponerle un alto en nombre de su relación y del amor que Jisung le tenía, pero es que Minho entendía, también era su madre, soltera, manteniendo dos hijos universitarios que aún no conseguían trabajo porque no tenían experiencia. Entendía que debía obedecer, y que él no debía interferir ni ser un motivo para que Jisung pudiera tener problemas familiares.

Se sentía destrozado, pero entendía. Le costó entender que de un día para otro, Jisung pasó de estudiar en la universidad de Seúl, a estudiar en la universidad más prestigiosa de Malasia, le costó acostumbrarse que al llegar a su casa, no le enviaría mensajes, porque un día se dio cuenta que no le llegaban, le costó ir a su cafetería, y darse cuenta que ahora solo era un café lleno de recuerdos. Estuvo destrozado mucho tiempo, pero a su vez, mantuvo un mínimo de esperanzas de verlo de nuevo. Él era muy supersticioso, y pasaron la primer nevada de aquel invierno juntos, lo que le hacía pensar que tarde o temprano la vida volvería a reunirlos. Además, Jisung era su primer amor, y él sabe que ese amor es el verdadero, es ese amor al que uno le entrega todo, porque está descubriendo y experimentando ese sentir.

Sus esperanzas crecieron el día que Changbin le había comentado que Jisung planeaba volver dentro de poco, nunca especificó en cuanto tiempo sería eso, pero el estaba más que feliz con esa información. Según él, Jisung no había dejado de querer a Minho, decía que cada que hablaban, Jisung mencionaba algo sobre extrañarlo, o hacía mención de algunas costumbres que tenían juntos. Y Minho solo sonreía para sus adentros, porque le hubiese gustado que se lo mencionara directamente a él, pero claro, su madre llegaba a enterarse de que mantenían contacto y no sabría de lo que era capaz la mujer.

Desde esa noticia, Minho, con esa esperanza de que Jisung recuerde el lugar donde tuvieron su primera nevada juntos, iba a caminar y pasar la tarde en aquel parque cerca del café a donde entraron cuando la nieve se hacía demasiada.

Se estaba alistando en su habitación para irse, cuando otra voz apareció repentinamente

-¿Vas a seguir intentando? ni siquiera sabes cuando vendrá, te estás ilusionando demasiado, ¿no lo crees?- Dijo Felix, su hermano menor, desde el umbral de la puerta. Minho lo miró y negó, terminando de colocar una bufanda al rededor de su cuello.