habían pasado los días y el plan de los tres chicos para poderte ver era simplemente…estudiarte, conocerte, ver tus puntos débiles, en lo que eras buena, como actuabas, tus gestos y cada uno de tus movimientos, lo hacían de forma en la que no supieras…te espiaban día y noche sin descanzo alguno, no querían perderte de vista ni un segundo, te mandaban regalos, como cartas, flores, joyas hermosas, ropa de la mejor marca, claramente siempre de manera anonima.
durante los días que te estuvieron observando se dieron cuenta de algo…que tu corazón pertenecía a alguien, un chico que siempre iba a la cafetería en la que trabajabas; les molestaba la forma en que lo mirabas, como le hablabas, le sonreías, la simple idea de que estuvieras cerca de el les hacia perder la cordura.
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hoy era el día…por fin estoy decidida a confesarle mis sentimientos a mi tan amado chico…el único que hace latir mi corazón con tanta velocidad, me hace sentir cosas inexplicables, Jonh era el chico mas guapo, inteligente y generoso que pude haber conocido…
—okay shina…solo hay que decirlo y listo—me auto motive y camine hacia la mesa donde siempre se sentaba.
mientras pedía su orden y yo la anotaba pensaba como decirle.
—solo voy a querer eso shin, hoy no tengo mucha hambre— me respondió con la dulce sonrisa que siempre me daba—
—amm…oye, quería…quería saber si…nos podemos ver en el parque cerca del restaurante louise's —dije rápidamente con un sonrojo en mis mejillas—
—oh…claro, nos vemos allá, tienes mi número así que mándame mensaje de la hora y ahí estare—respondio con una sonrisa amable—
asentí y me metí a la cocina a preparar su orden, era tan hermoso y tan bondadoso que simplemente quería estar para siempre con el…quería su corazón.
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ya habia terminado mi turno y rápido me fui a mi casa para arreglarme y ver a John, habíamos quedado a las 10:00 asi que tenia buen tiempo.
terminado salí de mi casa caminando unas cuadras hacia el parque sintiendo como si alguien me estuviera siguiendo, escuchaba susurros y pasos.
—supongo que son los nervios…—dije respirando para tranquilizarme.
llegue al parque y a los minutos llego Jonh…mi corazón se aceleró y mis mejillas se calentaron, necesitaba decirle todo lo que sentía por y con el.
—jonh…no quiero alargar más las cosas…tu sabes que siempre he sido directa y ahora lo seré…—dije tomando una bocada de aire—
—hace tiempo…empecé a sentir mi corazón latir muy rápido, mis mejillas enrojecer y mi cuerpo temblar…cada que me veías o me acercaba a tomar tu orden, siempre tuve en claro que lo que sentía por ti pero hasta ahora tenía pena de decirlo…yo…yo quiero tu corazón Jonh! prometo cuidarlo! —dije cerrándolo los ojos para después abrirlos esperando su respuesta—
levanté la mirada y ví una cara de asco y decepción, me dió miedo ver sus ojos llenos de asco directo hacia mi, no sabía el motivo.
—fui amable contigo…te trate como una persona normal…pero solo por generosidad, en ningún momento me llegaría a gustar alguien con feas cicatrices en la cara, que asco
sus palabras se clavaron una a una en mi corazón, sin pensarlo mis lágrimas salieron mojando mis mejillas mientras veía como se daba la vuelta y se marchaba.
me quedé un rato en el parque hasta que ví a 3 chicos acercarse a mi, eran los que estaban amarrados hace unos días.
—necesitan algo?—trate de disimular mi voz entrecortada y limpie mis lagrimas—
—por que lloras muñeca?— pregunto el peli-lila menor—
—no es nada—respondi viendo al piso para dirigir mi mirada hacia los tres—
—mis cicatrices sin feas?—pregunte sin más sintiendo las lágrimas traicioneras recorriendo mi rostro—
—oh princesa…no pienses eso…eres totalmente hermosa—contesto ran sentándose a mi lado poniendo la mano en mi hombro—
—para mi son lindas, yo también tengo, mira~—contesto el pelirosa con una sonrisa señalando las cicatrices en su cara—
después de esa pequeña plática nos fuimos hacia mi departamento mientras hablábamos de diversos temas hasta llegar a la entrada del edificio.
—bueno…nos vemos otro día, ya tengo sus números y saben dónde trabajo, espero verlos por hay!—dije animada
—si preciosa, nos veremos por allá…quieramos quedarnos más tiempo pero…hay algo que tenemos que hacer—contesto rindou con algo de seriedad en sus palabras—
—bueno ya no los molesto!—dije y entre a mi edificio con una sonrisa—
los tres chicos se despidieron y caminaron hacia la casa de John sumamente molesto por lo que le había dicho a su reina.
—hay que ser educados~—dijo sanzu tocando la puerta de la casa—
Jonh abrió la puerta y antes de que pudiera decir algo el golpe de parte de ran directo a su cara fue más rápido.
—COMO TE ATREVES A DEVIRLE ESO A NUESTRA REINA, HIJO DE PUTA—grito rindou—
los tres chicos entraron a la casa golpeando a Jonh, un golpe tras otro hasta dejarlo inconsciente.
—nuestra reina quería su corazón—dijo entre suspiros cansados ran mientras arrastraba el cuerpo de Jonh al interior de la casa.
