Empieza la nostalgia, veo mi pasado y no supe valorar muchos momentos como tampoco supe valorar a ciertas personas un poco más de lo que merecían...
Soy prisionera de la nostalgia, los momentos que creí insignificantes ahora están más marcados que los que supuse serían importantes, veo el pasado y me distraigo del supuesto futuro para el que me preparo, ambos me roban la felicidad, uno está lleno de drama, arrepentimientos e ignorancia, mientras que en el otro aún no sucede nada. Por ello dependemos del presente.
Quien lo diría, estoy contra el destino, ahora mi futuro yo defino... ¿dejarme llevar por la suerte, que quien sabe de donde sale?