Alexander
hace dos años
-Pero que dices- digo mirando a Jack quien hace un minuto había propuesto que hiciéramos un viaje por Europa, excusándose de que era la mejor idea que se le pudo haber ocurrido y que teníamos que probar de todo en esta vida.
-A ver, está todo solucionado, solo tenemos que llegar a los hoteles, son dos meses y la vamos a pasar de puta madre, además tu supermodelo nos puede hacer un tour en Francia, y conocer las calles por donde brota el amor, quien dice que no conozca al amor de mi vida... - dice con una sonrisa en la cara, haciendo gestos de súplica.
-Mientras el amor de tu vida no esté casada...- digo mirando por la ventana mientras tomo un sorbo de mi whisky.
-Eso es un si.- dice tomando su mochila para dirigirse a la puerta dando saltitos. – Te paso a recoger a las ocho, el vuelo sale a las diez. – dice cerrando la puerta y evitando ganarse una mirada de muerte por mi parte.
Aquella supermodelo que menciono Jack es una chica que conocí hace un par de meses, era una chica agradable y me gustaba estar con ella, nunca he sido mucho de salir con chicas, pero ella era muy linda, nos habíamos conocido en una fiesta y se notaba divertida, comenzamos a hablar y ella no era intensa, no era como otras chicas, a pesar de ser supermodelo en realidad era bastante tranquila y eso me agradaba, tampoco se metía en mi espacio personal.
Con Jack pasamos algunas semanas en Italia y luego nos fuimos por España, hasta llegar a Francia, en esos dos meses que estuvimos visitando esos países me di cuenta de que en realidad Jack tenia un estilo de vida, aparte de promiscuo, muy libre, era raro verlo molesto u estresado por algo, nunca lo he visto enamorado y muy pocas veces lo he visto triste, es un chico totalmente contrario a mi, según Jack mi personalidad se basa en ser imprudente, sarcástico, malhumorado y con un humor raro.
-Hoy se van?- pregunta aquella chica morena aún recostada en la cama, haciendo un puchero.
-Si, entramos a clases la próxima semana. – digo y ella se levanta para acercarse a mi.
-Entonces, ¿somos novios? - Pregunta con una voz nerviosa mientras jugaba con sus manos, la miro y la verdad no me molesta su presencia, y si eso significaba que ya no tendría a las chicas siguiéndome por todas partes para mi eso era un si.
-Si eso quieres – digo y ella me mira a los ojos con un brillo particular, su sonrisa se ensancho y se lanzo a mi rodeándome con los brazos dejando un beso casto en mis labios, digamos que no era una sensación como lo describen en las películas, pero tampoco era desagradable.
-Iré a cambiarme para llevarlos al aeropuerto. – dice y se marcha de la habitación dejándome solo por unos minutos hasta que llegara Jack.
-Así que estas de novio ¿eh? Jamás creí ver eso, igual creo que moriré antes de ver que estés enamorado – hace un gesto dramático de morir
-¿Quién dice que no lo estoy? – inquiero y el hace un gesto de desaprobación
-Si lo estuvieras, yo estaría muerto. – dice levantándose para irse, mientras yo me quedo pensando.
En realidad, nunca me he enamorado, o no lo sé, no sé qué se siente estar enamorado, usualmente me siento atraído, hay muchas mujeres guapas, pero nunca he sentido eso que se supone que debería sentir, Ema era una chica espectacular, físicamente era demasiado atractiva, pero su tacto no me encendía, solo no me desagradaba como el resto y para mí eso era suficiente.
Sali al balcón mientras Ema terminaba de arreglarse, me fume un cigarro para relajarme, usualmente no fumaba, pero en ese momento lo necesitaba, cuando ya todos estábamos listos Ema nos fue a dejar al aeropuerto, se despidió de mi con un beso y con sus ojos cristalizados me dijo adiós, en fin, el viaje fue relativamente corto, Jack iba dormido porque anoche había bebido hasta dios sabrá que, cuando llegamos nos fuimos a mi apartamento y allí nos duchamos y charlamos, hasta que Jack se fue a su casa.
