Más que una escena... (railo)

"Abrumada"

Luego de salir de la universidad, Rai comenzó sentirse triste y abrumada por la situación que estaba viviendo Su único deseo era llegar a casa.

Una vez en su casa, se dirigió rápidamente a su cuarto, se cambió de ropa y se desplomó en la cama. Le afectaba tanto que no tenía ganas de hacer nada, solo quería dormir. Aunque sabía que no podía oponerse a las decisiones de su madre, no podía evitar sentirse así.

Este era su sueño, su forma de ver la vida, y ver que no podía llevarla a cabo la tenía abrumada. Al paso de las horas, Rai despierta desorientada viendo que estuvo todo el día durmiendo, esto la hace pararse de la cama y salir de su cuarto, lo menos que quería que pasara era encontrarse su mamá y como cosa del destino no pasó. Se dio cuenta que su madre aún no había llegado a la casa.

Sin ganas de nada agarró su toalla, su teléfono y su bocina y fue directo a su baño. Mientras se bañaba sonaban las canciones más deprimentes de su playlist, y entre esas comenzó a sonar "Tv de Billie Eillish".

Luego de bastante rato desperdiciando agua en su ducha y cantando emotivamente, salió de su baño y volvió a su cuarto. Se puso su pijama más cómoda con su gorro de satín para sus rizos.

Prendió su televisor en busca de su película reconfortante para sus momentos más tristes, y puso "Tangled - Rapunzel". Desde que salió nunca la dejó de ver, la acompañaba en todas las facetas de su vida, y por su significado, en esos momentos se sentía identificada. Se sentía como niña pequeña viéndola por primera vez.

Ya en la madrugada luego de ver la película, le empieza a dar hambre, ya que estuvo todo el día sin comer. Sale de su cuarto y va hacia la cocina. Mientras pensaba en que comer escuchó la puerta de la casa abriéndose, y para sorpresa era su madre a estas altas horas de la madrugada.

Por la llegada tan escandalosa de su mamá, Rai nota que está un poco pasada de copas y quizás drogada. Sigilosamente intenta salir de la cocina con comida en mano, porque no quería toparse con su mamá y menos en ese estado. Para su mala suerte su madre la ve y le habla, como si la conversación que tuvieron hace unos días no hubiera pasado, como si desde ese día hubieran tenido una relación completamente normal.

Como es bien sabido las personas constantemente cambian de humor, también se sabe que cuando toman alcohol  y consumen drogas los cambios de humor y temperamento son variados. Y no es para menos que a su madre le pase lo mismo.

- ¿Que haces despierta a esta hora?. ¿Todo bien?.

- Sí, todo bien, vine a buscar comida porque tenía hambre. ¿Y tú qué haces llegando a esta hora? - Dice parando en seco con cierta frustración.

- Pues estaba en el set, grabando...

- ¿Grabando? ¿Y por que estás borracha?

- Sí, grabando. Después fui a comer con las amistades del set y bebimos pal' de cosas de la barra, nada malo.

- ¿Ajá?, y yo nací ayer.

- ¿¡Rainelis que te pasa!? Soy tu madre y me respetas. Yo hago lo que se me pegue a mí la gana. Estoy simplemente intentando tener una conversación entre madre e hija contigo.

- ¡Creo que lo quieres ya no es posible, ya que tus actitudes siempre son las mismas conmigo desde que tengo uso de razón!.

A este punto de la "conversación"/ "discusión", Rai se dio cuenta que rumbo era el que iba a tomar, cosa que ya era normal. Rai ya estaba acostumbrada a este tipo de situaciones ya que era frecuente. Cansada de todo decide no quedarse callada ante todo.

- ¡Ya!, tranquilízate Rai, no va a volver a pasar.

- No, mami ¡no!, no es la primera vez que pasan estas cosas. Siempre es una jodienda con lo mismo. ¡Dices que vas a cambiar y un carajo pasa!

- ¡Te me vas calmando!. Si tanto te molesta esto y si tampoco quieres acabar en misma situación te pido que no vayas por este mismo camino. No me importa cuánto quieras ser como yo, no vas a ir allá y punto, me importa cero.

- Créeme que si algún día tengo la oportunidad de ser la actriz que quiero, lo menos que voy a hacer es joderme la vida de la misma manera en la que tú lo haces.

Grinni la mira con disgusto, pero no dice nada ante lo comentado por su hija.

- De que te vale que todo el mundo te aclamé, te admiré y estar en todos lados, si lo más "importante" que soy yo y tu familia la dejes de un lado tratándola como mierda. - Dice Rai con lágrimas en sus ojos.

Rai culmina con esto y se va directo a su cuarto.
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Ya en su cuarto y con lágrimas bajando por sus mejillas, intenta tomar un respiro para tranquilizarse. Esto la alteró mucho y tener a alguien que la acompañara en este momento la iba servir de ayuda, pero este no era el caso.

Mientras comía de su Maruchan casi fría porque ya había pasado un buen rato de todo esto, repentinamente llega a su pensamiento Alondra, en como en el momento que hablaron siempre la escuchó y la apoyó en ese momento de desahogo.

Casi amaneciendo y ya más tranquila decide irse a dormir, había sido un día muy largo y de muchas emociones encontradas, un descanso le vendría bien.
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Durante su sueño sentía que con la persona que estaba le era muy familiar. Esta persona se sentía muy cálida, alguien con quien ya había tenido interacción. Pudo sentir como la abrazaba y la reconfortaba, pero no podía ver su rostro.

~ ¿Y si no puedo cumplir lo que quiero?

~ Tu tranquila, vas a cumplir todo lo que te propongas. Tienes un potencial increíble, nunca te quites.

Estás era las lagunas de su sueño. Al despertar se sintió apoyada y quería saber bien era esa persona.