spring days ↝ gojo satoru [ EDITANDO ]

OO

SPRING DAYS ; INTRODUCCIÓN.

Zhao suspira, relajando sus hombros una vez siente el pesado uniforme de hechicero desprenderse y caer de su cuerpo. El aire fresco que se cuela por la ventana abierta choca contra su piel desnuda, le da un poco de frío pero se siente aliviado de por fin estar en lo que él considera su hogar.

Hace rato que no volvía a Japón, luego de la muerte de Xìaling sentía como comenzaba a sofocarse en Xíng. El actual emperador de Xíng le tenía mucha, demasiada, estima, y Zhao no encontraba interés en seguir adelante con su estúpido mandato. Nada tenía sentido si Xìaling no estaba con él, nada de lo que hacía tenía sentido si no contribuía a la felicidad de su hermana, así que tomó la rápida decisión de dejar su vida como líder del clan y posible sucesor del emperador de Xíng atrás, — no sin antes dejar al resto de su clan en una buena posición de entre todos, además de dejarle su puesto a un hombre mucho más que capaz — y volver al lugar en el que fue genuinamente feliz por mucho tiempo era prioridad. Por eso volvió a Japón, y esta vez para quedarse.

—Sabes que sé que estás ahí, ¿no?—Zhao le habla al aire, sin darse la vuelta. Una leve presencia se esconde a sus espaldas.

Un par de manos frías se deslizan por sobre su abdomen y se juntan en el frente de su cuerpo, siente la barbilla del hombre sobre su hombro izquierdo. Su respiración le da escalofríos, no se había dado cuenta de lo mucho que extrañaba su toque hasta ahora.

—Mh, Zhao.—Satoru se queja en voz alta en su oído.—Te extrañé.

Kang piensa en como cambiaron las cosas en todo este tiempo, bueno, después de una década y tantos meses claro que cambiaron cosas, pero aún se siente como, quizá, un cambio brusco. Porque recuerda odiar a Satoru, recuerda como no podían convivir en el mismo espacio si Geto o Shōko no estaban para mediar. Satoru era un dolor de culo, y él lo detestaba.

Y ahora está desesperado por sentirlo más cerca, ni siquiera de forma sexual, solo lo necesita presente, necesita su toque. Incluso si nunca hablaron sobre como se sienten respecto al otro, incluso si esto tiene pinta de ser una forma de reemplazar lo que ambos alguna vez sintieron por Suguru Geto, como si quisieran rescatar ese sentimiento de hace años atrás, como si se estuvieran aferrando a lo último que les queda de Geto, incluso si se sienten inseguros respecto a como experimentan su situación; Zhao necesita de Satoru, y Satoru necesita de Zhao.

—Yo también.—Zhao suspira, tira su cabeza hacía atrás para recargarse en él.—Veo que estuviste ocupado, ¿no? Salvando niños.

—Algo así, supongo.—Gojo ríe con suavidad contra su piel, habla en un tono bajo que no es usual en él, debe saber que Zhao prefiere cuando las cosas son silenciosas.—Okkotsu Yuuta me parece un caso interesante.

—Y nadie puede llevarte la contra.—Kang pone sus manos sobre las de Gojo.—Solo yo.

—Solo tú.—Afirma el albino, dejándole un beso en la piel desnuda.—¿Nos duchamos?

—No quiero sexo, 'toru.—El azabache se deja derretir y sostener en sus brazos.

Ama saber que puede hablar con tanta facilidad y ligereza con Satoru, sentirse seguro estando junto a alguien es algo que no le pasa con mucha gente.

—Está bien, solo quiero ducharme.—Gojo ríe, algo más parecido a un bufido que a una risa.—Huelo a sudor, y tú tienes que relajarte, ¿qué te parece?

—Entonces sí.—Zhao accede, y Satoru lo arrastra hasta el baño.

Cuida de él. Sabe que el jet lag afecta a Zhao más que a otras personas, se encarga de sostenerlo en la ducha, de lavar su cabello con cuidado y de que no se quede dormido mientras lo hace — porque tiene la manía de dormirse si le hacen cariño en la cabeza, casi como un gato —. Gojo lo abraza en el medio, mientras el agua tibia cae sobre sus cuerpos, y Kang se deja mimar por él. No es alguien demasiado demostrativo en público, pero necesita contacto físico, al contrario de Satoru que si necesita contacto físico lo buscará sin importar el lugar, pero Gojo no se queja de eso porque lo respeta.