Transmigración rápida; protegiendo al pequeño y pobre villano

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Justo cuando estaba a punto de preguntar a Chu Yao si quería seguir adelante, Chu Yao ya lo había agarrado del brazo, señalando el artefacto en la cintura del Viejo Jin y dijo: "Encuentra una manera de deshacernos de él, yo quiero ese objeto."

Con ese objeto, su energía espiritual debería desaparecer menos rápido, y quizás podría cultivarse incluso en el Abismo Demoníaco.

Qin Chi no esperaba que Chu Yao fuera tan directo, incluso queriendo matar para conseguir el tesoro. Miró a Chu Yao y no pudo evitar bromear: "Si no fuera porque la energía espiritual de tu hermano aún emite un aroma, casi dudaría que tú también te has convertido en un demonio."

"Si me convirtiera en un demonio, estaría bien." Chu Yao tiró de Qin Chi para seguir al Viejo Jin, "Entonces seríamos una pareja celestial predestinada, una pareja de inmortales."

"Siempre dices cosas tan bonitas." Qin Chi no pudo evitar reír, sacudió la cabeza y levantó a Chu Yao, de lo contrario, no podrían alcanzar al Viejo Jin corriendo.

Qin Chi guió al Viejo Jin hacia un callejón sin salida en el Abismo Demoníaco, permitiendo que los demonios que lo perseguían atacaran al Viejo Jin una y otra vez.

El Viejo Jin, sorprendido por encontrarse en un callejón sin salida después de tanto esfuerzo para seguir el rastro de Qin Chi, se dio cuenta de que su energía espiritual, aunque no era devorada, era limitada. No le quedó más remedio que abandonar temporalmente la persecución de Qin Chi, de lo contrario, podría perder la vida sin conseguir nada.

Mientras preparaba su espada para escapar con la última de su energía, varios demonios de repente lo inmovilizaron. En el momento en que intentó alejar a esos demonios, una espada apareció de repente y atravesó su pecho a gran velocidad.

El Viejo Jin no podía creer que entre los demonios hubiera alguien capaz de usar una espada. Se cubrió el pecho apresuradamente, tosió y sangre salió de su boca.

El aura demoníaca a su alrededor parecía concentrarse en un punto. Sintió que el demonio que se aproximaba tenía una fuerza inmensa y pensó que la situación era mala. Sacó varias talismanes y los lanzó hacia la dirección de la energía demoníaca.

Su energía espiritual era casi inexistente, pero su nivel de cultivación aún estaba presente. Los talismanes, cargados con energía espiritual afilada, pronto rompieron la energía demoníaca, revelando la verdadera identidad del demonio.

Para su sorpresa, no era una sola persona, sino dos. Un hombre alto abrazaba a otro hombre. Ambos estaban vestidos con ropas blancas que le resultaban algo familiares.

El Viejo Jin reconoció rápidamente las ropas como las del Clan Espada Inmortal, y el hombre abrazado era Chu Yao, el discípulo más querido de Tian Xingao y actualmente un traidor.

¡No esperaba que Chu Yao aún estuviera vivo!

El hombre de ojos rojos no lo reconoció de inmediato, aunque sentía que le era algo familiar.

"No esperaba que vinieran al Abismo Demoníaco solo para perseguirme." Los ojos rojos de Qin Chi estaban llenos de ardiente energía demoníaca, pero en un momento, su aura cambió por completo.

El Viejo Jin, que siempre había estado en una posición superior, ahora tenía un agujero en el pecho y estaba usando su energía para proteger su corazón.

"¿Eres... Qin Chi?!" El Viejo Jin abrió los ojos de par en par, "¡Cómo es posible, cómo puede haber cambiado tanto tu apariencia!"

Qin Chi se encogió de hombros y dejó a Chu Yao, mientras la energía demoníaca en sus manos se transformaba en innumerables cuchillas, atacando al Viejo Jin desde todos los ángulos. "¿Cómo es imposible? Incluso el Camino Justo del mundo siempre está pensando en usar a los vivos como material para forjar armas, ¿qué es lo que en este mundo es imposible?"