El contrato

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Donovan estaba nervioso, su tiempo se había acabado.

Al marcar el reloj la media noche, el diablo vendría a cobrar su paga, toda una vida de riqueza a cambio de un sacrificio, el asunto es que se había acostumbrado a ser feliz y a tenerlo todo que ya no quería pagar el precio.

Hace años, cuando era un don nadie, dijo en frente de una iglesia que estaría dispuesto a dar lo que fuera por un poco de riqueza, pensando que dios lo estaría escuchando.

Pues alguien lo escucho, pero no fue dios.

Un hombre alto y muy apuesto, de traje gris muy costoso y cabello negro azabache llegó y le dijo

*En eso puedo ayudarte, represento a una persona muy poderosa, y me ha autorizado a hacer un trato contigo, te daré lo que quieras durante 10 años, pero al final habrá un precio. Y es uno que no podrás eludir*

Donovan acepto, sabiendo que muy probablemente le pediría su alma y el estaba dispuesto a pagarla, ya que no había pensado vivir mucho y pues, bueno, 10 años de riqueza lo valían.

Firmo el contrato sin mirar (solo era una hoja con tres reglas que no se molestó en leer) y a partir del primer segundo comenzó su racha de buena fortuna.

Consiguio trabajo, comenzó a ascender muy rápido en ese mismo año y para finales ya era un alto ejecutivo. Conoció a una hermosa mujer con la que se casó y al año siguiente esperaba su primer hijo.

Su vida de riqueza y felicidad continuo otros 9 años más, dónde viajo mucho tuvo otros dos hijos más y al final era dueño de su propia empresa que generaba millones al año. No había nada mas que quisiera y decidió ser filántropo, olvidando su pequeño negocio de hace años.

Pero el tiempo de pagar se acercaba y en vísperas del fin del plazo, se le ocurrio revisar el contrato y fue ahí cuando se dió cuenta el terrible error que cometió.

El contrato contenía tres reglas:

1: Durante 10 años el contratante tendría excelente fortuna y prosperidad además de proteccion a la mala fortuna.

2: El contratado exigía un alma de sacrificio elegida por el contratante, ya que este contrato lo exentaba de ser la suya la que debe tomar. Pero si no pagaba el precio, El contratado podía tomar todas las almas que el quisiera de entre los conocidos del contratante.

3: Una vez que finalicé el contrato, El contratado perdía acceso a los beneficios que se le otorgaron.

Por lo que ahora tenía que elegir un alma y sabía que este "diablo" (que fue como empezó a identificarlo) no pediría nada menos que una que el quisiera más, su esposa o sus hijos.

Ahogado hasta las chanclas en alcohol sentado en una mesa de un bar, Donovan estaba a punto de llorar por qué el plazo se vencía en menos de una hora.

Pero las casualidades del destino hicieron que otro hombre lo viera y se acercara a él:

*Lo veo afligido caballero, le invito una copa y me cuenta sus problemas, que le parece?*

Donovan sabía que no perdía nada, la gente no le creería y no había forma que pudiera hacer algo, así que le contó. Le contó todo desde su trato hasta lo que descubrió y finalmente que no sabe que hacer.

El hombre, en lugar de reírse le dijo:

*Puedo ver ese contrato?*

Donovan le enseño el papel maldito y el señor lo leyó varias veces, hasta que finalmente se tomó todo el contenido de su vaso y dijo:

*Tienes suerte, si es posible salir de esto, al menos de una cláusula, pero te costará caro*

*Lo que quieras, te pagaré lo que quieras*

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⏰ Última actualización: Aug 15 ⏰

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