26: "La Llamada"

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Culiacán , Sinaloa

De regreso en mi departamento, no lo podía creer no podía creer que esto estuvieran tan cercas , en cuanto llegue a mi departamento me puse pijama tome mis pastillas y vitaminas y me metí a la cama aún que obviamente no pude dormir ni un solo segundos , me quede acostada bien como amanecía en Culiacán y ahora si era el gran día.

Sabia que sería un día muy pesado y aún que no tenía nada de apetito fue por mi bebé que decidí prepararme un desayuno nutritivo y súper rico mientras miraba la TV.

Tome un baño , organiza el departamento y fui a mi habitación por el celular.

Me quedé mirando el teléfono en mis manos por unos minutos , las últimas semanas habían sido un torbellino de emociones, decisiones difíciles y amenazas constantes. Y ahora, con una simple llamada, podría terminarlo todo. Pero también sabía que, una vez que Iván cayera, mi vida nunca volvería a ser la misma.

Tomé aire suspirando fondo y marqué su número.

—Hola mi amor — contestó Iván al segundo timbre.

Mi corazón se aceleró el no tenía ni idea de lo que estaba por venir.

—Iván, necesito verte —dije, mi tono suave, intentando no sonar forzada—. Hay algo importante de lo que tenemos que hablar sobre el bb puedes venir al departamento?

Hubo una pausa al otro lado de la línea, pero luego escuché su respuesta:

—Si mija dame una hora y estoy ahí

Colgué el teléfono mientras mi manos temblaban , le deje un mensaje a William avisándole que en Una hora Ivan estaría aquí en sesenta minutos, la vida que había conocido hasta ahora cambiaría para siempre.

Unos minutos después....

El asonido del motor del coche de Iván al detenerse frente a mi edificio hizo que mi corazón latiera con fuerza, mire por la ventana y lo vi salir del coche caminando con la confianza que siempre lo caracterizaba.

Todo estaba listo afuera los agentes de la DEA sabían cuando entrar William se había asegurado que la operación se llevaría a cabo de manera rápida y limpia, pero algo dentro de mí no dejaba de tener esasensación de peligro.

Escuché el sonido de Ivan golpeando la puerta.

—Ahinara, soy yo.

Abrí, tratando de mantener la calma Iván me dio una sonrisa al entrar, pero no fue una sonrisa que me tranquilizara al contrario.

—Qué paso mi chula — dijo entrando al depa y sentándose en el sillón como si todo fuera normal.

Me quedé de pie mirandolo a los ojos , sabia que cualquier movimiento en falso podría ser el fin no solo de este plan, sino de todo el bebé, mi libertad, mi vida todo dependía de que lo hiciera bien.

—Iván quería hablar contigo sobre el bebé... y sobre nosotros —dije eligiendo mis palabras cuidadosamente sabia que los agentes estarían escuchando esperando el momento exacto para entrar.

El se inclinó hacia adelante y me miraba también a los ojos.

—He estado pensando en lo que dijiste, que estaríamos juntos, que me protegería pero no creo que no puedas hacer ya— dije sin pensarlo

Su mirada cambió , pero no dijo nada sabia que algo en él había cambiado en este momento sabia que Iván no era un tonto y había notado algo en mis palabras

Y justo cuando Ivan iba a hablar lo interrumpío el sonido de varios pasos rápidos en la escalera del edificio , el
momento había llegado me aleje de él y en ese momento tumbaron la puerta.

—Ahinara, qué chingados hiciste — dijo gritando Iván y se puso de pie intentando sacar su arma.

La habitación se llenó de caos los agentes de la DEA entraron, gritando órdenes Ivan intentó correr, pero no tuvo tiempo. William lo planeó Perfecto y en cuestión de segundos, Iván estaba en el suelo, esposado, mientras me miraba con una cara de enojo.

—Me traicionaste! —dijo gritando y con su mirada fija en la mía.

Las lágrimas caían por mi cara, pero no podía permitir que el miedo me paralizara, apenas unos segundos después de que los agentes inmovilizaran a Iván, el sonido de los disparos se escuchaba en el edificio, no corazón saltó en mi pecho era la gente de Iván, sabía que no lo dejarían caer sin pelear.

—Ahinara , escóndete — dijo gritando William pero yo no escuchaba estaba shock — AHINARAAAA escóndete muy bien por favor! — grito una vez más con su mirada urgente en mi — no salgas hasta que venga por ti!

Mi cuerpo temblaba incontrolablemente, pero asentí, aún llorando, los agentes de la DEA intentaban responder al ataque, mientras sacaban a Iván del departamento a toda prisa los disparos continuaban, cada uno más cercano, más aterrador sabia que las balas no discriminan entre culpables o inocentes.

Me moví rapido buscando un lugar donde esconderme, encontré un pequeño cajón en la cocina me deslicé dentro, cerrando la puerta con cuidado, intentando controlar mi respiración que era entrecortada.

El pánico cada vez era peor y la adrenalina me hacía sentir que cada segundo era eterno y sentía que en cualquier momento la puerta se abriría y lo último que vería sería a uno de los hombres de Iván.

Podía escuchar los gritos de los agentes, el sonido metálico de las armas y el impacto de las balas rebotando contra las paredes, los disparos eran ensordecedores sabia la gente de Iván no se detendría hasta rescatarlo, y el riesgo de que alguien encontrara mi escondite aumentaba con cada minuto que pasaba.

Cerré los ojos con fuerza, tratando de bloquear el ruido, el miedo todo pero era inútil, mis pensamientos iban a mil por hora pensaba en que si me encontraban, si me atrapaban no solo era mi vida la que estaba en juego también mi bebé estaba en peligro.

De repente, un ruido súper fuerte que los anteriores sacudió el edificio, como si hubiera pasado una explosión afuera, el ruido de los cristales estallando en todas direcciones, la situación estaba fuera de control.

Sentí un frío helado en la boca del estómago cuando el sonido de las pisadas corriendo y el eco de las botas resonaba en el pasillo, cada paso más fuerte, más cercano a mi escondite.

De repente, las pisadas se detuvieron justo frente al armario, el silencio fue tan claro que casi podía escuchar los latidos de mi corazón, golpeando dentro de mi pecho, me aguante la respiración, rezando para que no abrieran la puerta y después escuché las pisadas alejarse y solté un suspiro silencioso de alivio pero seguí escondida aterrorizada de moverme, la balacera continuaba, y cada sonido me hacía saltar de nuevo.

Un rato después....

Los disparos comenzaron a disminuir y el caos se escuchaba como un murmullo lejano lo que significaba que Ivan ya no estaba aquí aún así me quedé inmóvil, tratando de escuchar cualquier señal de que todo había terminado pero aún así no me atreví a salir.

—Ahinara soy William , sal —

Abrí la puerta del armario lentamente, asomando la cabeza con cuidado y Allí estaba William, con la camisa ensangrentada y una herida visible en el brazo, pero vivo su cara estaba cubierto de polvo y sudor, pero me ofreció una sonrisa tensa.

—Está bien —dijo extendiendo sus brazos hacia mí—. Estás a salvo.

Me levanté, y nos dimos un abrazo.

Mi cuerpo aún temblaba, pero la presencia de William me daba sensación de seguridadz

—Y Iván? — dije con voz entrecortada,

William me miró con seriedad y después en su cara se pintó una sonrisa.

—Lo llevan los agentes pero su gente no se dará por vencida ahora tú eres su próximo objetivo— dijo agitado — ahinara tengo que sacarte de aquí y rápido.

𝐂𝐫𝐨𝐧𝐢𝐜𝐚𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐯𝐞𝐧𝐠𝐚𝐧𝐳𝐚. (𝐈𝐀𝐆 & 𝐎𝐆𝐋)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora