18- Velada de pasiones

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Erick:

La tarde caía lentamente sobre la ciudad, y yo, me encontraba en mi departamento, un lugar que había sido mi refugio durante el último año

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La tarde caía lentamente sobre la ciudad, y yo, me encontraba en mi departamento, un lugar que había sido mi refugio durante el último año. Este espacio, lleno de recuerdos y obras de arte que mi madre había pintado, era un santuario al que nunca había llevado a nadie. Hasta hoy. Zoe sería la primera en cruzar el umbral de este lugar tan íntimo.

Había pasado horas asegurándome de que todo en mí apartamento estuviera perfecto, desde la limpieza hasta la disposición de las flores frescas que había comprado esta mañana en el mercado.

Es la primera vez que hacía algo como esto pero por Zoe soy capaz de todo, este tipo de cosas me parecían ridículas y solo bastó una sonrisa dulce de los labios de cerebrito para hacerme cambiar de opinión con tal de verla feliz y sus ojos brillando hago cualquier pendejada.

Me senté en el borde de la cama, con el teléfono en la mano, mientras miraba la dirección que había escrito para Zoe.

"Espero que le guste", pensé mientras enviaba el mensaje.

Yo:"Te espero a las 7, en  432 Park Avenue, New York, NY 10022, USA.

Cerebrito: Está bien, ya casi salgo para allá.

Mientras revisaba los últimos detalles de la cena, sentí una mezcla de nervios y emoción. La cocina era pequeña pero acogedora, decorada con las pinturas de mi madre, cada una contando una historia que resonaba en mi corazón. La luz suave de la tarde se filtraba a través de la ventana, iluminando los colores vibrantes de las obras. Me detuve un momento frente a una pintura que representaba un atardecer en la playa, un recuerdo de veranos pasados. La nostalgia me invadió, pero sabía que esta noche sería diferente.

Al llegar a la cocina el aroma del ajo y la albahaca llenaba el aire, un contraste delicioso con el bullicio de la ciudad que resonaba fuera de las ventanas. Nunca me había considerado un gran cocinero, pero esta noche quería sorprenderla. Había elegido una receta sencilla, pero llena de sabor: pasta al pesto con tomates cherry asados. Su favorita.

Cuando el timbre sonó, mí corazón dió un salto. Corrí a abrir la puerta, y allí estaba Zoe, con su cabello suelto y una sonrisa que iluminaba el pasillo. Su expresión de sorpresa al ver la mesa cuidadosamente puesta y el aroma de la comida me hizo sentir como si hubiera ganado un pequeño premio.

Bienvenida a mi humilde morada -respondí, sonriendo mientras la invitaba a pasar. -Espero que tengas hambre.

-No sabía que tenías otro lugar __dijo, mirando a su alrededor con curiosidad__. Siempre pensé que vivías con tus hermanos y tú padre.

-Sí, lo hago. Pero necesitaba un espacio propio, un refugio donde pudiera ser yo mismo. Solo vengo de vez en cuando__respondí, gesticulando hacia las paredes adornadas con arte.

Zoe se detuvo frente a una pintura que representaba un paisaje sereno, y su expresión se iluminó.

-Es hermoso. ¿Tu madre lo pintó? -preguntó, admirando los detalles.

𝒟𝑒𝓈𝒹𝑒 𝓂𝒾 𝒱𝑒𝓃𝓉𝒶𝓃𝒶 (➕1️⃣8️⃣)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora