Guardia Volturi
El orbe azul comenzó a girar lentamente, su resplandor aumentó hasta llenar la sala oscura con una luz cegadora.
Cuando la luz se disipó, la Guardia Volturi se encontró en medio de un laberinto de mármol blanco, con paredes altas y pulidas que reflejaban cada movimiento de los vampiros en su superficie.
Sin previo aviso, el suelo bajo sus pies se separó, aislando a cada uno en diferentes secciones del laberinto.
Demetri notó algo raro en el aire y enseguida activó su don.
Logró localizar a sus compañeros rápidamente, mientras avanzaba por los pasillos del laberinto, pero de repente se detuvo. Había algo, una presencia desconocida que sus sentidos no podían identificar.
-Esto no me gusta nada... -dijo en voz baja, mientras escaneaba el área.
Jane, avanzaba con cautela por su rincón del laberinto. Sus pasos eran silenciosos, pero sentía un leve movimiento a su alrededor. Al girar una esquina, se encontró cara a cara con una criatura formada de pura sombra.
-¿Qué rayos es esto...? -dijo Jane, con una mezcla de sorpresa y enfado.
La vampiro, desató su don, forzando a la criatura a caer de rodillas. Sin embargo, a pesar del dolor que le estaba infligiendo, la sombra resistía con una tenacidad inesperada. Jane, totalmente frustrada, intensificó su enfoque, decidida a acabar con su adversario de una vez por todas.
Alec avanzaba con una serenidad calculada, dejando que su don se extendiera por los pasillos como una marea lenta, explorando y neutralizando amenazas antes de que pudieran acercarse.
De repente, su niebla comenzó a dispersarse, como si un viento invisible la estuviera desvaneciendo.
-¿Qué está pasando...? -murmuró Alec, frunciendo el ceño mientras observaba su niebla desvanecerse.
Frente a él, una figura espectral apareció, flotando sobre el suelo del laberinto.
Era una entidad que parecía burlarse de su habilidad, sus ojos vacíos lo miraban fijamente, desafiándolo.
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The Threads Of Destiny | Marcus Volturi
FanfictionUn hilo rojo invisible, conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, a pesar del tiempo, del lugar o de las circunstancias. El hilo rojo puede tensarse o incluso enredarse, pero nunca llegará a romperse. _ Marcus Volturi