𝗡𝗼 𝘀𝗼𝗻 𝘀𝘂𝗲𝗻̃𝗼𝘀 [Billford AU] +18

𝘔𝘪 𝘧𝘢𝘮𝘪𝘭𝘪𝘢

━━━━━━ ◦ ▲ ◦ ━━━━━━

¿Y si miraras alrededor y te dieras cuenta de que sólo te rodea oscuridad?

Hay un silencio que parece la calma antes de la tormenta.

Cada día te pierdes más en tu propia mente, piensas que pasaste por cosas que jamás sucedieron y al contrario, olvidas cosas que han sucedido.

Intentaste ocultar cada problema bajo la alfombra, hasta que esta se perdió sobre la montaña de circunstancias.

Todos esos pensamientos se escuchan en el eco de tu mente mientras esta se desmorona.

De repente sientes que te caes a un oscuro vacío al que no miras fondo, solo cierras los ojos esperando al inevitable final.

3
...

2
...

1
...

-

Ouh... - sus pestañas titubearon con debilidad mientras lograba distinguir con ojos entre cerrados que, efectivamente, estaba en el suelo.

- Seis dedos ¿Otra vez? - una conocida voz le llamó luego de abrir la puerta de la habitación que compartía con ese joven de un aspecto idéntico al suyo. - Ven aquí -

Poco esfuerzo hizo para ayudar a su hermano a levantar su propio peso para dejarlo en la cama, y es que tampoco se sentía con mucha fuerza para eso - Gracias, Stanley - murmuró con la voz ronca, su nuca dolía como el demonio, y su brazo no  y cara no estaban mejor debido a la caída, pero al tener la mirada fija de su gemelo optó por no preocuparlo de más como siempre y dedicó una pequeña sonrisa - ¿Que hora es? -

- Tranquilo, es temprano todavía, solo le estoy ayudando a papá a subir tus cosas viejas al ático, sin ofender, pero ¿Te crees una rata? Guardas más chatarra que piezas funcionales - recriminó más confuso que molesto, para él las únicas piezas que valían la pena tener de repuesto eran las de su bello y preciado auto junto a las del refrigerador que resguardaban los deliciosos cubos de pollo para el día siguiente.

- Por todos los cielos, le dije a papá que lo haría yo - se acarició la sien con los dedos - lamento que tuvieras que hacer eso, te lo compensaré -

- No te preocupes, para ellos lo único que funciona de mí no es mi cerebrote - se sentó al lado del menor y juguetonamente empujó su frente con sus dedos señalando su "brillante cerebro" según todos - son estos músculos tan dotados - El apodado también simplemente como "Ford" rió ante esas palabras y la mímica de modelo que imitó su hermano, pero entendía que esas palabras también tenían otros sentimientos guardados.

- Si, pero sabes que no eres simplemente una herramienta ¿cierto? - el menor palmeó su espalda como apoyo, a lo que él otro no se mostró indiferente y le compartió una sonrisa determinada - Y tú tampoco lo eres, seis dedos - ambos conocían la profundidad de esas palabras, sintiendo que solamente tenían una función, como máquinas, no humanos. Claro que entre ellos esto no era así, era por eso que fue Stanley el primero en darse cuenta del estado mental del ajeno, cada día más fuera de si, mareándose con recurrencia, escondiéndose en el baño para llorar después de un largo día como practicante de laboratorio; era obvio que algo andaba mal con él, y sus padres sólo se limitaron a decirle "tómalo con calma, hijo" a su niño brillante para evitar que dejara el trabajo que evidentemente era uno de los factores para sus malestares.