En un mundo con aire postapocalíptico, Louis y Harry deberán unir fuerzas para acabar con un enemigo en común, un tirano alfa que se adueñó de todo con el afán de tener el máximo poder e iniciar un nuevo régimen, hizo de sus vidas una miseria transf...
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Dimitri está atento a Zayn, han pasado algunas horas y el alfa no despierta. Aysel entra con agua y un paño. —Dale algo de beber.
—El alfa remoja la tela y la pone en sus labios para humedecer. Poco a poco observa como el alfa abre los labios en búsqueda de más. Parpadea lento, hasta abrir los ojos completamente.
Dimitri se emociona —Zayn… por la vida, amigo.
El alfa se queja por lo bajo —Mitri… —se incorpora bruscamente—. ¿Dónde estoy?
Dimitri lo hace recostarse de nuevo —Tranquilo, ¿sí? Relájate, estás a salvo, lamento todo lo que sucedió. Discúlpame por no poder volver. —Le toma la mano y la sujeta con fuerza.
Zayn observa el lugar, cierra los ojos y se acomoda, Dimitri le habla bajo—No te muevas, estás muy lastimado. ¿Qué hicieron para que los castigaran de esa forma? Espera… ¿tienes hambre? —pregunta y lo ve asentir. Aysel se apresura a buscar algo donde Nala.
—¿Y catorce? Dime que lo trajiste por favor.
—Claro que lo hicimos, está en la otra habitación. Ambos están muy lastimados, pero él tenía un hombro dislocado y una fuerte herida en el brazo.
—Aron lo hizo como castigo. Le pasó una navaja desde el hombro hasta casi llegar a la muñeca.
—Ese maldito…
—Llévame con él, no es bueno que tenga compañía si no conoce a nadie. Está dragado y con efectos de celo.
Dimitri se preocupa —¿Cómo que drogado y en celo? —asustado, ayuda a Zayn a ponerse de pie.
Ambos van a la habitación, sin avisar, dan un paso adentro y ambos no pueden creer lo que ven.
El alfa tiene sostenido a Harry de la mano, ambos se miran fijamente.
Dimitri carraspea el omega voltea intentando zafarse del agarre, pero el alfa no se lo permite.
Zayn se ve sorprendido, Louis luce apacible y dócil, cuando se encontraba en ese tipo de estado reaccionaba bien al lograr percibir aromas ya conocidos justo como el suyo y el de George —Oye, ¿todo está bien? —pregunta en dirección del hombre frente a su amigo.