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Narra América
Habían pasado algunas horas ya de que mi padre nos había comentando a cerca de la cena y de todo lo que involucraría esta noche, como ya había dicho estaba bastante agotada y triste como para tener ánimos de salir, aún seguía con la cólera al mil por el incidente de la tarde, pero daba igual, esperaba jamás volverme a cruzar con ese imbécil
- ¿ Ya estás lista hija? - Dijo mi madre mientras entraba a la habitación, wow se veía espectacular con ese vestido en tono Beige y unos tacones del mismo tono, la verdad es que mi papá era un afortunado con la mujer que tiene
- Si mamá, solo me pondré algo de loción- dije que mi madre mientras me encaminaba a mi tocador, la verdad era que no me arregle demasiado, no estaba en un muy buen momento como para tener ganas de causar buenas primeras impresiones con los amigos de mis padres, solo me puse un Top rojo acompañado de una falda blanca con botones en dorado y mis tenis Blancos.
Después de ponerme el perfume tome mi bolso, solo eche mi labial, un rimel, un desinfectante, mis audífonos y mi cartera para después salir ir con mi madre
- Listo mamá, ya podemos irnos - le dije mientras me miraba maravillada por el atuendo que llevaba, no era algo tan extravagante pero a ella le había gustado
- Wow, te ves hermosa, estoy segura de que cualquier hombre caería rendido ante esta hermosura- Dijo mi madre mientras me tomaba de las mejillas para seguir diciendo un par de cumplidos más antes de escuchar la voz de mi padre tras la puerta
- Ya tenemos que irnos, carajo como se tardan - dijo haciendo un drama por la hora como ya era costumbre, mi madre y yo solo rodamos los ojos y reímos
- Ya vamos cariño, bajamos en un minuto - Respondió mi madre a papá desde la habitación
- Andando ya tenemos que bajar, si no tú padre es capaz de subir con un arma para hacernos bajar- dijo mi madre para tomar su bolso que había puesto encimq del buró de mi cuarto. Yo hice lo mismo y ambas bajamos las escaleras para encontrarnos con mi papá bastante impaciente
- Ya era hora con un demonio, ya vamos tarde - decía mi padre mientras tomaba la mano de mi madre para disponernos a salir de la casa no sin antes asegurarla
Subimos al auto con rumbo a la casa de los amigos de mi padre, llegamos en cuestión de minutos, la casa parecía ser muy bonita, lo era por fuera, seguramente lo sería por dentro, nos bajamos del auto y tocamos la puerta, una mujer de cabellos rubios y muy elegante fue quien nos recibió
- Vaya, que agradable sorpresa, pensé que jamás los volveríamos a ver desde que nos venimos de Los Mochis - Dijo la mujer a mi madre quien aún seguía colgada de la mano de esa mujer, al parecer se conocían desde hace años
- Yo también pensé que jamás nos veríamos otra vez, pero me alegra que nos hayamos vuelto a encontrar- dijo mi madre a la mujer con una sonrisa en su rostro
Pasamos a la casa y nos sentamos, llego un hombre de algunos 40 ó 45 años que saludo a mi padre, tal vez era una situación similar con mamá
- Y bien ¿ Cómo ha ido tú vida? Desde que nos vinimos de Sinaloa ya no tuvimos comunicación con ustedes, hasta ahora que supe que vendrías a Phoenix - Decía el hombre bastante animado a mi padre quien seguía con esa sonrisa en su rostro
No me era muy grato estar entre personas que no conozco pero bueno tenía que acceder a ello, mis padres querían que conociera a sus amigos
- Pues bastante bien, sabes que los negocios incrementaron pero tuve unos problemas y por eso nos tuvimos que venir- dijo mi padre a el hombre que se había sentado en el sofá superior para seguir con la charla, mi madre y la señora, paola creo se llama se habían sentado en el otro extremo y se mantenían entretenidas, yo solo me quede a un costado de una chica que no había mencionado palabra alguna
- Hola, soy Luna Parra, es un placer - me dijo con una sonrisa en su rostro parecía bastante encantadora
- Soy América- dije a la chica mientras le brindaba una sonrisa, era muy linda
- Hija él es Ramón, mi socio el que te comente que nos ayudaría aquí- dijo mi padre para hacerme girar la cabeza
- Es un placer señor - dije que el hombre mientras extendía mi mano para saludar
- Oh, deja de lado los formalismos muchacha, dime Ramón- me dijo el hombre mientras sonreía en mi dirección
Solo asentí con la cabeza y permanecí en silencio, minutos después se escucho a alguien platicar y después la puerta abrirse, por ella entró un chico idéntico al imbécil con el que había tenido el incidente ¿ Será el? Me limite a quedarme en mi lugar hasta que los vi entrar a la sala
- Buenas noches, lamento la tardanza pero tuve un contratiempo, Soy Carlos y ella es mi novia Lilian Griego - decía el chico amablemente a mis padres
- Buenas noches, es un gusto - dijo la chica, parecía bastante agradable
Bueno, no creo que pueda ser él ya me habría reconocido y tal vez habría reaccionado como un cavernicola ante mi sola presencia en su hogar
- Faltan 2 de mis hijos aún, son chicos muy ocupados no deben tardar en llegar , mientras tanto podemos pasar a mi despacho y conversar en lo que las damas conversan sobre chicas y esas mierdas - dijo Ramón captando la atención de mi padre, el asintió con la cabeza y segundos después ambos se perdieron por el pasillo entrando en una puerta enorme de color café
- Estoy de acuerdo - dijo mi padre para después acompañarlo hacia el sitio que se le indicó
Yo permanecí en mi lugar mientras contestaba un intenso interrogatorio por parte de la señora Paola
- Y bien hija ¿ A que te dedicas? - dijo la mujer de cabellos rubios, era bastante simpática
- Me dedico a estudiar contaduría ya estoy por terminar, pienso buscar universidad aquí para concluir con mi carrera señora - dije amablemente a la mujer quién después de escuchar la palabra final puso una mueca de espanto? No pude decifrarla bien
- Oh porfavor no me digas señora, dime Paola me sentiría más cómoda- me dijo mientras me devolvía una sonrisa
- Esta bien Paola - dije sonriendo hacia ella
- Es un placer conocerte, eres muy linda espero que nos llevemos bien- me dijo la chica que había llegado con Carlos era bastante agradable a decir verdad
- Gracias, yo también lo espero, eres la primera chica además de Luna que conozco - dije a Lilian mientras le brindaba una sonrisa, ella parecía tener una cara de asombro total
- No eres de aquí?- Me cuestiono la chica aún bastante sorprendida
No entendía un carajo porque les sorprendía tanto, pero daba igual
- No, vengo de Obregon Sonora, llegué ayer a Phoenix, pero los señores son muy amigos de mis padres así que aquí estoy- Dije a lilian en una mueca divertida
Minutos después escuche una vez más la puerta principal ser abierta y por ella entró un chico de algunos 28 años, solo saludo y se encaminó a la cocina, segundos después salió justo en el momento en que Ramón y mi padre salían del despacho
- Oh que alegría que llegaste, te presento a mi hijo mayor Christian - dijo Ramón a mi padre quien le sonreía mientras le extendía la mano
- Es un placer muchacho, espero llevarnos de maravilla - dijo mi padre al tiempo que él la apretaba
- El placer es mío señor- Dijo Christian sonriendo en su dirección
El señor Ramón le pido a Carlos que salieran un momento a la cocina, ellos se fueron mientras nosotros nos quedamos charlando
- ¿ Qué sucede papá? - Cuestiono Carlos a Ramón por la actitud tan extraña que tenia
- ¿ En dónde mierda se metió César? - Cuestiono Carlos a Ramón, si esperaba que tuviera una respuesta que le ayudara a dejar su cólera de lado, pero no iba a servir de nada
- No lo se apa, no lo he visto, ya intenté llamarlo pero no atiende - dije a mi padre quien ya se encontraba con una mueca de enojo en su rostro
- Necesito localizarlo, él tiene que estar presente para la propuesta que le haré a Gustavo - dijo Ramón al chico quien solo le miraba fijamente
- ¿Propuesta? ¿ De que hablas?- Cuestiono Carlos, pues nadie de nosotros tenía idea para que Demonios era este teatro
- Si, la hija de Gustavo nos puede ayudar para unirse a César y así le salvamos el pellejo a su familia, ellos tuvieron problemas con gente muy poderosa, prácticamente están huyendo de su destino, yo soy su "salvación" así que tendrán que acceder a lo que le pida
- Wow, pobre de mi netto se echará la soga la cuello por andar de Cabrón- Dijo Carlos a Ramón quien se encontraba pensando en algún plan que llevaría a cabo en algún momento
- Es todo lo que tenía que decirte hay que volver a la sala - Dijo Ramón a Carlos para ambos salir de ese enorme lugar y dirigirse hacia donde nos encontrábamos todos, Carlos se sentó a un lado de Lilian y Ramón solo se quedó parado el el humbral de despacho como si de eso dependiera su vida, segundos después escuchamos un auto estacionarse, no le tome mucha importancia y seguí escuchando la conversación. Algunos segundos después entro un chico vestido bastante formal, unos jeans negros, camisa gris y unos zapatos, estaba de espaldas no le había visto aún el rostro y no me interesaba mucho, ya que era la misma cara de Carlos así que contaba por los 2, me mantuve en mi posición la cabeza baja viendo mi celular
Solo pude ver a este chico acercarse a Ramón quien le mascullo algo y el no se inmutó para nada
- Buenas noches, lamento el retraso pero tuve unos asuntos que resolver - dijo el chico a mi familia quienes se encontraban bastante maravillados con ellos, esperen,  Esa voz yo la conozco, pero no recuerdo donde la escuché, aún no  podía ver su cara
Minutos después se encamino para saludar a mamá y después a mi padre quien al terminar su saludo me presentó.
Pero al levantar la cabeza, Joder no podía ser verdad
- Es un gust... ¿ Tú? - Dije bastante asombrada por volverme a encontrar con él
No podia ser verdad, el universo me odia
- ¿ Qué mierda haces aquí?- mascullo en mi dirección con algo de enojo
Por las expresiones de los adultos podía deducir que todos se estaban preguntando ¿ De dónde mierda se conocen? Y si fue exactamente la misma pregunta que recibimos de mi padre
- Ya se conocen? - dijeron todos al unísono
- Por desgracia si - Dijo César mientras se cruzaba de brazos y caminaba hasta quedar a un costado de Ramón
- ¿ De dónde? - Cuestionaron todos, se encontraba impacientes a la espera de la respuesta
- Vaya ¿ Qué pequeño es el mundo no? Me volví a encontrar contigo - dije a el chico quien solo me miraba, debo confesar que su mirada me intimidada demasiado, pero a la vez me intrigaba
- Mierda, ¿ Cómo es eso posible? - Dijo Ramón para interrumpir nuestra absurda pelea
- Lo conocí hoy en el Moll, este idiota me dijo mucha porquería por el echo de que me distraje y el choco conmigo y cayó al suelo, por supuesto le pedí disculpas pero él solo me agredia - Respondi a los adultos ahí presentes
Al parecer mi versión de los echos lo ofendió que me dijo
- Eso no es verdad, no fue un accidente querías engatusarme - Dijo César furioso por como había contado las cosas
Vaya que este tipo era experto en acabar   con la paciencia de las personas
- Bueno, ya fue mucha discusión, por si no te has dado cuenta que me imagino por el momento ni siquiera te tomaste el atrevimiento de saber su nombre no es así? - Le Cuestiono mi padre al chico quien se encontraba cruzado de brazos recargado en la pared
- No realmente no señor, fue más mi coraje que simplemente desaparecí en cuanto me levante- Respondí a el amigo de padre
- Bueno su nombre es América, y es mi única hija, espero que con el tiempo aprendan a llevarse bien así como lo hacemos nosotros- me dijo el padre de la chica
Ya me quería ir de aquí, no aguantaba un minuto más estar en este circo, solo quería irme a descansar, pero al parecer no se podría
- No prometo nada, pero lo intentaré- dije a el hombre quien me sonrio de inmediato, Christian y Carlos solo me miraban
Algunos minutos después pasamos a la mesa y Paola y comenzo a servir la cena era pozole rojo y no es por nada pero se veía bastante bueno 
- Wow, cuanto añoraba volver a probar tu sazón- dijo Gustavo a mi madre quien solo le sonrio y los demás prosiguieron degustando de su plato
- Oh, me halagas me alegra tanto que les haya gustado la comida- Le respondió mi madre
Después de eso la mesa se sumió en un silencio bastante incomodo, quien después de unos minutos Gustavo rompió
- Y ¿ A que de dedican? - dijo mientras nos miraba a los 3 al mismo tiempo
- Bueno, tenemos un grupo musical llamado "Los Parras" - Le respondió Christian
Por fortuna nos estaba yendo bastante bien y ya éramos bastante conocidos
- Oh que gusto me da que ya tengan un proyecto de esa magnitud en mente y que les esta ayudando muchisimo - Respondió mi padre
Esta conversación me parecía bastante aburrida solo quería irme a casa
Por momentos César desviaba su mirada hacia mi y si las miradas mataran yo ya estaría sin signos vitales en el piso del comedor
Las charlas continuaron y César no me quitaba la mirada de encima, no sabía exactamente cuál era su maldita intención pero no la iba a descubrir
Horas después mis padres decidieron que era hora de retirarnos
- Bueno, ha sido un placer para mí el reencontrarnos, lastima que no pudimos poner al tanto a la familia sobre lo que planeamos - Dijo Ramón a mi padre quien en ese instante se le noto bastante nervioso
- Si, es una pena pero necesito hablar primero con mi familia a cerca del asunto y después vendremos para darte a conocer nuestra decisión- Dijo mi padre a Ramón antes de levantarse y disponerse a despedirse
- Perfecto, no llevo prisa, meditalo y me cuentas que pensaste - Dijo Ramón quien de inmediato se levantó para alcanzar a mi padre
- Bueno, ya debemos irnos, les prometemos que la próxima cena será en nuestra casa - le dijo mi madre a Paola quien se encontraba bastante gustosa
- Por supuesto, ahí estaremos - Dijo paola mientras abrazaba a mi madre y se despedía con un beso en la mejilla
Yo simplemente les salude de mano a todos y antes de salir César me dijo lo siguiente
- Vaya, será para mi un enorme placer el seguir conociéndote puede que me llegues a sorprender más- me dijo para brindarme una sonrisa
Si cree que puedo llegar a tener una amistad ó una cuestión de amigovios estaba bastante equivocado
- No puedo decir lo mismo - Masculle en su dirección para encamiarme a la puerta y subir al auto, me había despedido de los demás con un simple abrazo
- Eso lo veremos - Decía César antes de que yo cerrase la puerta
El trayecto a casa fue muy tranquilo, estaba tan agotada que ya no me quede a charlar con mis padres simplemente subí me puse la pijama y me dispuse a dormir.

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