Capitulo 20

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Narra Laila:

Ala mañana siguiente me desperté al escuchar risas en la cocina, me acostumbre a la luz que entraba antes de saber dónde estaba, porque lo último que recordaba era estar viendo la segunda peli y cerrar los ojos en el sofá, poco a poco me acabe despertando completamente y me di cuenta que estaba en una habitación pero esta no era en la que yo había dejado a Danel, esta no tenía las paredes blancas si no grises, en la cama había únicamente dos almohadas y reinaba un montón de fotos de Carlos y algunos pequeños premios de las distintas Fórmulas desde la 3 hasta la 1, me levante para apreciarlas más de cerca y una foto me llamo la atencion, yo habia echo esa foto, era una en la cual Carlos estaba en la playa de Mallorca sonriendo con Piñon, me acordaba muchísimo de esa foto

-Puedes posar bien?- me rei

-Así, en plan modelo- me dijo Carlos haciendo una pose muy rara

-Haz lo que mejor se te da- rei

-No veo un coche por aquí-se rio el

-Piñon!-dije al verle venir hacia nosotros

-Ven aquí chico-le dijo Carlos

Y ese fue el momento exacto de la foto.

Con una sonrisa y lista para empezar el día fui hacia la cocina para encontrarme la imagen más bonita del mundo, Carlos y Danel cocinaban juntos y reían, saqué el móvil rápidamente para capturar esa imagen, sin que ellos se dieran cuenta.

-¿Qué hacen los chicos más guapos del mundo?-pregunte sentandome en una silla de la isla

-Mamaaa-grito Danel viniendo a darme un abrazo

-No te queríamos despertar, te veías tan agusto- explicó Carlos echando un paño a su hombro

-Estaba muy agusto-sonreí

-Hemos hecho tortitas, y las mías son de dinosaurios!!-exclamo Danel

-Y tambien habeis echo para mi?-pregunte

-Si- me sonrio mi hijo -Asi hacemos un desayuno familiar- siguió el hablando, una frase que a mi me helo pero un frase que hizo que la sonrisa de Carlos se ensanchara

-Por qué no vas poniendo los cubiertos?-le propuse Carlos a mi hijo

-Valee-dijo él cogiendo los cubiertos y yendo al comedor

-Hola-me sonrio Carlos antes de darme un beso

-Hola-dije y yo para después besarle

-E echo mal al hacer tortitas?, no se que come habitualmente-me dijo Carlos preocupado

-Lo has hecho genial, aparte que tus tortitas son las mejores del mundo-sonreí dejando un pico en sus labios antes de coger los platos y llevarlos a la mesa

Nos sentamos en la mesa de este modo, Carlos presidiendo la mesa, Danel a su izquierda y yo a su derecha

-Hoy ya empiezas con los entrenamientos?-le pregunté a Carlos

-Si, y a la tarde tengo medico-me contestó con una sonrisa

Danel comía tan tranquilo sin hacernos caso a ninguno de los dos, y Carlos al percatarse de eso me pregunto

-Tu cuando tienes la cita con los abogados?-

-El jueves, y el mañana con el director de la película-sonreí

-Las dos te van a salir genial-dijo el agarrando mi mano y depositando un beso, me apoyé en su hombro mientras veía como Danel desayunaba, qué haría yo si me quitasen a Danel?, qué haría yo sin mi rayo de luz en la tormenta?, ahora que era madre cada dia entiendo menos a mi madre, ella no lucho por mi en cambio renuncio a mi a la primera de cambio, yo no era capaz de hacer eso con Danel, le amaba más que a mi misma, Danel era mi todo, era mi luz, era mi tormenta, era mi agonía y mi alegría, lo era todo y ahora, ahora todo se iría al traste. No sé en qué momento empecé a llorar solo se que Carlos me limpio una lagrima y me abrazo, no estaba bien estaba cansada tanto física como mental mente, todo había sido demasiado rápido, todo era una bola de emociones que no sabía sobrellevar

-Laila, por que no hacemos una cosa, yo me llevo a Danel conmigo, y tu te relajas, en mi baño hay una bañera de hidromasaje, quédate ahí hasta que estés arrugada como una pasa- bromeo él y a mi me saco una sonrisa, no por la broma si no por el esfuerzo –¿Hacemos eso vale?-

-Vale-sonreí , él dejo un beso en mi frente y luego se dirigió a mi hijo

-Danel, te apetece venirte de aventura conmigo?-le pregunto

-De aventura?! a donde?- dijo el emocionado

-Ya veras te lo vas a pasar pipa- le dijo Carlos

Minutos después todos habíamos terminado y yo estaba cambiando a Danel por una ropa deportiva, por que sabiendo como era mi hijo podía deducir que correría de un lado a otro

-Mami, tu no vienes?-me pregunto el mientras terminaba de vestirse

-No cariño hoy no- respondí

-Osea que va ser una mañana de chicos?-preguntó él emocionado

-Exacto-

-Sabes mami, me gusta Carlos, es muy majo y me hace tortitas de dinosaurios- sonrió él

-Si?, me alegro mucho bebe-

-Si, asique si quieres puede ser mi nuevo papá- me sonrió el

-Cariño, tu sabes que por muchas cosas malas que haga tu papa si tu quieres le puedes seguir queriendo verdad?-

-Pero es que no se como era, no le puedo querer mami, tu me decias que era astronauta por que no querías verme mal pero entonces no se nada de él, y de Carlos si- me sonrio

-Papa, papa era raro, habeces no se portaba muy bien-intente explicar

-Y por que no mami? no me queria?-preguntó el apunto de llorar

-No lo se mi amor, tu papá era raro, y no es que no te quiera es que no te conoce por que si te conociera te amaría- hable abrazandolo

-Carlos me ama?-pregunto el

-Te tiene muchísimo cariño, asique no se si te ama o no, pero sí que sé que te quiere un montón-sonreí

-Entonces el puede ser mi papa?-preguntó el ilusionado

-Eso no está en nuestras manos, pero sabes lo que sí está en tus manitas?-

-El que mami?-

-El disfrutar cuando pases tiempo con él, como ahora-sonreí

-Lo are mami-dijo dejando un beso en mi mejilla

-Renacuajo!! estas ya?-grito Carlos desde la puerta, Danel salió corriendo mientras que yo le seguía

-Lo tienes todo?-le pregunto

-La mochila!!-dijo el volviendo a la habitación

-Si te molesta me avisas y- empecé a hablar cuando Carlos y yo nos quedamos solos en la puerta

-Laila, relájate va a estar bien, los dos vamos a estar bien-me sonrió él dejando un beso en mis labios

-Ya estoy- dijo Danel volviendo con su mochila

-Dile adios a mama-le dijo

-Adiós mami, te quiero-dijo Danel abrazando mi pierna para luego darle la mano a Carlos

-Nos vemos luego-dije cerrando la puerta 

Forever and EverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora