Capitulo 27

34 4 0
                                    

Cuando llegamos al restaurante Carlos salió del coche y me abrió la puerta

-Señorita- dijo él en tono juguetón, reí negando con la cabeza y cogiendo la mano que me ofrecía para salir del coche, le dio las llaves del coche al valet parking y luego entramos, nada más ver a Carlos nos llevaron a una mesa apartada, el lugar era precioso, las paredes parecían de la época Victoriana y el ambiente era cálido. Carlos espero a que me sentara para luego acercarme a la mesa.

-¿Qué te parece el sitio?-preguntó el nervioso cuando se sentó

-Es precioso-conteste con una sonrisa

La conversación salió fácilmente después de pedir la cena,

-Sabes de que me suelo acordar mucho?-pregunto el con una sonrisa

-Sorprendeme- rei

-De nuestro primer viaje, te empeñaste que querías ir Islandia-río el

-Tu no te negastes a ir-me rei

-Verdad no te falta, pero acabamos en el hotel con catarro por el frío-se rio el

-Pero fue un muy buen viaje- puntualice

-Por que estábamos juntos- puntualizó el con una sonrisa-Deberíamos de volver, pero con ropa térmica- continuó hablando

-Los dos?-pregunte

-Los tres, Danel, tu y yo-contesto, sonreí al pensarlo

-Volveremos algun dia-sonreí

-Es una promesa?-dijo con tono de broma

-Es una promesa-afirme, el me sonrio y yo le devolví la sonrisa

-Si te digo una cosa no te enfadas?-me pregunto acercandose mas a mi, negué con la cabeza

-Echaba de menos tener citas contigo, en sí te echaba de menos a ti- confesó el

Me acerque a él con la mesa entre nosotros y le di un beso en los labios

-Siento haberme ido, siento haberte echo daño- me disculpe cuando nuestros labios se separaron

-No lo vuelvas a hacer, por favor- su voz era más de súplica que otra cosa

-No lo volveré a hacer- afirme,

El que se acercó esta vez fue el y el que me beso también, llevo una de sus manos a mi mejilla y yo apoye mi mano en el lugar que estaba la suya, habíamos hecho un pacto, una promesa, y la quería cumplir, por primera vez la gente me dio igual todo me daba igual, por que solo estabamos el y yo, solo estábamos Carlos y Laila, juntos.

-Me da igual si te asusta Laila- me dijo al separarse de mis labios -Pero te quiero, te quiero y creo que aunque lo hicieses 40 veces nunca dejaría de hacerlo- confesó él en un susurro

-Creo que te quiero Sainz, pero tengo miedo de volver a joderlo, a joderte-confesé de la misma manera que el

El me sonrió antes de hablar -se que no lo harás, confio en ti-

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: 7 days ago ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Forever and EverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora