Himiko estaba sentada en la sala de la casa de los Todoroki, organizando algunos documentos de la agencia mientras esperaba a Shoto, quien había salido a entrenar. La rutina del día la había dejado tranquila, disfrutando de la calma antes de que el bullicio del mundo exterior volviera a irrumpir en su vida, Pero esa paz se vio repentinamente interrumpida.
Un portal negro, oscuro como la noche, se abrió de la nada en medio de la sala. Himiko apenas tuvo tiempo de reaccionar antes de que una figura cayera del portal, desplomándose en el suelo. Himiko se levantó de un salto, sus documentos esparciéndose por el suelo mientras corría hacia la figura inconsciente.
Al acercarse, su corazón dio un vuelco. La chica que yacía en el suelo... era ella misma. Bueno, casi. La Himiko Toga original, la de la Liga de Villanos, estaba gravemente herida, su ropa desgarrada y cubierta de sangre. Himiko sintió una mezcla de confusión, miedo y algo que no podía definir del todo al ver esa versión de sí misma.
Con rapidez, Himiko arrastró a su otra versión hacia su habitación. La colocó en su cama y comenzó a tratar sus heridas con la misma destreza que había adquirido durante sus años de lucha. A medida que trabajaba, su mente bullía con preguntas. ¿Cómo había llegado esta otra Himiko aquí? ¿Y por qué?
Mientras la otra Himiko seguía inconsciente, Himiko del fic observaba su rostro. Aunque los rasgos eran idénticos, había una dureza y una vulnerabilidad que no reconocía en sí misma. Era como si estuviera mirando un reflejo de su pasado, de lo que podría haber sido si no hubiera encontrado un nuevo camino.
Después de asegurarse de que las heridas de la otra Himiko estaban tratadas lo mejor posible, Himiko bajó al primer piso justo cuando Shoto regresaba del entrenamiento. Apenas lo vio, le dijo con urgencia:
-Shoto, sube rápido, Tienes que ver esto.
Shoto notó la preocupación en la voz de Himiko y no dudó en seguirla escaleras arriba. Cuando entraron en la habitación, sus ojos se abrieron con sorpresa al ver a la otra Himiko inconsciente en la cama.
Su mente comenzó a trabajar rápidamente, buscando una explicación para lo que estaba viendo.
-¿Qué pasó aquí? -preguntó Shoto, sin apartar la vista de la figura en la cama.
-Estaba organizando algunos documentos cuando, de repente, apareció un portal negro -explicó Himiko, su voz temblando ligeramente- Y ella... cayó del portal ya inconsciente, No sé cómo llegó aquí.
Shoto se acercó a la cama, examinando a la otra Himiko, De repente, notó un teléfono que estaba parcialmente oculto entre las ropas desgarradas de la chica. Lo tomó y comenzó a revisarlo, sus ojos abriéndose aún más a medida que veía las imágenes en la pantalla.
-Esto... -Shoto se llevó una mano a la boca, claramente en estado de shock.
-¿Qué pasa? -preguntó Himiko, acercándose más para ver lo que él estaba viendo.
Shoto, con la voz cargada de incredulidad, le pasó el teléfono a Himiko. Ella lo tomó y, al mirar la pantalla, sintió que el suelo bajo sus pies desaparecía. Las imágenes en el teléfono mostraban a la Liga de Villanos, a Tomura Shigaraki, Dabi, y a sí misma... pero no como la mujer que había trabajado tan duro por redimirse. No, era la Himiko Toga de antes, la que no tenía restricciones ni remordimientos.
Ambos se quedaron en silencio por un momento, la tensión en el aire palpable mientras procesaban lo que esto significaba. Finalmente, Himiko y Shoto se miraron, compartiendo la misma confusión y temor,Casi al mismo tiempo, susurraron la misma pregunta:
-¿Cómo?
La situación era surrealista, pero ambos sabían que tendrían que enfrentarse a esta realidad, por más increíble que fuera, El destino, de alguna manera, había traído a la Himiko del pasado a sus vidas, y tendrían que descubrir qué hacer con ella.
Fin de Prólogo