Shoto y la Himiko de la liga de villanos salieron de la casa en silencio, dejando atrás la calidez de la residencia Todoroki y adentrándose en la fría noche de la ciudad. El aire fresco los envolvía mientras caminaban por las calles iluminadas por las farolas. Shoto miró de reojo a Himiko, aún sorprendido por la situación inusual, pero decidido a hacer que la salida fuera lo más tranquila posible.
-Entonces... -comenzó Shoto, buscando romper el silencio incómodo- donde quieres ir hay un parque cercano o podríamos ir a algún café que aún esté abierto.
Himiko, con una sonrisa que escondía su naturaleza traviesa, observó su entorno con curiosidad.
-El parque suena bien, Necesito estirar las piernas -respondió, manteniendo un tono ligero.
El parque al que se dirigieron era un pequeño espacio verde en medio de la ciudad, con bancos de madera y senderos serpenteantes. La luz de la luna se filtraba a través de las ramas de los árboles, creando sombras suaves sobre el suelo. Era un lugar tranquilo, perfecto para despejar la mente.
Himiko se dejó caer en un banco, observando a las pocas personas que aún paseaban por el lugar. Shoto se sentó a su lado, tratando de entender a esta versión de Himiko, tan diferente a la que conocía, pero al mismo tiempo, tan familiar.
-Debe ser raro para ti, ¿no? -comentó Himiko, rompiendo el silencio.
-¿El qué? -preguntó Shoto, girando la cabeza para mirarla.-Tener a dos versiones de la misma persona en tu vida, Debe ser confuso, Me imagino que nunca esperaste algo así.
Shoto reflexionó por un momento antes de responder.
-Es extraño, sí. Pero creo que estoy acostumbrado a lo inesperado, Mi vida nunca ha sido exactamente... normal -admitió, recordando su complicada relación familiar y los desafíos que había enfrenta como héroe.
Himiko asintió, comprendiendo a su manera. Aunque sus vidas habían sido radicalmente diferentes, ambos habían tenido que lidiar con situaciones fuera de lo común, lo que les daba una especie de entendimiento mutuo.
La conversación continuó mientras caminaban por el parque, ambos compartiendo más de sí mismos de lo que inicialmente habían planeado. Himiko habló de cómo se había sentido siempre en conflicto con su naturaleza, pero no reveló demasiado sobre su pasado.
Shoto, por su parte, mencionó sus propias luchas, las expectativas que su familia había puesto sobre él y cómo había encontrado una especie de paz al lado de Himiko.
Después de un rato, decidieron que era hora de moverse a otro lugar.
Shoto sugirió ir a un centro comercial cercano, no solo para buscar algo de comida, sino también para encontrar algo de ropa nueva para Himiko.
-Creo que te vendría bien algo más... adecuado -dijo Shoto, refiriéndose a la ropa de Himiko, que claramente no encajaba en este mundo.
-¿Tienes idea de lo que costará eso? -respondió Himiko con una sonrisa maliciosa.
-No te preocupes -Shoto sacó la tarjeta de Endeavor y la mostró con un gesto despreocupado- Él puede permitírselo.
Himiko se rió, disfrutando del pensamiento de gastar el dinero del héroe número dos.
Mientras caminaban por los pasillos del centro comercial, Himiko eligió varias prendas que llamaron su atención, y Shoto, fiel a su palabra, pagó sin dudarlo.
La escena habría parecido casi normal a cualquiera que los observara: una pareja joven disfrutando de una salida nocturna, sin saber que ambos venían de mundos tan distintos.
Al llegar a casa, Himiko se sentía extrañamente cómoda con sus nuevas adquisiciones.
Al abrir la puerta, lo primero que vieron fue a la Himiko del fic, relajada en el sofá y jugando en su teléfono.
Al notar su presencia, la chica levantó la vista y sacó la lengua con diversión, un gesto que hizo que Shoto suspirara, pero con una leve sonrisa en su rostro.
-Bueno, parece que nos han estado esperando -comentó Himiko, entrando en la sala y mostrando sus nuevas prendas a su contraparte, quien las observó con una mezcla de interés y curiosidad.
Shoto se quedó un momento en la puerta, observando a las dos Himiko.
Era una imagen que nunca habría imaginado, pero una que, en cierto modo, le parecía casi... natural.
Había algo en la forma en que estas dos versiones interactuaban que lo hacía sentir que, de alguna manera, todo esto tenía sentido.
La noche continuó de manera tranquila, y la Himiko del fic finalmente se retiró a descansar después de asegurarse de que todo estaba en orden.
Mientras tanto, Shoto y la Himiko de la liga de villanos se quedaron en la sala, compartiendo un "último" momento juntos antes de irse a dormir .
-¿Quieres algo más antes de irte a dormir? -preguntó Shoto, con un tono relajado.
-Hmm, ¿qué tal un baño? -respondió Himiko, lanzándole una mirada juguetona que hizo que Shoto se sonrojara ligeramente.
-Ah... no estaba esperando eso -dijo Shoto, tratando de mantener la compostura mientras se dirigía hacia su habitación.
-Solo bromeaba -respondió Himiko con una risa, claramente disfrutando de la incomodidad de Shoto.
Con eso, ambos se retiraron a sus respectivas habitaciones, cerrando otro capítulo en esta peculiar historia de realidades cruzadas.
Fin del capitulo
Siguient Capitulo - Salida 2