UN SISTEMA REBELDE

Capítulo 9 - Abriendo la puerta a la perdición

Como un prisionero, Zhu Kang siguió en silencio a Altren. 'Me siento como si hubiera hecho esto ayer. Al menos mi querido hermano no me lastimó ni nada, pero este tipo... puede freírme fácilmente'.

-"Nuestro transporte está aquí", Altren lo jaló hacia un Tesla brillante que esperaba cerca de las puertas.

En cuanto se acercaron, las puertas del coche se abrieron de golpe. En el asiento trasero estaba sentado un joven apuesto que tecleaba afanosamente en su portátil.

-"¿Cuánto tiempo piensan hacerme esperar?" Los miró con frialdad.

Zhu Kang lo miró en estado de shock. Este hombre parecía recién salido de una pasarela. Desde su mandíbula cincelada hasta sus cejas afiladas, lucía perfecto. Pero el único problema era que sus ojos penetrantes y volteados hacia arriba lo miraban con especial atención.

'Ajá, ¿quién es? ¿Por qué me esta mirando? ¿Se habrá dado cuenta de que lo estaba mirando?', bajó la cabeza y miró sus pantalones rotos.

-"Tío, te presento a mi nuevo amigo. Su nombre es Zhu Knag", Altren lo presentó felizmente.

Zhu Kang asintió. Los ojos de esa hermosa persona todavía estaban fijos en él. '¿Qué te hice, amigo? ¿Por qué me miras con mala cara, eh?'

-"Vamos, sube", Altren lo empujó hacia el asiento trasero.

'¡No hay forma de que me siente a su lado!' Se quedó paralizado cerca de la puerta.

-"¿Puedo sentarme adelante?"

Altren lo miró con curiosidad.

-"Mi tío no te va a comer. Solo entra".

Lo empujó y cerró la puerta detrás de él.

Zhu Kang, que fue empujado bruscamente, se tambaleó tratando de no tocar al hombre que estaba a su lado. 'Su traje parece más caro que mi matrícula si lo arrugo un poco...'

-"Siéntate bien", dijo una voz severa a su lado.

-"Sí, señor", Zhu Kang se sentó derecho.

El hombre lo miró fijamente y suspiró.

-"Tu cinturón de seguridad".

Esta vez, su voz fue un poco más amable.

Zhu Kang lo miró sorprendido.

-"Oh... lo siento", tiró del cinturón de seguridad de los costados. Pero de alguna manera sus torpes manos no lograron abrocharse el cinturón. 'Mi estúpido cuerpo, ¿decidiste avergonzarte frente a este hermoso hombre?'

Una mano larga le quitó el cinturón de seguridad y lo ajustó en su lugar.

-"G... gracias..." levantó la mirada con una pequeña sonrisa.

El hombre simplemente lo miró con su mirada todavía penetrante. "Hmmm..." volvió a escribir en su computadora portátil.

Zhu Kang se sentó nervioso con las piernas juntas. Miró por la ventana. Se dirigían a la zona menos concurrida. 'Hmm... ¿Adónde me llevan?'

El coche giró a la derecha y se encontraban cerca de la joyería. 'Espera, ¿no vamos a mi casa? ¿A ese lugar? Oh, no me digas...', miró a Altren y luego a su tío. "Umm..."

-"La casa está cerca, ¿verdad?" Altren miró hacia atrás y sonrió.

Se quedó paralizado. '¿Acabo de revelar nuestro escondite del villano? No... Este tipo parece saberlo'.

Entrecerró un poco los ojos.

-"Oye, ¿por qué no vamos al café que está al lado de esta curva? Será mucho más tranquilo".

Altren miró hacia atrás en silencio con una mirada vacía.

-"Dijiste que trabajaríamos en tu casa".

-"Pero mi casa es demasiado pequeña... será... incómoda", intentó reírse, pero Altren solo sonrió inocentemente.

-"Está bien, nunca había visto una casa pequeña. Será una buena experiencia".

Zhu Kang se mordió los labios y se contuvo de soltar malas palabras. '¿Pensabas que nuestra casa era un museo? ¡Ése es nuestro escondite, hombre!'. De repente, su mente se detuvo. '¿Cómo sabía nuestra dirección? Algo huele mal...'.

El Tesla se detuvo justo delante de su casa.

Altren bajó alegremente.

( bendiceme señor con tu espíritu~)

Por otro lado, Zhu Kang notó su expresión. El joven héroe parecía estar anticipando algo.

'¿Es una trampa? ¿Me van a capturar junto con mi hermano?', agarró con fuerza el cinturón de seguridad.

Se escuchó un pequeño clic a su lado y el cinturón de seguridad se aflojó.

-"Tengo trabajo que hacer", dijo el hombre ocupado con una mirada impaciente.

-"Lo siento..."

No le quedaba otra opción que bajar. El Tesla ni siquiera esperó un momento más. Pasó a toda velocidad junto a ellos, en dirección a la transitada carretera.

Se quedó parado torpemente frente a la puerta. Anoche mismo salió por la puerta dejando todo lo relacionado con los villanos.

'Ahora aquí estoy... ¿Qué dirá Gwyn cuando descubra que su héroe más odiado está a mi lado?' miró a Altren con una sonrisa falsa.

Altren le devolvió la sonrisa.

-"¿No vamos a entrar?"

-"Sí... sí..." hizo como si buscara en su bolso.

-"Vaya patoso... parece que dejé mis llaves en el dormitorio, jaja..."

Zhu Kang ni siquiera lo miró a la cara porque sabía que ese hombre debía tener una mirada fulminante en su rostro.

-"Parece que tendremos que cancelar el proyecto de hoy. ¿Por qué no lo hacemos otro día?"

-"Dije que era para la próxima semana", bajó la cabeza y lo miró directamente a los ojos.

-"Prometimos hacerlo en tu casa..."

Zhu Kang empezó a temblar. 'Aquí viene... mi momento de muerte'.

-"¿Qué estáis haciendo ahí?" gritó una voz molesta detrás de ellos.

-"Gwyn", dijo Zhu Kang y corrió a tomarle la mano.

-"Dijiste que teníamos trabajo que hacer, ¿verdad?", lo miró a los ojos con entusiasmo, rogándole que siguiera el juego. 'Por favor, di que tenemos trabajo... por favor.'

Gwyn lo miró de forma extraña.

-"Está bien".

Le entregó una bolsa de comestibles que tenía en las manos.

-"Tráela".

Sólo entonces notó a un joven de pie junto a la puerta.

-"Oh, ¿trajiste a un amigo? ¿Por qué no entraste tú mismo?"

Zhu Kang vio a su hermano abrir la puerta. '¡¡¡¡Nooooo!!! ¡¡¡Estás abriendo la puerta a la perdición!!!!!!'