Pasaron los años, Pascu y Rodri empezaron a hacer canciones juntos sobre mitología e historias reales. Cada vez estaban más juntos, eran mejores amigos.
A Pascu cada vez le gustaba más Rodri... cada vez aguantaba menos sus ganas de declararse. Más de una vez lo habia intentado, pero al tenerlo en la punta de la lengua, el miedo en su interior crecía, y se arrepentía cuando estaba por decirlo. Un día decidió volver a escribirle a Eva: - Oye Eva. - Dime Pascu. - Necesito tu ayuda. - ¿Ajam? Cuéntame. - Me quiero declarar a Rodri, pero no se como hacerlo. - Fácil, invítalo a tu casa... o haz que el te invite a la suya, luego le dices que tienes que contarle algo importante, se lo sueltas, y ya lo que pase... - Lo intentaré... gracias. - No hay de que, ya me contaras. - Jaja si, adiós, pasa buen día. - Adiós, igualmente.
Pascu, decidido en que iba a hacerlo, le escribió a Rodri: - Holaaaa Rodri - Hola pascuu, ¿que pasa? - Oye, ¿te gustaría venir a mi casa para cenar? - Claro, si quieres podemos pedir algunas pizzas. - Sii, buena idea, a las 21:00 te espero. - Alli estaré, hasta luego. - Hasta luego.
El día fue pasando, la hora iba llegando, Pascu tenía un nudo en la garganta y unos nervios tremendos. Al fin, al fin llego la hora, sonó el timbre, Pascu fue a abrir rápidamente. - Hola Rodrii - Dijo Pascu nervioso. - Holaa, ¿has pedido las pizzas o has esperado a que venga? - dijo Rodri. - No, aún no pedí nada, estaba esperándote para que me digas de que las quieres. - - Vale, ¿llamas tú o yo? - dijo Rodri mientras se sentaba en el sofá de un salto. - Yo llamo, no te preocupes. - seguido de eso, Pascu llamó a la pizzería, pidió 2 pizzas, una con piña y la otra barbacoa.
Mientras esperaban a que llegasen, Pascu se sentó al lado de Rodri y le dijo: - Oye, tengo algo que contarte... - dijo nervioso. - Dime .- Dijo Rodri tranquilamente, sin esperar lo que le iba a decir. - Pues... desde hace bastante... he sentido cosas por ti... y... me gustas... - dijo Pascu mientras abrazaba un cojín. Rodri se quedó petrificado ante esa confesión, a lo que le respondió; - Pascu... yo también sentía lo mismo.... No me lo puedo creer. - Pascu al escuchar sus palabras, no dudó en acercarse a su cara mientras se la agarraba con sus manos. Justo en ese momento, lo besó, Rodri no puso resistencia, a lo que le siguió el beso. Pascu, se sentó sobre el regazo de Rodri, haciendo que se excite aún más. Empezó a besarle el cuello y a darle pequeños mordiscos, mientras acariciaba su espalda. Rodri, comenzó a desabrocharle la camisa, haciendo que su pecho quedase al aire. Justo ahí, sonó el timbre; era el pizzero. Rápidamente los dos se recuperaron la postura, Pascu se abrochó la camisa y caminó hacia la puerta. Recogió las pizzas, las puso en la cocina, se fue otra vez hacia Rodri y le dijo: - Creo que las pizzas pueden esperar.- seguido de eso, Pascu se acercó a Rodri y lo empujó, haciendo que se tumbase en el sofá. Se sentó sobre Rodri y continuó besándole.
Rodri comenzó a quitarle la camisa, Pascu se desabrochó el pantalón, y pues... se lo quito. Continuado de eso, le quito la ropa a Rodri, haciendo que ambos se quedasen completamente desnudos. Rodri agarro en la cintura a Pascu, mientras el le acariciaba y le besaba todo el cuerpo. Rodri, por un momento apartó a Pascu: - Oye, ¿de verdad vamos a romper nuestra amistad...? - Dijo Rodri. - Rodri, tu y yo sentimos lo mismo el uno por el otro, podríamos ser algo más... si quieres claro. - Dijo Pascu con voz ronca.
Rodri se dejó llevar, y dejó que Pascu continuara... comenzó a tocar la entrepierna de Rodri, haciendo que se le escapara un pequeño gemido. - Me gustan esos sonidos...- Dijo Pascu con un tono relajado. Rodri aún agarrando las caderas, lo levantó un poco y le metió su entrepierna. Pascu gemio fuerte, y Rodri le dijo: - a mi si que me gustan esos sonidos...- Rodri movía sus caderas contra Pascu, y empezó a jadear. Sus movimientos cada vez se aceleraban más, y Pascu gemía más fuerte.
Rodri levantó su espalda para quedar medio sentado, aun empujando sus caderas contra Pascu. Pascu recostó su cabeza en el hombro de Rodri, aún jadeando y gimiendo cerca de su oído. Rodri al escuchar sus gemidos, empezó a excitarse más, hasta que llegó el punto en el que se corrió dentro de Pascu. Pascu se apartó de Rodri, y cayó tumbado en el sofá. Estaba destrozado (literalmente) Rodri abrazo a Pascu, viendo que lo había dejado muerto. Pascu también puso su brazo sobre el, abrazándolo de vuelta.
Rodri le susurró en el oído - Creó que si somos el uno para el otro. - y seguidamente lo besó. Pascu sin poner resistencia ninguna, siguió el beso. Cuando se separaron, se vistieron como si nada hubiese pasado, Pascu fue hacía la cocina a recoger las pizzas; aún seguían calientes. Nada más ponerlas en la mesa, comenzaron a comer sin hacer ningún ruido. Pascu seguía sin creérselo, el también le gustaba a Rodri, y acababan de... Algo que jamas había creído poder hacer con Rodri.
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