Enamoradas con el alma

Capitulo 3

Es sábado y el reloj marca las 8 pm. ¿A quien quiero impresionar? Llevo como 2 horas rebuscando el clóset y mi cama llena de ropa. Mi teléfono comienza a sonar; es ella:

-llego como a las 10 o 10:30 no se aún. Salgo del trabajo, voy a casa, me baño, me preparo y subo.

-no hay problema- le contestó

Prendo mi auto y voy camino al beer sola. Quedé con unas amigas allá. Hace mucho no sentía tantas mariposas en el estómago. ¿Porque provoca eso en mi?

Llego al lugar, me estaciono y procedo a buscar a mis amigas. ¿Donde se habían metido?

El beer es grande, tiene dos salones distintos de música, uno de billares y la terraza afuera con mesas y sillas. Entonces allí les vi a lo lejos, esperaban por mi en una de las mesas mientras platicaban y bebían.

Hola!- los saludé mientras me les acercaba

Hasta que al fin llegas, estás radiante- me comentan

Quedaba un lugar vacío, así que lo tome. Mientras tomábamos, le vi llegar a lo lejos. Vestía otro pantalón playero corto, con una camisa de botones más grande que su talla y unos zapatos blancos. Conectamos miradas y yo he quedado helada. Venía en dirección hacia mí y yo no podía ni siquiera mover las manos. Sé para a unos metros de mi, esperando a que yo me pare y valla hacia ella, pero mi cuerpo no reaccionaba. Entonces me mira confundida y se desaparece entre la multitud.

Que ha pasado?- me miran mis amigas confundidas

Hemos quedado aquí y yo ni siquiera he podido reaccionar- les expreso

Lo hemos notado- dicen en tono burlon

¿Que mierda acababa de hacer? Aún me sudaban las manos y el cuerpo no me reaccionaba, hasta que recibo un mensaje en mi teléfono:

-no me vas a hablar?- escribe Paola

Le debería contestar? Y si mejor me voy a casa? Dios mío la he cagado en grande.

-ostia me he puesto nerviosa- le contestó; porque le dije eso? Podría haberle dicho algo peor? No lo creo

-no me había dado cuenta jaja ven, no seas boba- contesta en tono burlón

Procedo a entrar al local y buscarla entre la multitud. Allí la vi, mientras bailaba con sus amigas, ¿podía ser más hermosa? No lo creo. Camino en dirección hacia ella, comienzo a sentir como mis manos sudan más de lo normal y como el corazón late a toda velocidad.

-hola- le digo; es lo único que sale de mi boca

-hola- me mira y sonríe

Allí comenzamos a charlar y bailar. Las horas pasaban y yo no dejaba de pensar en lo bien que la estábamos pasando. De un momento a otro comienza a sonar la canción "todo de ti" de Rauw Alejandro. Aunque cambiaba el ritmo del baile, no quería dejar de bailar con ella. Entonces me giro y quedamos frente a frente. Pongo mis brazos alrededor de su cuello mientras Paola me rodea la cintura.

Estamos frente a frente; mientras la música sonaba de fondo, bailábamos al ritmo de la música. Podía sentir su respiración en mi cara, su piel tan lisa y sus manos en mi cintura. Estábamos rodeadas de muchísimas personas pero en ese preciso momento, sentía que éramos solo nosotras dos en la pista de baile. No podía dejar de admirarla y es que su cabello corto ondulado era quien la caracterizaba. Estaba siendo el momento más mágico de mi vida. La conexión que yo sentía en ese momento, no la había experimentado nunca en mi vida.

Una vez salimos de allí, fuimos directo al auto. Estuvimos horas hablando hasta que llegó el momento de despedirnos. No quería irme, podría estar todos los días de mi vida aquí, junto a ella.

Puedo abrazarte? - pregunta Paola

No supe qué decir. Mis manos comenzaron a sudar y mi corazón latía más de lo normal. Entonces me acerqué y le abracé. No pude evitar recostar mi cabeza en su hombro.. su olor corporal en ese preciso momento, se había convertido en mi perfume favorito. ¿Como se podía sentir tan bien estar en brazos de una desconocida? No quería despegarme, quería estar allí para siempre.

Nos despegamos un poco y la mire directamente a los ojos. ¿Que tenían que me gustaban tanto? Quería besarla, las únicas neuronas que funcionaban en ese preciso momento, lo deseaban.

Entonces me le acerqué, pero ella se alejó. ¿Qué mierda? Pensé que quería lo mismo. Me alejo lentamente y miro hacia el otro lado. Mis mejillas estaban rojas y yo solo quería que me tragara la tierra. La vi de reojo rebuscando algo en su cartera y yo solo pensaba en cómo salir corriendo de allí. Entonces le vi metiéndose un chicle a la boca y mirándome fijamente. ¿Me estás jodiendo? ¿Se alejó solo para meterse un chicle a la boca? Qué mierda

-ven, bésame- me toma por sorpresa y yo quedo helada.

El corazón me latía tan fuerte que ella podía sentirlo a metros de distancia. Nos acercamos poco a poco, hasta que podía sentir su respiración. Entonces paso, mis labios rozaron los suyos, lentamente con una calidez que hacía que me derritiera. Sus manos recorrían mí cara mientras las mías se posaban en su cabello. Me besaba con tanta ternura que quería capturar ese momento para siempre.

No sabía que pasaría ahora. Si se desaparecería o se quedaría, pero yo anhelaba con todo el corazón, que se quedara.