Capítulo 4: Escapada Romántica

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La apretada agenda de Riki y Jisoo había empezado a pasar factura. A pesar de su éxito, ambos sentían la necesidad de desconectar y disfrutar de un tiempo a solas. Una noche, mientras miraban las estrellas desde el balcón de su apartamento, Riki tomó la mano de Jisoo.

"Jisoo, ¿qué te parecería si nos tomáramos unas vacaciones?" propuso. "Un lugar donde podamos relajarnos y pasar tiempo juntos, solo nosotros dos."

Jisoo sonrió. "Me encantaría, Riki. Necesitamos un descanso."
Después de mucho discutir, decidieron viajar a una pequeña isla en el Caribe. Habían visto fotos y sabían que era el lugar perfecto para desconectar del mundo y disfrutar del sol, la playa y el mar.

El día del viaje, ambos estaban emocionados. Se subieron al avión y se acomodaron en sus asientos. Riki no pudo evitar sonreír al ver a Jisoo tan feliz.

"No puedo creer que estemos aquí", dijo Jisoo, mirando por la ventanilla.
"Yo tampoco", respondió Riki, tomando su mano. "Es como un sueño hecho realidad."

Durante el vuelo, hablaron de sus planes para las vacaciones. Quieren pasar sus días nadando en el mar, explorando la isla, y por las noches, disfrutar de cenas románticas a la luz de las velas.

"Quiero aprender a bucear", dijo Jisoo. "Siempre he querido ver los arrecifes de coral."
"Yo te enseñaré", prometió Riki. "Y también podemos hacer una excursión en barco para ver las ballenas."

"Suena perfecto", respondió Jisoo.
Mientras el avión se acercaba a su destino, Riki y Jisoo se dieron cuenta de que esta sería la aventura más emocionante de sus vidas. Sabían que su amor era más fuerte que nunca y que juntos podrían superar cualquier obstáculo.

El sol acariciaba suavemente la piel de Jisoo mientras ella y Riki extendían una manta sobre la arena blanca. Habían encontrado un rincón apartado de la playa, rodeado de palmeras y con una vista espectacular del mar turquesa. Riki había preparado una canasta llena de bocadillos, frutas y su bebida favorita de Jisoo.

"Esto es perfecto", suspiró Jisoo, recostándose sobre la manta.
"Me alegra que te guste", respondió Riki, sonriendo.

Mientras comían, hablaron de todo y de nada. Recordaron los momentos más especiales de su relación y soñaron con el futuro. Jisoo se sentía inmensamente feliz. Nunca había imaginado que su vida podría ser tan perfecta.

Después del picnic, decidieron darse un baño en el mar. Riki tomó a Jisoo de la mano y la llevó hacia el agua. Nadaron juntos, riendo y jugando como niños. Cuando salieron del agua, se secaron al sol y se quedaron dormidos abrazados.

Al despertar, el sol comenzaba a ponerse, tiñiendo el cielo de tonos naranjas y rosados. Riki sacó una guitarra que había llevado y comenzó a tocar una canción que había compuesto especialmente para Jisoo.
"Esta canción es para ti", dijo Riki, mirándola a los ojos.

Jisoo se sintió conmovida. La canción era hermosa y hablaba de su amor y de todo lo que habían pasado juntos.
Cuando terminó de tocar, Riki se acercó a Jisoo y la besó. Era un beso lento y apasionado, que expresaba todo lo que sentían el uno por el otro.
Mientras miraban las estrellas, Jisoo se dio cuenta de que había encontrado todo lo que siempre había deseado. Tenía a Riki, a su familia y a sus amigos. Y lo más importante, tenía un futuro lleno de promesas.

Después de su relajante baño en el mar, Riki y Jisoo decidieron alquilar un kayak y explorar la costa. Mientras remaban, el sol comenzaba a ponerse, pintando el cielo de colores vibrantes.
De repente, a lo lejos, vieron algo que los dejó sin aliento. Un delfín jugaba con las olas, saltando y girando en el agua. Jisoo no pudo contener su emoción y comenzó a remar más rápido para acercarse a la criatura.
"¡Mira, Riki! ¡Un delfín!" exclamó.
Riki sonrió y aceleró el ritmo. Pronto se encontraban a solo unos metros del delfín, que parecía curioso por su presencia. El animal nadaba en círculos alrededor de ellos, saltando y chapoteando en el agua.
Jisoo sacó su teléfono y comenzó a grabar un video. "Esto es increíble", dijo, maravillada.

Riki, por su parte, sacó su cámara acuática y comenzó a tomar fotos. Capturó imágenes increíbles del delfín mientras nadaba junto a ellos.
De repente, el delfín se acercó aún más al kayak y saltó justo al lado de Jisoo. La chica soltó un grito de emoción y se agachó para tocar al animal con la mano. El delfín rozó suavemente su dedo con su aleta, como si la saludara.

"¡No puedo creerlo!" dijo Jisoo, con los ojos llenos de lágrimas. "Es como un sueño."

Riki sonrió y la abrazó. Sabía que este sería un momento que ambos recordarían por siempre.

Después de pasar un rato observando al delfín, Riki y Jisoo decidieron volver a la orilla. Mientras remaban, no podían dejar de hablar de lo increíble que había sido la experiencia.

"Creo que este viaje ha sido el mejor de nuestras vidas", dijo Jisoo.
Riki asintió. "Yo también. Y todo gracias a ti."

Al llegar a la orilla, sacaron sus teléfonos y buscaron las fotos que habían tomado. Las imágenes eran impresionantes. El delfín parecía posar para la cámara, y la sonrisa de Jisoo era contagiosa.
Esa noche, antes de irse a dormir, Riki y Jisoo se quedaron mirando las fotos. Sabían que este encuentro especial los había unido aún más.

Streets - Nishimura Riki Donde viven las historias. Descúbrelo ahora