13

107 17 1
                                    



Contuve el aliento y lo miré. Chan también guardó silencio. En silencio, solo la muñeca que sostenía temblaba con una leve sensación de ardor. Inadvertidamente lamí mis labios secos con mi lengua. Pensé que tenía que decir algo, pero no me vino nada a la mente. Chan solo me miró.

-Ah... ¿Necesita algo más...?

Al final de la oración, mis palabras parecieron perder fuerza. Chan no debía haberme escuchado. Sentí que mi corazón iba a estallar en tensión.

-¿...?

Quería preguntarle por qué estaba haciendo eso, pero no hable. Chan miró hacia abajo enfocando la muñeca que sostenía. Qué demonios. Su rostro parecía estar enredado con emociones complicadas, las cuales eran más difícil de adivinar. ¿Por qué Chan no podía abrazarme con esa mirada? Chan, que soltó un suspiro de repente me soltó, y me tropecé de regreso a la realidad.

Chan me rechazó sin verme.

-Está bien, sal.

Después de cerrar la puerta, mi muñeca se tiño de morado. Sentí mi cara calentarse. Suavemente levanté mi mano y puse mis labios sobre las marcas.

-...Ah.

Suspiros profundos fluyeron. Mi corazón estaba latiendo como loco, no podía caminar. Me apoyé en la puerta de su habitación, y sin querer tuve que cerrar los ojos para respirar durante mucho tiempo mientras estaba de pie.






Intente abrí los ojos por la mañana, sin querer gruñí. Después de algunos intentos, apenas levanté mis párpados. Cuando revisé mi muñeca sin saberlo, estaba ligeramente magullado. En silencio, me toqué. Mi pecho latía con fuerza, mientras estas contusiones permanecían.

Toqué mi muñeca con mis labios, pero de repente escuché un golpe.

Aparte la mano apresuradamente.
Me senté en la orilla de la cama.
Charles, entró.

-¿Estás despierto? ¿Qué te gustaría para el desayuno? El Sr. Bang dijo que comerá en su habitación.

-Ah...

Era una voz llena de desilusión incluso para mí.

Apresuradamente salí de la cama.

-Bajaré y comeré. Gracias.

Después de confirmar el pedido como siempre, Charles salió de la habitación. Después de eso, suspiré y dejé caer mis hombros. La mesa donde desayunaba con Chan todos los días no era demasiado grande. Era hora de comer juntos una vez al día, pero por qué me había acostumbrado tan rápido.

-Ah.

Incluso el sonido de un tenedor golpeando la mesa sonó tan fuerte que escupí un suspiro. Charles se puso de pie a mi lado intentado llenar mi vaso de jugo, me negué. Cuando regresé a la habitación y terminé los preparativos restantes, de repente me mareé.

Mientras estaba apoyado en la pared contuve el aliento por un tiempo, sentía una sensación que sacudió mi cuerpo. Sabía lo que era este sentimiento. A veces pasaba una vez al mes por un tiempo corto y otras veces, cada pocos meses por un tiempo prolongado.





Incluso en el auto que usábamos para trabajar, Chan nunca me vio a la cara. Fingí trabajar y miré la pantalla de la tableta, luego abrí y cerré el horario sin querer.

El silencio había sido más largo que nunca. De repente, el último día que lo vi me vino a la mente. Desayunar en su habitación esta mañana podía haber sido un simple capricho. Sin embargo, cuando recordé el día anterior, sentí algo inusual. Abrí la boca varias veces y luego la cerré. No era probable que respondiera solo preguntando por qué estaba de mal humor, ya que solo escucharía palabras sarcásticas, las cuales me lastimarían. Ya lo había experimentado.

KISS ME LIAR ≪Chanjin≫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora