Parejas

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¡Puta madre! Son casi las diez de la mañana y Emily no aparece por ningún lado. 

– Busquen a las afueras de la ciudad — Demando por teléfono. En cuanto el reloj marcó las 5 de la mañana, contrate a un ejército privado que en estos momentos la está buscando. 

Lo de ayer fue un puto error, estuve ocupándome de mis asuntos cuando llego Ava con su coqueteo y prácticamente no me dejo hablar, se montó encima de mí y junte todo el estrés junto con mi confusión por lo que siento por Emily y termine cagándola. 

Lo que siento por Emily se esta volviendo cada vez más grande y eso me asusta, soy capaz de mover cielo mar y tierra por verla contenta, planifique este viaje únicamente para poder estar con ella, pero jodí la única oportunidad que tenía. 
Estoy preparándome para salir a buscarla cuando escucho el timbre del ascensor avisando que llegó alguien. Entra sin siquiera hablarme o darme alguna explicación y yo empiezo a desesperarme. 

– ¿Dónde estabas Emily? — Le reclamo, pero ni siquiera voltea a verme, sino que sube — Tengo miles de agentes buscándote por todos lados. 

– No quiero hablar contigo— Dice con la voz un poco rara. 

– Pues vas a tener que hacerlo — La volteo haciendo que quedemos frente a frente y lo que veo me hace el corazón añicos. 
Esos ojos azules que siempre me ven con amor, esta vez están cargados de tristeza y se nota que no durmió, sus ojeras están pronunciadas, su pelo está despeinado… ¡Carajo! Soy un maldito desgraciado. 

– Verte me da asco Nicholas — Dice quebrando algo dentro de mí. 

– No digas cosas de las que te puedes arrepentir. 

– ¡Ya estoy arrepentida! — Grita — Me arrepiento de haberte conocido, me arrepiento de haberte preferido a ti sobre mi relación y ¡me arrepiento de amarte maldito infeliz! 

«Me ama» Esa simple palabra opaca toda la mierda que dijo. 

– ¿Me amas? — Repito atónito. 

– Si y me arrepiento cada día de mi vida — Una simple palabra es capaz de circuito todo mi cerebro, me ama carajo y lo jodí.

Se va dejándome completamente solo, pero esta vez hay algo diferente, siento una punzada en todo mi tórax, la cual no me deja en paz. Mi respiración se vuelve cada vez menos estable mientras todos mis pensamientos siguen atosigándome.

¿Fui tan estúpido, en este momento las palabras de Christian se vienen a mi cabeza «Emily es como la Cocaína comandante, el que la prueba se vuelve adicto» y yo? Yo me condené… 

No sé cuanto tiempo pasa, pero no me levanto hasta que escucho que Emily sale de la habitación. Ya no hay rastro de lágrima, está bañada y como si nada pasara. 

– Emily tenemos que hablar… — Sin siquiera verme pone una mano en señal de silencio. 

– No quiero escucharte más, acaban de llegar los demás — Dice sacando su maleta de mi habitación y ese sencillo gesto duele como la mierda— Todo lo que pasó entre nosotros quedará en el olvido y de ahora en adelante viviremos la vida como si no nos conociéramos ¿entendido? 

Justo cuando dice esto el ascensor titila en señal de que alguien está subiendo dándole paso a Paul, Scarlett y a Marcus. 

– ¡Mi amor! — Scarlett se lanza a mis brazos besándome toda la cara, la incomodidad es poca en cuanto veo a Paul besando a Emily. 

– Que bueno estar aquí — Dice el muy imbécil con las manos sobre el cuerpo de Emily, la cual se ve completamente incómoda. 

– ¿Qué hay hermano? — Marcus me da la mano junto con su típico y molesto manotazo. 

En ruinas (borrador) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora